La Obsesión De Un Emperador
CAP. 2
Aquel día no era como los anteriores. Las nubes habían gobernado por completo aquel cielo azul en una buena mañana.
Era como si el cielo mismo supiera lo que estaba sucediendo por debajo de él.
O simplemente era una coincidencia que estaba ocurriendo.
Johan salió de casa con una cara deprimida. Se veía completamente perdido como si no supiera hacia dónde ir.
Amelia
Mi niño ¿estas seguro de que quieres ir?
La señora Amelia se había enterado de la situación que estaba pasando Johan y, durante una semana estuvo con el para que no se sintiera solo.
Johan
(Sonríe un poco) Se que esta preocupada, pero estoy bien, enserió
La señora Amelia miró a Johan con una cara preocupada mientras que acercaba su mano a la cara de su contrario para poder acariciar por debajo de sus ojos.
Amelia
¿Cómo puedes decir eso cuando no has parado de llorar?
Johan
Soy tan débil como para no poder contenerme
De los ojos de Johan comenzaron a salir lágrimas.
Lágrimas que comenzaron a pasar por las maños de la señora Amelia, quien aún acariciaba las mejillas del más joven.
Johan
Gracias por estar a mi lado (Toma las manos de Amelia)
Johan
Se lo agradezco demasiado
Amelia
No tienes que agradecer, estoy a tu lado por puro gusto
Johan entre su sonrisa solto una pequeña carcajada mientras seguía mirando a Amelia.
Johan
Tengo que irme, se me hará tarde si no me voy ya
Amelia
Ve con cuidado mi niño
Después de tanto tiempo, volvería a donde una vez vivió.
A la gran casa de sus padres, donde pasó la mayor parte de su niñez.
Johan
Buenas tardes señor abogado
El abogado se quedó parado mirando por unos segundos a Johan y después pasó a sentarse al escritorio frente a él.
Abogado
Bien ya que todos han llegado, empezaré a dictar la última voluntad de la señora y el señor Ohara
Si, la mala noticia que había recibido Johan es que sus padres habían muerto. Fue tan doloroso en ese momento que se sentía perdido y solo.
Sarai
Que sea rápido, tengo mejores cosas que hacer que estar aquí (Enojada)
Johan
Sarai, se más educada
Sarai
¡¡Tu no eres nadie para andarme mandando!!
Johan
¡¡Soy tu hermano!! ¡¡Deja de estar actuando como una niña y compórtate!!
Abogado
Guarden silencio por favor
Abogado
No están aquí para pelear
Abogado
Permitanme terminar con mi trabajo
Abogado
Ahora comenzaré con la lectura de la carta que han dejado para ustedes dos
TESTAMENTO
La redacción de esta carta la elegimos en un buen momento donde mi esposa y yo tenemos nuestra plena capacidad mental. Esperábamos que no se tenga que utilizar tan pronto como lo hicimos.
Mis amados hijos Johan Ohara y Sarai Ohara serán los únicos en recibir lo que nos pertenecía cuando seguíamos vimos.
Comenzaré a nombrar las cosas que pasarán a su nuevo propietario una vez que se termine de leer nuestro testamento.
Tres casas con un valor aproximado a medio millón de pesos ubicadas en zonas seguras pertenecerán ahora a mi hijo mayor Johan Ohara, una cuenta de banco con dinero equivalente al doble o triple se una casa pasará a pertenecer a mi hijo mayor Johan Ohara, eso es lo que mi esposa y yo hemos decidido en nuestro buen estado mental.
La casa donde ahora vive nuestra hija menor, pasará a su nombre junto a las 2 camionetas que estaban en nuestro poder, sin embargo, Sarai Ohara nuestra hija menor tendrá que hacerse responsable a partir de esté momento de ella misma, no se le otorgara apoyo alguno por parte de su hermano. Hemos malcriado a uno de nuestros hijos solo por ser el menor, por eso es que no podemos confiarle tanto poder.
Sarai
¿¡Qué!? No puede ser posible ¡¡Yo debería ser dueña de todo!!
Sarai
¡¡Usted maldito viejo está leyendo mal el testamento de mis padres!!
Sarai
¡¡Tu no me vas a callar!! ¡¡DEVUÉLVEME LO QUE ME PERTENECE!!
Sarai
¡¡DEVUELVEMELO JOHAN!!
Sarai en un ataque de ira comenzó a acercarse a Johan con el propósito de dañarlo. Eso no fue posible gracias a que los guardias la detuvieron a tiempo
Sarai
¡¡Me las vas a pagar Johan!! ¡¡Esto no se quedara así!!
Sarai seguía maldiciendo mientras la sacaban del despacho. Johan, solo la miraba con una expresión de decepción.
Comments