Capitulo 4

A la mañana siguiente me despierto por las voces que se oían afuera de la habitación así que me levanto sigilosamente para no despertar a Nathan, estaba a punto de salir, pero recuerdo las indicaciones del libro para ser una buena señorita y me coloco un vestido apresuradamente para así salir de la habitación. Al abrir la puerta noto que es Javier y unos guardias

Elizabeth: ¿que sucede?

Javier: veníamos a despertar al general ya que es momento de regresar a él territorio

Elizabeth: pueden dejarlo descansar más anoche no descanso mucho - veo como Javier abre los ojos

Javier: ah claro me imagino que debe de estar cansado

Nathan: ¿que sucede? - dice Nathan parado detrás de mí

Elizabeth: ¿que haces de pie? Te abrirás la herida - él pasa su manos por mi cuello y pone su mano suavemente sobre mi boca

Javier: solo venía a decir que es momento de regresar al territorio

Nathan: bien que los hombres preparen todo para partir - Javier y los dos guardias tras él asienten y se marchan para ver mal a Nathan - ¿qué sucede?

Elizabeth: no puedes viajar estás herido - él me dirige una mirada extraña y yo me muerdo el labio y no digo nada más (total el que se va a morir desangrado es él no yo)

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Después de nuestra visita al pueblo noble he dirigido la palabra a ese hombre me he dedicado a ignorarlo, pero ya me he acercado un poco a las sirvientas de la casa más a las que trabajan en la cocina, ya que es mi lugar favorito de toda la casa

X: princesa tiene visita - me dice ella algo nerviosa

Elizabeth: ¿quién?

X: el rey y junto a él su prima - las muchachas al escuchar que mi prima está aquí empezaron a cuchichear

Elizabeth: bien iré a ver - voy a la sala y veo como mi dichosa prima está de cariñosa con mi esposo - buenos días ¿en qué puedo ayudarlos? - digo haciendo una reverencia por respeto al rey

X: hija deseaba saber cómo estabas? - yo abro los ojos (hija? ¿Este hombre es mi padre?) - ven a saludarme - yo levanto mi rostro y me acerco al hombre para así dejar un beso en su mejilla

Elizabeth: es gusto tenerlo en casa de visita padre - el hombre se quedó unos segundos quieto para luego regalarme una radiante sonrisa

X: ay mi niña me ha perdonado por lo que le hice? - (mierda cometí un error) - pensé que seguías molesta por haberte obligado a casarte con el general Marshall - veo a mi esposo el cual está serio mirándome

Elizabeth: eso quedó en el pasado

X: es así prima ya tan rápido te has olvidado del duque Sheila - veo como Nathan aprieta la mandíbula molestó - si hace poco matabas por él - veo a la mujer

Elizabeth:tú debes ser la típica mujerzuela que le encanta meterse en los matrimonios ajenos

X: Elizabeth - me reprocha mi padre - ten un poco de respeto hacia tu prima

Elizabeth: ja respeto? Eso es algo que se gana y con el poco tiempo que he conversado con ella pude darme cuenta la mosquita muerta que es, además de lo zorr@ - mi padre se levanta algo indignado y esa mujer comienza a llorar

X: prima por qué me hablas así? - dice con esa voz chillona

Elizabeth: es que no soy una mujer que le guste quedarse con lo que piensa - la miró nuevamente - si la visita terminó lo mejor será que se retiren no deseo que mi casa tenga el asqueroso olor de esta mujer. Ahora debo encargarme de conseguir un nuevo sillón, ése lo tendré que quemar - veo a Nathan que sigue a su lado - y al parecer no será lo único que arroje al fuego - creo que me di a entender por qué este se levanta y se aleja de la mustia esa

X: esto es algo que no te puedo perdonar tu prima estaba preocupada por ti por eso...

Elizabeth: entonces por qué no fue a buscarme a mi? Yo cuando llegue aquí la vi casi subida al regazo de Nathan - trato de calmarme sea como sea este hombre es un rey así que debo de mantener la compostura - por favor les pido amablemente que abandonen mi casa y que no se les ocurra volver - el rey toma a mi prima y le da un abrazo para luego salir de la casa. Mi mirada de desdén se dirige a Nathan él cual seguía mirándome como un idiota así que me doy la vuelta y volver a la cocina

X: señora eso de allá fue increíble me encantó como los echo de la casa

X: princesa debe ser más cautelosa el rey es conocido por su mal carácter - me dice mientras coloca una taza de té al frente mío - esto sirve para los nervios

Elizabeth: gracias Mary - ella asiente y su hija vuelve a hablar

X: madre, pero la señora hizo bien esa mujer solo viene para acá por qué desea meterse en la cama del general ella está casada y no tiene ni un poco de respeto hacia su esposo

Mary: está niña - la golpea - no estes hablando así de miembros de la familia real - la mujer mayor me ve - disculpe a Marianela ella le gusta hablar de más

Elizabeth: yo creo que ella tiene razón y ahora más que se que esa mujer está casada y aún así desea meterse en mi matrimonio

Nathan: Elizabeth - yo lo escuché claramente, pero hice como si no hubiera oído nada

Elizabeth: pero el que estuvo peor fue el general dejándose manosear por esa mujer - las mujeres hacían como si estuvieran haciendo su trabajo Marianela empezó a lavar platos y Mary a ver la comida - pueden creer que un poquito más y se van a la habitación

Nathan: Elizabeth - me vuelve a llamar

Elizabeth: creo que yo también debería de conseguirme a alguien que me abrace por las noches - las dos mujeres se quedaron paralizadas al oírme y los rápidos pasos de Nathan era lo único que se escuchaba en la cocina

Nathan: ¿a quien vas a conseguir? - me dice tomando mi rostro y haciendo que lo mire

Elizabeth: eso no importa, pero te aseguro que cualquier estaría feliz de pasar la noche con una mujer tan linda como yo - los ojos de Nathan estaban rojos de ira

Mary: general ya está lista la comida la sirvo en el comedor o desea comer en su cuarto? - es distracción fue la indicada para huir de mi enfurecido esposo

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