Capítulo IX: Parientes molestos parte 1

Nos despedimos con un ligero beso en los labios mientras Bernardo me estrecha entre sus fuertes brazos, estoy muy conmovida porque lo había extrañado mucho todos estos años que esto me parece casi un sueño

-Estamos en contacto – Dijo Bernardo con una sonrisa

Cada vez que sonríe de esa manera me hace estremecer, y necesitaba ya bajar de su auto de inmediato, o juro que me le abalanzo encima una vez más, porque parece que tanto tiempo de abstinencia me hace sentir insaciable

-Está bien – Respondí con frialdad

Bernardo acaricia mi mejilla con afecto y luego apoya su frente sobre la mía y comienzo a creer que me ha extrañado tanto como yo a él

-Pili…. – Susurró Bernardo con anhelo

No me dejo convencer porque ya en el pasado Bernardo me hizo promesas que no pudo cumplir debido a ser un hijo filial y fue muy difícil para mí superar el hecho de que la relación entre ambos no funcionaba

-Bernardo, esta vez no quiero escuchar promesas que no puedes cumplir – Le dije con severidad

Bajé del auto como si estuviera huyendo y cerré la puerta del auto, luego caminé en dirección a la entrada de mi casa, y mentiría si no digo que una parte de mí en este momento se siente muy feliz, pero otra, por el contrario, me advierte que no me haga ilusiones y tome las cosas con calma y que no ceda tan fácilmente como en el pasado

-¡Mamá finalmente llegaste! – Dijo Armando

Aunque finge estar molesto en ese momento al notar su aspecto desaliñado, sonrío porque me imagino cuál es el motivo

-¿Por qué no te has ido a tu casa? – Le pregunto enarcando una ceja

-Mamá le insistí en irnos a nuestra casa, pero él quiso quedarte para esperar a que llegaras – Dijo Leticia

Me pregunto si mi hijo me dejó un desastre en su habitación, pero luego recuerdo que ya es un adulto, así que sonrío, acaricio su mejilla y despeino un poco más su cabello

-Hijo no es bueno para tu salud que te desveles después de todo mañana tienes que ir a trabajar – Le dije con amabilidad

Mi hijo es tan adorable y protector en todo momento y debido a que siempre hemos sido solo nosotros dos, somos muy unidos, por eso no me gusta que se preocupe tanto por mí hasta el punto de perjudicar su salud

-¿Mamá que te pasó en el cuello? – Preguntó Armando con severidad

No entiendo a qué se refiere mi hijo, pero Leticia discretamente me señala cierta zona de mi cuello y recuerdo que un lujurioso hombre dejó varias marcas en mi cuerpo

-Cariño recuerda que es época de mosquitos – Dijo Leticia

Le sonrió con complicidad a mi nuera y me hago una lista para comprarle su postre favorito y compensarla por el favor, los veo marcharse y siento alivio porque no quiero que se enteren de la identidad de la persona con la cual tuve una cita esta noche

-Pienso tomarme las cosas con calma – Me dije a mí misma

Esperé a cierta distancia hasta me aseguré de que Maripilly entrara a su casa para encender mi auto, aunque su casa está ubicada en un lugar muy seguro, pero siempre quiero protegerla, observé como salía del lugar el auto de mi hijo y agradecí no estar en un lugar visible

-Leticia sé muy bien que eso no fue un mosquito – Dijo Armando

Leticia soltó una carcajada porque solo fue una excusa para no avergonzar a su suegra

-Tu madre es una mujer muy hermosa y joven, así que no es justo que esté sola – Respondió Leticia

El rostro de Armando se ensombreció porque era muy protector con su madre, después de todo al Maripilly ser una madre soltera e independiente económicamente atrae a muchos hombres inescrupulosos

-No quiero que nadie lastime a mi madre – Respondió Armando

-Ella puede defenderse por sí misma, además no va a esperar por tu papá por el resto de su vida – Dijo Leticia

Conduje hasta mi hogar en las afueras de la ciudad y me sentía muy relajado en ese momento pensando en lo que ocurrió esta noche

-Te prometo que esta vez todo va a ser diferente – Me dije a mí mismo

Sonrió con satisfacción porque si bien tenía muchas ganas de hacerle el amor no iba a presionarla, sin embargo, la abstinencia me estaba volviendo loco porque mi última relación fue hace un año

-No puedo culpar a Pili por dudar de mí, aunque lo bueno es que al menos ella no me rechaza – Me dije a mí mismo con una sonrisa

Llegué a mi hogar y me reí al darme cuenta de que estaba hecho un desastre y por suerte al día siguiente no tenía que ir a trabajar, así que comencé a ordenar el desorden de inmediato, mi taller comenzaría operaciones en un par de semanas cuando todos los permisos estuvieran listos

-¿Ahora que querrá mi mamá? – Me pregunté con molestia

Era la una de la madrugada y mi madre me estaba llamando a esa hora y de inmediato me sentí disgustado porque se suponía que aún vivía en Lansing y allá eran las 10 de la noche, así que debería estar durmiendo

-¿Bernardo te desperté? – Preguntó mi madre

-Por supuesto que me despertaste mamá – Respondí con enojo

Si realmente me encontrara en Lansing al día siguiente tendría que ir a trabajar y mi rutina empezaba a las 4 de la mañana y para mi mala suerte soy de esas personas que una vez que las despiertan no puede volver a dormir fácilmente y mi madre lo sabe muy bien

-Disculpa hijo, es que tenemos una emergencia en casa – Dijo mi madre con un tono de voz muy lamentable

Luego de lo que me mostró Armando de las redes sociales de mi sobrino no le creo nada de lo que dice mi madre, así que comienzo a enojarme y a preguntarme cuanto me va a pedir esta vez

-¿Mamá, qué pasó esta vez? – Pregunté con impaciencia

Noto el tono de duda en la voz de mi madre y la conozco lo suficientemente bien para saber qué está pensando en la mentira que me va a decir

-Damián tuvo un accidente con su auto – Dijo mi madre

Cree un usuario falso para seguir a mis sobrinos  y observo la más reciente publicación en el Instagram del vago de mi sobrino y este se encuentra celebrando con sus amigos en un conocido local de la ciudad

-Mamá, para estos casos es que pago un seguro contra todo riesgo para todos ustedes – Le respondo con enojo

Recuerdo el costoso seguro médico que pago para toda mi familia y lo coloco también en mi lista de pendientes, y me doy cuenta de que para mis parientes soy un tonto

-Bernardo ya sabes como son las empresas de seguro – Dijo mi madre

Niego con la cabeza porque me doy cuenta de que al parecer mi madre cree que soy un tonto, y siempre me ha menospreciado porque solo soy un graduado de una escuela de oficio lo que ella ignora es que es gracias a mi dedicación que ahora no solo soy bilingüe, sino que también tengo certificaciones para reparar autos de alta gama y esa es la razón por la cual la asociación de vecinos me permitió establecer mi taller en esta exclusiva zona

-Descuida mamá que ya voy a llamar al corredor de seguros para que pueda ayudarlos con este problema – Respondí con insistencia

Escucho la fuerte respiración al otro lado de la línea mientras que un resoplido inconsciente sale de la boca de mi madre y siento un raro placer porque he sido un hijo muy devoto y al parecer para ella mis esfuerzos no valen nada y solo quiere exprimirme hasta el último centavo

-Bernardo no hace falta porque yo misma puedo hacerlo – Dijo mi madre con desdén

-Mamá es tarde y debo ir a dormir, recuerda que mañana debo  trabajar – Digo con impaciencia

Por casualidades del destino o tal vez mi ángel de la guarda mi madre no cuelga la llamada y lo que ocurre a continuación es oro puro

-¿Mamá que te dijo Bernardo? – Preguntó Abigaíl

-Ese tacaño se negó a enviarnos dinero porque dijo que para eso tenemos el seguro médico – Respondió mi madre

Las escucho proferir en mi contra muchas palabras ofensivas solo porque no estoy de acuerdo en darles más dinero y por suerte tomé la previsión de grabar esta amena conversación para que luego no se atrevan a negar lo que dijeron acerca de mí y esto solo hace reforzar más mi decisión

-Mamá, tienes que tomar cartas en el asunto porque Bernardo está cada vez más rebelde – Dijo Abigaíl

Siento mucho resentimiento hacia mi hermana porque fue una de las que más conspiró para destruir mi matrimonio asegurando que Armando no era mi hijo, y aunque nunca dudé de mi paternidad eso hizo una grieta en nuestra relación que no pudimos reparar y terminó en divorcio cuando Armando apenas era un bebé de pocos meses

-No es eso Abigaíl, solo creo que nos excedimos en nuestras exigencias esta vez – Dijo mi madre

No es que mi madre se preocupe mucho por mi bienestar porque asume que al ser un hombre soy fuerte y resistente, pero es muy inteligente y sabe que no se puede tensar tanto de una cuerda o de lo contrario esta se rompe

-Damián necesita más dinero para terminar su estudio de grabación – Dijo Abigaíl de forma demandante

Las escuché a ambas discutir al respecto porque mi madre le dijo que debían pausar un poco sus exigencias o de lo contrario yo me daría cuenta

-Damián pronto va a ser un famoso gameplayer y a nadie le va a importar las protestas de ese bruto – Aseguró Abigaíl

Me sentí aburrido al escuchar los delirios de mi hermana, así que dejé mi teléfono a un lado mientras grababa la conversación entre mi madre y mi hermana y al parecer finalmente se dieron cuenta de que la llamada aún estaba en curso

-¿Crees que haya escuchado algo de lo que hablamos? – Preguntó Abigaíl con preocupación

-No lo creo porque ese tonto ya debe estar dormido – Respondió mi madre

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