ALGO ESTÁ CAMBIANDO

●Valentino: Salgo de mi casa lleno de furia, incapaz de soportar la idea de todo lo que ha tenido que sufrir mi pobre hermanito. Sé que Noah también ha tenido algo de culpa en todo ésto, ya que siempre ha acosado a ese maldito Luca, pero llegar a extremos tan graves para deshacerse de mi hermano nunca se lo perdonaré. Estoy convencido de que fue él quien ordenó hacerle daño a Noah. ¡Mierda! Desde el instante en que vi su rostro tan pequeño, juré que lo protegería, y ahora, con todo lo que ha sucedido, siento que he fallado como su hermano mayor, Al llegar a la imponente Mansión de los Mercier, una sensación de urgencia me invade. Salgo de mi coche con premura, pero me encuentro con la resistencia de varios hombres que intentan bloquear mi paso. Sin dudarlo, los empujo con fuerza, uno tras otro, hasta dejarlos en el suelo, incapaces de detenerme. Me acerco a la puerta y la golpeo con intensidad, haciendo que el eco resuene en la entrada. Con toda la rabia acumulada, empiezo a gritar: “¡Luca, sal de este maldito lugar y enfrentame como un hombre! ¿Dónde está mi hermano?”

●Luca: Después de ese maldito incidente que tuve con Noah, llegué a casa tan excitado que ni siquiera con mis pastillas logro calmar este calor que me provocó. No puedo hacer que mi verga se apague, y todo esto es culpa de sus malditas feromonas. Aunque, pensándolo bien, tienen un olor tan dulce y singular que me resulta casi irresistible. Mierda, ¿qué es lo que estoy diciendo? Decido darme una ducha con el propósito de relajarme un poco, pero, de repente, escucho a alguien gritando afuera de mi casa. Intrigado, salgo a ver quién es. Para mi sorpresa, me encuentro con Valentino Bernard, quien parece estar en una situación de desesperación. ¿Qué haces?, le pregunto, pero antes de que pueda terminar la frase, él me agarra del cuello y me empuja contra la pared, dejándome sin aliento. Me sorprende su reacción, ya que Valentino es una persona a la que, a pesar de su atractivo, le desagrada meterse en problemas.

●Valentino:deja de lado tus tonterías y dímelo claramente: ¿dónde está mi hermano? Me acerco un poco más a este sujeto y puedo percibir, con cierta claridad, el rastro de las feromonas de Noah. Lo miro con desdén y le digo: 'No intentes engañarme, porque puedo notar que llevas las feromonas de él. Así que, habla de inmediato o te advierto que soy capaz de hacerte daño, ¿me escuchaste?'

●Luca: esbozo una ligera sonrisa al notar cómo este bastardo pierde la calma, así que decido hablarle. Le digo: “Es cierto que lo vi hace un rato, pero fue solo por casualidad. Me acerqué a él para ver qué le sucedía, ya que parecía algo extraño. Sin embargo, como siempre, saltó hacia mí de una manera desesperada como una puta y me besó. Por eso, lo dejé tirado. Puedes entrar a mi casa y echar un vistazo; no te estoy engañando, aquí no está Noah y nunca entrará a mi hogar, ¿me escuchas?

●Valentino: Ten la certeza de que haré todo lo posible para que Noah nunca ponga un pie en este maldito lugar. Además, ¿por qué demonios tenías que acercarte a él? Tú mismo le dices que se mantenga alejado de ti. Maldito seas. Le doy un puñetazo que lo hace caer al suelo. Lo miro con furia y le advierto: solo espero que estés siendo sincero conmigo, y quiero que entiendas que jamás te acerques a mi hermano, ni siquiera si se siente mal. ¿Me escuchaste? Justo cuando estaba a punto de proseguir con las amenazas hacia este bastardo, mi teléfono comenzó a sonar. Me sorprendí al ver quién era el que llamaba, así que respondí de inmediato.

—Hola, Marco. ¿A qué se debe tu llamada a estas horas?

—Lo siento, sea lo que sea, en este momento no puedo hablar, estoy buscando a mi hermano pequeño.

—¿De qué estás hablando? ¿Gracias a Dios? ¿Y cómo está Noah?

—No te preocupes, voy para allá. Y gracias por haberlo ayudado, amigo.

●Luca: me levanto de repente al escuchar la conversación que Valentino estaba teniendo, visiblemente alterado. Con un gesto firme, lo tomó del brazo y le pregunto con furia: ¿Con quién demonios estás diciendo que está Noah? ¿Con Marco Hidalgo? ¡Tu hermano no puede esperar ni un segundo para ser follado por un Alfa, ¿verdad?! ¡Maldita sea! Déjame un momento que me cambio y voy contigo.

●Valentino: ¡Cállate, maldito seas! Eres un loco demente. Lamentablemente, mi hermano no tiene ojos para nadie más que para ti, pero hoy te juro que prefiero que Marco lo marque a que esté contigo. ¿Me escuchaste? Lo empujé con fuerza y salí de ese lugar con prisa, dirigiéndome rápidamente a la casa de mi amigo.

CASA DE MARCO

●Marco: Ey, ey, ¡basta! Cálmate. Estoy intentando contener la risa, pero las expresiones de Noah me lo impiden. No puedo evitar maravillarme de cómo ha crecido tan rápido y se ha convertido en un hermoso omega. Le fijo la mirada y le digo: No te preocupes, ya he llamado a tu hermano. Valentino y yo somos muy buenos amigos, así que él ya viene en camino para buscarte. Sin embargo, permíteme decirte que es la primera vez que escucho una forma de agradecimiento tan peculiar. Empiezo a notar cómo Noah se va tranquilizando poco a poco, y al mismo tiempo, veo que su rostro se sonroja.

●Noah: me encuentro en una situación complicada y comienzo a hablar con un tono algo nervioso. Entonces, este hombre me ha ayudado, y además es amigo de mi hermano, o sea, se trata de Marco. Con un poco de pena, le digo: 'Lo siento, es que estaba realmente asustado. Te agradezco mucho por tu ayuda; te prometo que de alguna manera me las arreglaré para compensarte por esto'. Pero, espera un momento, mencionaste que mi hermano venía a buscarme. ¡Él no estaba en la ciudad! ¡Dios, estoy en problemas!' Mientras pienso en esto, miro a este hombre y me doy cuenta de que está sonriendo. La verdad es que se ve bastante atractivo.

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