atención.

Cuando llegamos a la mesa, el tipo ni siquiera nos miró; él jugueteaba con la chica de su lado pero no podía evitar mirarlo, aunque de manera sutil.

Amigos, les presento a Nova y Sonia, dijo el hombre que vino por nosotras, y en ese momento yo me sentía muy incómoda El hombre aquel me miró de arriba abajo y, de inmediato, bajé mi vestido.

Uno de los hombres se levantó de inmediato y tomó mi mano y la besó. En mi mente solo pensaba en los miles de microbios que había dejado en mi mano, Claramente, su boca había estado en contacto con la de una chica. .

Nos sentamos y mi cuerpo rozaba el de aquel hombre que me había mirado durante toda la noche, lo cual me ponía un poco nerviosa.

—¿Pueden decirnos, chicas, qué es lo que les gusta de un hombre en la primera cita? Ya que estamos discutiendo al respecto.—preguntó uno de los hombres entre risas.

Sonia comenzó a hablar.

Los hombres no se dan cuenta de que nosotras queremos conocerlos y disfrutamos charlar, comentó Sonia, sonriendo mientras intercambiaba miradas con un chico de la mesa.

Yo sé lo que les gusta: mirar dentro de una cartera y así pueden averiguar si están enamoradas o no, respondió el hombre guapo, con una voz fuerte y masculina.

No pude quedarme callada y le respondí mientras todos se reían Pues molestaba que el tipo globalizara a todas las mujeres.

Tal vez observemos sus carteras, pero ustedes eligen a las chicas por sus largas piernas, gran busto, maquillaje o uñas decoradas de manera exagerada. Así que no se sorprendan si las chicas solo ven sus billetes, le respondí con enojo, el alcohol me estaba dando más valentía.

El hombre me observó intensamente y sonrió levemente mientras la chica a su lado se levantaba para irse.

¡Yo estoy contigo, amiga! - dijo Sonia con una amplia sonrisa.

¡Jaja, tienes toda la razón! - comentó uno de los hombres mirándome.

Una ronda más de bebidas llegó a la mesa. Sonia se había levantado a bailar con uno de los chicos que estaba allí, mientras que otra pareja al lado mío se besaba apasionadamente.

Vamos, amigo, anímate y lleva a la hermosa chica a bailar, dijo uno de los hombres sonriendo mientras observaba al hombre que estaba a mi lado, quien me ponía un poco nerviosa.

No dije nada, fue como si le dejara la decisión al hombre.

Cuando menos lo esperaba, él sin preguntarme me tomó la mano suavemente y me ayudó a levantarme del asiento.

¡Vamos! - me dijo el hombre con voz firme.

Estaba tan nerviosa que no podía pensar en otra cosa que en lo bien que olía el hombre y lo bien que se sentía por su ligero toque.

Sonia miró a Nova y sonrió. Después de tantos años de amistad, por primera vez Nova se relajaba y dejaba de actuar como su madre deseaba.

Desde su adolescencia, la madre de Nova la obligaba a comportarse como una señora, lo que le impedía divertirse o salir a disfrutar con sus amigos, incluso hasta el momento de graduarse.

Cuando todos fueron a la playa a celebrar, en lugar de unirse a ellos, la madre de Nova la llevó a un retiro espiritual que duró casi seis meses, separándola de todo su círculo de amistades.

En palabras de Lorenzo:

Desde el momento en que vi a aquella chica, capturó por completo mi atención. Sin embargo, en ese lugar solo conocía a mis dos amigos y a una de mis amigas, Laura, que estaba a mi lado.