Herencias Sangrientas.
Niki Mackenzie Drago (24 años)
Las discusiones de mi familia son siempre por la misma razón, estoy cansada, vuelvo a oír los gritos de mamá y mi hermano, cierro la puerta de mi habitación y tomo mi bolso, me visto y salgo por la ventana, iré al club para pasarla bien, es fin de semana y no quiero estar más aquí.
Doy un preciso salto sobre el pasto, aunque me pegue en mi trasero, pero no hay tiempo de quejarme. Paco me ladra y yo lo acaricio para que haga silencio, Me escabulle sobre la frontera del jardín y logro salir de la gran casa donde siempre se habla de dinero, negocios y economía, adiós a esta mierda.
Tomo un taxi y aquí voy a dejar la mala honda de mi casa que me afecta, voy a beber y bailar hasta que el sol nos pegue. Mi teléfono suena, es Eunice, mi gran amiga, me comenta que está en camino al hotel, le digo los planes para hoy y ya viene en camino al igual que yo, unos minutos y estoy aquí afuera esperando a que se aparezca.
(Jairo) Mackenzie tú otra vez aquí.
(Niki)Así es, ¿ya no quieres que vuelva?
(Jairo) No es así, sabes que el peligro es más grande cuando uno bebe y la última vez que te envié a tu casa estabas hecha trapo, no tomes mucho esta vez, es fin de semana y los jóvenes solo se divierten y no piensan en las consecuencias.
(Niki) Gracias, amigo, quédate tranquilo que hoy me voy por mis propios medios, me refiero a que saldré tranquilamente.
Niki
Niki
Niki
...
(Eunice) Niki, que te estoy hablando y no me haces caso, entramos ya. A lo siento, hola Jairo.
(Jaro) Señorita Cárter, bienvenida.
(Eunice) Gracias, amiga entramos.
(Niki) Sí. Espera un momento.
Jairo gracias 🙂.
Niki Mackenzie Drago...
Jairo es un buen amigo, tiene unos veinte años más que yo, es un tipo muy bueno, tiene familia y él da todo por ellos, caso contrario a la mía, mi padre vive viajando, mamá en sus juntas de amigas sobre Caridad y tanta cosa, Nicolás; mi hermano mayor, vive ocupado del trabajo a casa y su novia, tiene que sacar cita para poder tener una salida con él, y yo... Yo la oveja negra como dice mi madre, porque, porque no quiero dejar el modelaje para dedicarme a los negocios de la empresa.
Entramos al club y el olor a cigarrillos y trago inunda mis fosas nasales haciendo que mi cuerpo quiera bailar.
Así lo hago bailo y Eunice ríe, me sigue el paso, me ofrecen tragos, pero no acepto, esta noche no. Después de bailar, nos sentamos un rato, solo tomo agua y Eunice, ríe por ni actitud, está vez no, solo fumo uno que otro cigarrillo. Un joven viene e invita a Eunice a bailar, yo río y ella me mira como para que si acepta o no.
¡Ve!
Ella ríe y sale a bailar, yo aprovecho y me voy al baño, me lavo el rostro, me veo y traigo el maquillaje un poco corrido, saco de mi cartera pañitos desmaquillamtes, me limpio y salgo, pero en lo que estoy saliendo, siento como una mano tira de mí, me asusto y me presiona en la casi oscura pared, mi corazón se detiene, la otra mano cubre mis labios y se acerca a mí, rostro.
(Logan) Sí no quieres que una bala te atraviese la sien, sígueme el juego. Presa Fácil.
Su aliento me embriaga, yo no digo ni hago nada, me quedo inmóvil, cruza mi mano y la coloca cruzada a mi espalda, siento la pistola en mi cintura, así voy saliendo con él, pero no por la puerta principal, sino por una puerta que al parecer está cruzando el pasillo al cual jamás entré, él hace una señal con su mano y aquel portón se abre.
Este portón une a otro pasillo, aquí las luces son tenues, no nos quedamos en este lugar, él sigue avanzando hasta salir por una calle, un auto está esperando al parecer, yo con el miedo calando mis huesos, solo me quedo en silencio y acato todo lo que me dice.
(Logan) No hagas ninguna locura, solo serás liberada cuando tu padre firme el acuerdo.
(Niki)
(Logan) Tampoco preguntes. Si Mackenzie firma, tú en pocas horas podrás irte a casa.
(Niki) OK...
Él me cubre los ojos con un pañuelo, el auto enciende y nos vamos con dirección a no sé donde... No lloro, no digo nada, solo en mi corazón va juntándose el rencor por mi padre al que jamás le importe por ser mujer y bueno él decía o sigue diciendo que mi carrera es una carrera de mujeres sin cerebro, que los vegetales y las dietas, solo me han dañado las pocas neuronas que me quedan, jamás le importe, a mi madre tampoco y Nicolás, él solo es el títere de papá.
...No sé cuantos minutos han pasado, lo que si pasa, es que mis manos están adormecidas. El auto frena y él habla en códigos, eso creo, solo oigo que dice...
Delta en casa, objetivo gaviota completada.
(Logan) Baja como cuidado, no trates de gritar ni escapar, porque de aquí no sales si es conmigo o también puedes salir, pero muerta.
(Niki) Está bien, no me dañen.
Niki... No digo nada más y camino a tientas para no tropezar, el camino es de piedras pequeñas, eso creo, ya que no veo nada, solo el frío de la madrugada, me hace temblar, él me coloco al parecer su casaca o abrigo, siento un perfume sobre este. No sé lo que me espera y no sé dé que contrato habla, tampoco sé lo que mi padre decida hacer.
El sonido de una puerta se oye y el piso ya no es de piedras, ahora está lizo.
(Logan) Salgan todos, yo me encargó.
Niki... El tipo habla y es él quien me quita el pañuelo de mis ojos, la luz hace que los mantenga cerrado, me suelta las manos y yo las masajeo por el dolor que siento, poco a poco los abro y veo que estoy en una habitación, no es un calabozo ni mucho menos, es algo simple.
(Niki) Que me van a hacer...
(Logan) Sí tu padre sigue las indicaciones, nada te pasará.
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Comments
Rosa María Corrales Pèrez
Está muy interesante tu historia autora y gracias
2025-03-24
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