Buscando un local

Marlene veía feliz a Josefina.

¡Oh!, mi niña está enamorada.

No lo sé aún, Franco me gusta, pero hay algo que no me cuadra.

¿A qué mí?, no se ve que este muchacho sea malo.

No es eso, mamá, pero siento que Franco no es para mí.

¿Por qué lo dices?, se ve que es un muchacho educado. Además, es muy atractivo.

Entrégate al amor, experimenta tú misma las mieles del amor.

Entonces, ¿crees que puedo ser Feliz con Franco?

Si lo creo, mi niña.

Josefina abrazó a Marlene. Gracias, mamá, te amo.

Y yo a tí.

Más tarde; ya estoy lista, ¿cómo me veo?

Hermosa, anda, lucha por tu amor.

Bye, mamá, ya llegó Franco.

Hola, Josefina, qué hermosa te ves.

Gracias, tú también te ves bien.

Franco la llevó a comer a un restaurante muy discreto.

Pide lo que quieras, esta noche es toda tuya.

¿Sabes?, cuando mi mamá me llevó lejos de aquí, pensé que ya nunca te vería. Y ahora soy muy feliz de que estés aquí conmigo. Te amo, creo que te he amado desde que estábamos en la escuela.

Y yo a tí, a pesar de no haberte visto en años.

Ya sé, pero de ahora en adelante no nos separaremos más. ¿Aceptas ser mi novia?

Franco, claro que acepto. Siempre esperé este momento.

Franco se acercó a ella y le dio un beso en la boca.

Ella le correspondió, era el primer novio que tenía, y se sentía muy feliz.

De ahí se fueron al cine, ambos muchachos se veían felices.

A las 11 de la noche, Franco llevó a Josefina a su casa.

Mañana vendré por tí para ayudarte a buscsr un local para tu bufete.

Sí, amor, gracias.

Al entrar, vio a Marlene que la esperaba en la sala, estaba viendo un programa en la tele.

Hola, mamá...

Hola hija, ¿cómo te fue con Franco?

Genial, mamá, él y yo ya somos novios.

Felicidades, espero que seas muy feliz.

Bueno, voy a mi cuarto, necesito recrear en mi mente lo que pasó entre los dos.

Ándale, pues, picarona.

Solo nos dimos unos besos, no pienses mal.

No importa, yo solo quiero que seas feliz.

Ya en su cama, Josefina se acurrucó y empezó a recordar los besos que le diera Franco.

Por primera vez en la vida era muy feliz, el amor que sentía por Franco era auténtico.

Con esos recuerdos recientes pronto se quedó dormida.

Al parecer tenía unos sueños encantadores porque una sonrisa dibujaba su cara.

.

.

Yolanda veía a su hijo muy feliz, casi estaba segura de que era por una chica.

Te veo muy feliz, ¿hay una chica en tu vida?

Mamá, después te platico, ahora tengo prisa, voy a llevar a mi novia a que consiga un local para su trabajo

¿De modo que tienes novia?

Mamá, no tengo tiempo.

Franco salió sin despedirse de Yolanda, no le gustaba que se metieran en su vida.

Yolanda se quedó pensando, en por qué su hijo tenía tanta prisa.

"¿Quién será la chica que anda con Franco?", espero que no sea una lagartona, de las que abundan en esta ciudad".

"Tengo qué averiguarlo".

Franco pasó por Josefina puntualmente.

Hola, amor, ¿estás lista?

Sí, vamos. Al rato regreso, mamá.

Ve con Dios.

Franco le abrió la puerta del coche.

¿Sabes?, me ha ido muy bien, trabajo para una compañía de juguetes, soy administrador general, gracias a eso pude comprarme este coche.

Muy bien, yo apenas me voy a abrir paso.

Te irá bien, ya verás.

Eso espero.

Así, Franco y Josefina iban buscando un buen local.

Llevaban varias horas, hasta que Josefina dijo que tenía hambre.

Tienes razón, perdón, te llevaré a un restaurante muy bonito y después continuaremos buscando.

Gracias, amor.

Cuando terminaron de comer, siguieron buscando, hasta que por fin encontraron un local en una buena colonia.

¿Te gusta este?

Sí.

El dueño del local llegó más tarde. ¿Le gustó el local?

Sí, pero, ¿no habría manera de que lo comprara?

Normalmente, lo rento, pero si usted gusta se lo vendo, solo deme una semana para arreglar los papeles.

Está bien, y gracias.

Seré tu administrador, mi vida.

Gracias, lo voy a necesitar. Oye y cuéntame, ¿cómo está tu mamá?

Bien, la típica madre que siempre se mete en lo que no le importa.

¿Por qué lo dices?

Quiere que te presente con ella.

¿Y cuál es el problema? Además, ella ya me conoce.

En ese entonces eras una niña, y ya no creo que se acuerde de ti.

¿Tú crees?

La verdad, sí, pero no me gusta que se metan en mis cosas por eso le voy a dar largas para presentarte primero disfrutemos nuestro noviazgo, ¿te parece?

Claro que sí, me gusta mucho estar aquí contigo.

El beso no se hizo esperar.

Por un momento se estuvieron besando se separaron por falta de aire.

Gracias por estos momentos, mi amor, soy tan feliz a tu lado, Josefina le dijo de todo corazón.

Yo también te amo, y espero que siempre estemos juntos.

Espero que así sea.

Franco le empezó a besar y después sin que se dieran cuenta los besos empezaron a subir de tono.

Josefina fue la que se separó primero, amor estamos en un local mejor vámonos a casa.

Tienes razón, perdón, es que no lo puedo evitar estando junto a ti.

Bueno, será mejor que nos vayamos.

Franco dejó a Josefina en su casa, mañana voy a trabajar, vendré en la tarde.

Hasta mañana, amor.

Se dieron un beso profundo, y luego Josefina entró a la casa.

Gracias, amor.

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