capitulo 7 pedido de matrimonio

Pasaron dos días enteros sin saber nada de Tolentino, incluso Maslov fue a su antigua casa pero todo estaba cerrado .

Cosechó algunas verduras para su esposa y se marchó.

El moro tampoco estaba, seguramente no había regresado del pueblo envuelto en alguna borrachera.

La lluvia empezó para alegría del ruso , la lluvia pausada, no lavaría la tierra y las semillas brotarian .

Pronto los campos se llenarían de trigo y maíz, estaba feliz como un niño .

La primavera avanzaba con dias más cálidos.

Dominga había regresado sin noticias de su sobrina ,además le habían informado que habían liberado al esposo de su sobrina.

Regresó con la esperanza que apareciera ,algo que nunca sucedió .

Otro mes transcurría y Tolentino no tenia ninguna noticia relevante.

Solo cargaba preocupaciones que no pretendía compartir con esa muchacha tan inocente que no comprendía la realidad por la que atravesaba el país.

No había tenido oportunidad de alertarla de la última charla de su papá con el pastor .

Parecía que se había mudado con ellos,se pasaba todo el día rondando por allí siempre que venía.

Un día se levantó de la siesta y su madre cortaba un vestido blanco utilizando una pieza de ropa suya.

— ¿Que haces mamá??.— se sentaba después de tocar la tela.

— Un vestido de novias..— respondió, continuando lo que hacía.

— ¿Quien se casa en la colonia??, ¿O te encargaron un vestido del pueblo.? — estaba curiosa pelando naranjas.

—Es para ti,para cuando te cases.— le respondía tranquilamente.

— No deberías gastar energía en eso,me voy el próximo mes.

Me dijo la señora Dominga de una pensión económica en la que estuvo...— su madre se puso de pie dándole un susto.

—¡¡Basta Raquel!!.

¡¡No vas a ir a estudiar!!.

El pastor Luis pidió visitarte con intenciones de matrimonio,a tu padre y a mi nos parece bien y estamos de acuerdo.— finalmente escuchaba lo que temia hace tiempo.

—¿¡¡ Quée!! ?.— no podia creerlo.

— Lo que escuchaste.— afirmaba Sara.

— No pueden obligarme a casarme si no quiero.

Lo siento mamá no me gusta ese señor para esposo.— siguió comiendo las naranjas.

Su madre dejó la costura y la abofeteo bien fuerte.

Tanto que salió corriendo en lágrimas de la casa,intentó alcanzarla gritándole que parara sin suceso.

Queria irse a un lugar lo más lejos posible de los dos.

Tolentino la vio llegar y meterse a su antigua habitación desesperada.

— ¿Que sucedeu Raquel..?.— sentia que algo estaba mal.

— Quieren que me case con el pastor ese.

Me voy a quedar aquí,no voy a regresar hasta que cambien de opinión.— dictaminaba donde sería su nuevo hogar,como si eso solucionara algo.

— No te puedes quedar aquí, ficaria mal.

Van te casar de todas formas, so escapando.

Tu no vai fazer isso.— se arrepintió después de sugerirlo.

— No quiero volver..— se mantenía firme.

— Tienes que hacerlo o falaram u que no é.— se referia a ellos.

— Yo solo quiero ser maestra,¿que tiene de malo eso?.— no entendía.

— Nada... mais eles querem u Luisito de yerno.— afirmaba Tolentino.

—Auque quisiera escapar a donde iría, no tengo dinero.— suspiraba más calma.

— Vai pra tua casa guria...pensa bien as coisas.

Esfria sua cabeza. — insistía.

— Está bien ya me voy,nadie me entiende.— regreso nuevamente y su madre suspiraba aliviada.

Como su esposo se lo había pedido intentó ser más paciente.

En el rostro de su hija estaban marcados sus dedos de la bofetada, sentía un poco de remordimiento.

El vestido fue dejado de lado, hasta las visitas del pastor dieron un respiro.

Otro culto se acercaba y ya no cantaba con el mismo espíritu o entusiasmo.

Durante el sermón ,el pastor dijo unas palabras en las que le dejaba más que claro su participación en lo de Alice .

—Arranquemos las malas hierbas

Hermanos, como agricultores ustedes saben muy bien que las malas hierbas dañan los cultivos.

Si no se arrancan de raíz, consumen los nutrientes y afectan la calidad de los trigales .

En nuestras vidas, en nuestras comunidades, ocurre lo mismo,las malas hierbas crecen entre nosotros.

Y es nuestra responsabilidad arrancarlas de raíz.

 Jesús nos dice en Juan 15:2: “Todo pámpano que no lleva fruto, será quitado.”

Dios quiere limpiar nuestras vidas para que demos fruto abundante.

Hoy les pregunto:

¿Que malas hierbas están afectando su corazónes, nuestras vidas, esta comunidad ?. Entiendo a quienes por la dulzura de su alma, y transparencia de su espíritu todavía no entiendan, que muchas veces somos instrumentos del todopoderoso en contra del demonio qué no descansa nunca y nos acecha cotidianamente .—desde que comenzó su sermón miraba hacia donde se encontraba Raquel, que permanecio impavida, sin levantar la vista,luego continuó.

—Sólo así tendremos una cosecha espiritual que glorifique a Dios

Gloria a Dios señor Jesús.

Gloria a Dios señor Jesús, amén.

El culto terminaba ,todos aplaudian .

Se alejó del coro, salió afuera estaba aturdida.

Logró ver algo que la tranquilizó un poco .

El pastor Luis estaba de manoseos con una mujer que había enviudado recientemente.

Sintio alivio ,tal vez ya no insistiera en la boda.

Durmió mejor que nunca esa noche,después de varias de incertidumbre .

Pero todo era ilusión ,al día siguiente estaba nuevamente el hombre en su casa ,vestido como para casarse.

—Buenas tardes hermanos, don Maslov, señora Sara...Raquel..— miraba a Tolentino como pidiendo auxilio.

—Buenas tardes,me duele la cabeza mamá, creo que me voy a dormir.— sacaba una excusa para alejarse .

— Te preparo un té Raquel y enseguida se te pasa.—algo malo iría a pasar.

Tomaba el té forzada y el pastor empezó con una conversación extraña.

—Señor,señora Maslov,pido permiso para visitar a su hija Raquel.

Le prometo que tengo la mejor de las intenciones y si me acepta empezaría su preparación para ser pastora, a mi lado .

Pretendo que nos casemos en un mes.— su peor pesadilla se materializaba.

— ¡¡No!!.— afirmó Raquel en desespero.

— Raquel..¡¡ cállate.!!.— ordenaba su mamá ,pero ella tomó coraje.

— ¡¡No quiero casarme con usted aunque fuera el último hombre soltero de la Colonia!!.

¡¡Aún si me dejan sin comer , encerrada castigada, no voy a cambiar mi opinión!!.

Puedes golpearme mamá. —dejaba la taza en la mesa y esperaba su bofetada.

Ultimamente era lo único que recibia de su madre puro golpes.

—¡¡Ve a tu habitación insolente !!.— le gritó su padre y salió inmediatamente

Tolentino tenía razón, si no se iba de allí,definitivamente terminaria casada con ese tipo que detestaba.

Sabia donde guardaban dinero,y aunque no quería ser una mala hija y sacarlo sin avisar , no le estaban dejando opciones.

Mas tarde el pastor se retiraba y su madre retomaba la confección del vestido de novias .

Además le comunicaban que en un mes se casaría con el pastor Luis y que durante el culto del fin de semana lo anunciarian.

—No tienen miedo de pasar vergüenza y que diga no en frente a todos los hermanos.— los seguía enfrentando.

—Estás envalentonada e insolente,debe ser por ésto. — su padre le tiraba los libros que guardaba en el baúl ,directamente al fuego.

—No papá, no los quemes..papá te lo pido..— suplicaba desconsolada.

—¿Crees que no lo sabíamos??

No somos tontos,te dimos todo ,así que ahora harás lo que se te ordene.— desconocía a su papá, de su madre podía esperar cualquier cosa.

—No quiero papá, no me obligues, no quiero casarme con ese hombre .

Elige a otro,no me importa si es viudo o viejo y te prometo que me caso,pero no con el .— su padre se quitó el cinto y la golpeó varias veces hasta cansarse, después la encerró en la habitación.

Estaba siendo irracional y actuando como una mimada.

Sus padres salieron y su amigo apareció en la ventana preocupado con su estado.

— Guria,vo te ayudar.

No enfrenta eles ,sabes montar a caballo,no digas que no a la boda, el sábado me llevo otro caballo y te aguardo na outra casa pra tu fugir.— estaba dispuesto a ayudarla así se tuviera que ir el también.

Sabía que era una locura, pero no sabía que más hacer.

— Gracias,abre la puerta para mi.— le pedia.

— Ta cerrada a casa,te cuida guria,to com pena de você. — Tolentino se fue.

Se quedó allí hasta el otro día.

Al despertar su madre cuidaba de las más marcas de los golpes de su papá .

Tendría que ir de manga largas al culto a pesar del calor.

Parecia un zombie y no emitía una palabra con nadie.

A la hora del anuncio el pastor le tomó la mano anunciando el matrimonio, quería zafarse de su agarre sin suceso.

Todos aplaudían, hasta la viuda con la que lo había visto,estaba desconcertada.

No se resistió a la tentación de decirle algo cuando la vino a felicitar falsamente.

— No te preocupes, es todo tuyo,no voy a casarme con esa mugre.

Los vi.— completo dejándola preocupada.

Mas tarde la veia conversando con el pastor,casi discutiendo.

La miró e intentó hablar con ella para que no dijera nada, pero se sentó con doña Dominga, hizo todo lo que pudo para evitarlo.

Ya se iban y les solicito a sus padres hablar con ella a solas un momento.

Se alejaron un poco para darles privacidad.

— Entiendo porque no quieres casarte, pero fue un error,la hermana estaba dolida y la besé por impulso.

Pero yo te quiero solo a ti,me gustas desde que llegué.

Que no me hayas dicho no ,me deja feliz.

Si te sientes más segura y tu reticencia es porque no quieres dejar a tus padres ,podemos vivir con ellos.

Me lo sugirieron y pretendo ..— intentaba justificar lo que a ella no le importaba

— No dije que no ahora,porque no tengo alternativas, pero no es por el beso o por mis padres que no quiero casarme contigo.

Ni siquiera es la edad,es la falsedad lo que me motiva a decir no.— lo miraba con bronca .

— ¿Falsedad??,¿ que falsedad?, yo sueño con el día que seas mi esposa.— intentaba acercarse.

— Tu sabes porque, piensa bien tu comportamiento.— insistía Raquel,su madurez y preparacion lo asustaba.

— No te entiendo..— seguía buscando un motivo.

— Alice...— después de decirlo se arrepintió e intento irse.

— ¿Alice??.— que quería decir.

— Olvida lo que dije.—le dio miedo enfrentarlo.

— ¡Explicate!!..— le exigía.

— Prometi ser la madrina de su bebé y no quiero casarme, si ella no está.— veía una oportunidad de encontrarla.

— Nadie sabe donde está Alice,ni su tía.

Si supiera le pediría que viniera para que nos casasemos en paz.

Debe estar en otro pueblo con su marido.— afirmaba desentendiendose.

— ¿Y el niño??, es su hijo,¿porque no vinieron por el??.— tenía lógica.

— A veces los padres necesitan hacer sacrificios para poder darles un futuro decente a sus hijos.— insinuaba que lo habian dejado para trabajar.

— Bueno,cuando Alice regrese le digo que si.— se alejó enseguida dejando al pastor desconcertado con el pedido.

Sabia perfectamente que ni ella, ni su esposo regresarían jamás y aunque se resistiera, en un mes no podría decirle no como ahora.

Debía mantenerse alejado de las tentaciones o definitivamente las cosas no saldrían como quería en sus intenciones con Raquel y la familia Maslov.

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