Capitulo 10 TRAUMAS PASADOS (PARTE 2)

Liam Meins, hijo de Jules Meins un alfa soltero y dominante, un Omega que no tenia mamá, su madre Omega había muerto en el parto al darlo a luz, quizá ese fue el punto que los unio tanto pues en solo días desarrollaron aquella conexión mágica que solo se da entre alfa y Omega, no eran destinados de eso estaban seguros pues ni la luna de Liam ni el lobo de Isak habian reaccionado a la presencia del otro, pero eso no fue obstáculo para que se desarrollara aquel amor intenso que trae la adolescencia, a pesar se no ser destinados Liam se enamoro como un loco de isak e isak de Liam, el alfa fue feliz por aquellos meses que duró esa relación, experimento muchas cosas con Liam, con aquel hermoso Omega fue su primera vez, la primera vez que ambos se entregaron al amor impaciente que ofrece la inocencia de convertirse de niño a adulto.

...“te amo, te amo mucho Liam”...

...“yo te amo mucho más Isak, quiero casarme contigo apenas cumpla 18 años”...

Era un acuerdo mutuo, uno que ambos añoraban pues Isak solo quería esa familia que se le había sido negada desde bebe, ellos debían casarse por qué se amaban, pero el amor es ciego a veces e Isak nunca lo noto, no noto que aquel Omega tan lindo, tan puro, tenía un problema, tendencias depresivas tan grandes que incluso lo habían llevado al borde del suicidio varias veces, es por ello que se había metido a trabajar pues a pesar de no tener problemas económicos eso le ayudaba a despejar su mente.

Fue aquella pelea, la pelea acompañada de esa discusión que isak tuvo con Liam por culpa de un cliente que según Liam solo iba a la tienda para ver a Isak, aquella discusión en dónde el alfa cansado y estresado le gritó que lo dejara en paz y salió de aquel cuarto azotando la puerta, después de ello tan solo unos minutos más tarde las insistentes llamadas del Omega a su móvil lo hacían irritar más y más y con coraje apagar el aparato, ojalá no lo hubiese hecho, (eso pensaba Isak) pues después de aquel fin de semana el no supo de Liam por 10 días, preocupado de que el Omega no contestara ninguna de sus llamadas e incluso nisiquiera fuera más al trabajo, fue directo a su casa a buscarlo, en la puerta miro rosas y algunos arreglos florales y sin saber que pasaba entro al jardín, había una foto de Liam en aquella puerta montada en un caballete y entonces Isak se estremeció.

...Ding dong...

Toco el timbre en un par de ocasiones pero nadie salió a abrir, desesperado siguió llamando a aquel número pero ninguna de sus llamadas fue atendida nunca más, corrió hasta donde el padre alfa de Liam trabajaba y lo encontró allí en aquella tienda guardando las pocas cosas que aún quedaban allí antes de irse para siempre de aquel barrio, cuando Jules lo miro furioso se acercó a el y con odio lo golpeó, Isak no sabia que estaba pasando pero el alfa lo tomo fuerte del brazo y a empujones lo saco de aquella tienda.

-¿¡Que haces aquí¡? ¡Lárgate! ¡Lárgate maldito hijo de perra! Por tu culpa mi Liam… mi pobre Liam… (llanto)

Isak no entendía, solo podía sollosar mientras trataba de mirar si el Omega estaba junto a su padre.

-¿En dónde está Liam? ¿a dónde fue? No me responde las llamadas y..

-¡Hijo de puta! Aún vienes a preguntar ¿a dónde fue? ¡Maldito… mil veces maldito!

Isak seguía sin entender nada, fue hasta que aquel alfa se tiró de rodillas al piso y como un niño lloro que isak pudo escuchar lo que había pasado y con dolor salió corriendo de aquella tienda para no volver jamás.

“Por tu culpa mi hijo se mató, se quitó la vida, tomo más de 50 pastillas y se suicidó, todo por una maldita pelea contigo, mi pobre Liam se quitó la vida solo por una maldita pelea de niños con quién decía su alfa… maldito hijo de perra, es tu culpa, mi bebé murió por tu culpa, toma (dijo aventando una carta) el te la dejo, ojalá puedas con tu maldita conciencia hijo de perra”

Fueron las palabras de Jules para el alfa, palabras que jamás pudo sacar de nuevo de su memoria, junto a aquella carta que de puño y letra de Liam aventó, Isak salio de aquella tienda y corrió lo más que pudo hasta que sus piernas perdieron fuerza, cuando lo noto el ya estaba muy lejos, entonces abrió el sobre y comenzo a leer lo que termino de matar su alma y convertirlo en isak Sanders el alfa frío que ya comenzaba a ser.

“Querido Isak, amor mío, el único alfa que me demostró que no necesite ser su destinado para amarme y amarlo, te escribo está carta por qué aunque llame mil veces no respondiste mis llamadas y mensajes nunca mas, si la estás leyendo ahora es por qué ya no estaré más contigo ni con papá, pero no estés triste el lugar a donde iré sera bueno y podre ser feliz por fin, los meses a tu lado fueron lo mejor de mi vida no lo olvides, fuiste mi cielo pero hoy también eres mi infierno y mi verdugo, no pude soportar nuestra ultima pelea y perdoname si soy cobarde, pero no puedo tolerar la idea de que algun dia llegue a tu vida un omega que sea tu destinado y te vallas de mi lado, así así tal cual lo hizo tu papá a tu mamá y me dejes a mi y a nuestro bebe solos, lo siento por lo que hice, pero la ansiedad de perderte algún dia me pone mal, es tu culpa que yo sea asi fue tu culpa no responderme y hacerme pensar que no me amabas más, te culpo a tí por hacerme amarte tanto y tener miedo de que te vallas de mi lado, hoy me voy, pero no me voy solo, dentro mío llevo el fruto de este amor tan bonito que ambos nos tuvimos, este amor tan puro que creo una vida, me llevo conmigo a nuestro hijo, así el jamas sufrirá por el abandono de su padre alfa asi como sufriste tu, perdoname isak, yo te perdono por dejarme solo, yo te perdono por que por tu culpa hoy tome esta decisión, te amo Isak, te amo mucho.

Siempre tuyo hasta el más allá, Liam Meins”

La carta fue sellada con un beso, un beso de aquel pintalabios rosa que a Isak encantaba y estaba llena del aroma de las feromonas de aquel omega, isak lloro tirado en el piso de aquella avenida, no le importaba que lo mirarán, su lobo daba gritos de dolor al saber que su cachorro se habia ido junto a aquel Omega, Isak no supo cuánto tiempo lloro, solo se levantó del suelo y fue adonde su abuela, con el alma rota, con la cabeza atrofiada, lloro como un bebé mientras su abuela lo consolaba y su madre reía desde la escalera de aquella vecindad.

-Jajajajaja estas maldito Isak, nadie te amara nunca y quién te ame… jajaja quien te ame tendrá el mismo destino, entiéndelo, no eres digno, no eres un alfa digno de amor o afecto, eres un asco, nadie te quiso nisiquiera tu padre… tu eres el culpable de todo, ¡Tu mataste a tu Omega y con ello a ese inocente bebé, y por tu culpa tu padre me dejo, solo haces daño, solo sirves para hacer daño!

-¡No es cierto… noooo! Eso no es cierto, yo no tengo la culpa, yo jamás tuve la culpa, papá se fue por qué quiso y Liam… ¡yo amaba a Liam yo no tengo la culpa no es cierto nooo!

-tu lo  hiciste, fuiste tuuu, jamás amarás a nadie, solo puedes lastimar, solo puedes causar lastima y dolor, nadie te amara nunca, eres un alfa indigno..

Isak lloro, aquel trauma fue tan grande en su vida que se negó a volver a conocer a algún Omega y rechazo cada propuesta de amor que a su vida llegaba.

“Soy un alfa indigno, no puedo amar a nadie, ningún Omega será para mí, ningúna persona me amara jamás, solo sirvo para hacer daño”

Cada pensamiento suyo atormentaba a isak, fues hasta 3 después cuando isak ya tenía 19 años conoció a Daniel y el vínculo de amistad creció pues al igual que el Daniel había tenido una vida dura y difícil junto a su padre y tras la muerte de la madre de Daniel el vínculo se fortalecio, fue aún mas cuando en ese mismo año su abuela murió dejando en Isak un vacío tremendo, Isak jamás volvió a ver a su madre e incluso se mudo para poder olvidar y tratar de comenzar una nueva vida, de su pasado jamás hablo a nadie, solo Daniel conocía su historia, se alejo de todo lo que lo ataba a su niñez y adolescencia e incluso tomo terapias, lo último que supo de su madre era que se volvió una alcohólica sin remedio y que terminó viviendo de limosna en la calle, sin embargo a pesar de las terapias y los años, las palabras de Emilia jamás salieron de su mente.

“Estas maldito Isak, nadie te amara nunca y quién te ame… jajaja quien te ame tendrá el mismo destino, entiéndelo, no eres digno, no eres un alfa digno de amor o afecto, eres un asco, nadie te quiso nisiquiera tu padre… tu eres el culpable de todo, ¡Tu mataste a tu Omega y por tu culpa tu padre me dejo, solo haces daño, solo sirves para hacer daño! No mereces amar, no mereces que te amen, solo lastimaras”

...……………...

Isak se levantó de la cama y salió a dónde Sebastian cocinaba, el aroma que llegó fue estupendo en realidad ya tenía demasiada hambre, sonrió de ver a Sebastián cuidar cada detalle de aquellos huevos y se acercó para poder abrazar su cintura

-He… jeje saliste, siéntate está listo.

-Sebastian… gracias, pero me iré mañana a Hollywood… no volveremos a vernos Sebastián, es lo mejor.

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