Helado

Renata. No quiero volver a ver a esa basura en el hospital Eider.

Eider. Ya te dije que ya lo he despedido y convencí a la novata de denunciarlo.

Annie. No quiero que mis padres se enteren.

Renata. Hija Eider tiene razón, ellos siempre suelen buscarte al hospital cada vez que viene a Nueva York, es mejor que se enteren por ti y no por algunos de los empleados del hospital, si ya estaban diciendo que tú y Donato eran amantes, que no dirán después.

Annie. Quizás tengas razón, lo pensaré y veré si mañana los llamo, ahora puedo ir a la habitación que me habían mandado a preparar y disculpe por molestarlos con estos, pero puedo volver a usar la ropa de su nuera, prometo mandar arreglar está.

Renata. No tienes por qué hacerlo, más bien ya mandé a lavar y a pasar muchas cosas de mi nuera a esa habitación.

Annie. Gracias Reni, ahora me ire a descansar.

Annie sube las escaleras y Renata agarra el brazo de su nieto para abrazarlo.

Renata. Gracias hijo si no fueras llegado quizás ese hombre fuera abusado de ella.

Eider. Abuela no pienses en eso y ve a descansar, yo también haré lo mismos.

Renata. ¿Porque han llegado juntos Eider?

Eider. No quise que se fuera sola a su departamento, la ví muy afectada por lo que paso y así que pensé en traerla aquí.

Renata. Fue lo mejor, estar sola no es bueno, iré al despacho tú ve a descansar.

Eider. Abuela que vas a hacer.

Renata. Llamaré a Zaíra, sé que ella no le dirá y sus padres deben de saber, no pienso ocultar nada a Mars.

Eider. Pienso lo mismo, pero porque no esperas hasta que amanezca, si Annie no los llama, puedes hacerlo.

Renata. Tienes razón es muy tarde.

Ambos se van a sus habitaciones, Annie después de ducharse y colocarse unas de la pijama, baja a la cocina por algo de comida.

Buscando algo para hacer y empezó a sacar alimentos del refrigerador y se dispuso a cocinar, por otro lado, Eider estaba saliendo de la ducha y había pensado mucho en ir a hablar con Annie, después de vestirse decidió ir a su habitación con la escusa de que limpiará sus heridas.

Busco el botiquín de primeros auxilios que estaba en la mesa de noche y tocó varias veces la puerta, sin tener respuesta, volvió a su habitación algo molesto y empezó a caminar de un lado a otro hasta que volvió a tomar el valor de tocar nuevamente la puerta.

Cómo no tuvo respuesta decidió abrir la puerta y al no verla acostada en la cama, salió a buscarla.

Reviso el despacho, el living y por último fue a la cocina, dónde la encontró muy concentrada cocinado.

Eider caminó muy despacio para evitar hacer ruido quedando muy cerca de ella y la miro por algunos segundos, hasta que Annie sintió su presencia y voltea llevando su mano al pecho por el susto que le dio, pero antes de que gritara Eider tapo su boca con una de sus manos.

Eider. No quise asustarte.

Annie se aleja de él y camina al refrigerador para guardar las cosas que ya no estaba utilizando.

Eider. No me hablaras.

Annie. Que quieres que te diga, no había comido bien en todo el día y tenía hambre, si te molesta que allá bajado por algo de comida, solo debes decírmelo.

Eider. No me refería a eso, pero tendrás que compartir conmigo, ya que tienes la culpa de que yo no llegara a cenar con mis abuelos.

Annie. No te pedí que me ayuda.

Eider. En serio novata? así me agradeces.

Annie. porque tengo que darte algo a cambio de ayudarme, lo mismo me dijo ese imbécil por ayudarme a cambiar las llantas de mi auto y casi termina...

Eider. Yo no soy como ese canalla, dije que no te tocaría si tú no quieres y creo que he cumplido mi palabra y solo te estoy pidiendo algo de comida.

Annie. Está bien te daré, pero me comeré el helado que queda.

Eider. Estás siendo injusta, pero acepto.

Annie sigue cocinado y él se sienta sin apartar su mirada en ella.

Annie. ¿Tengo algo en el rostro o que?

Eider. No.

Annie. Deja de mirarme entonces.

Eider. No te gusta que lo haga.

Annie. Solo me incomoda.

Eider. Jajajaja que quieres que haga no tengo nada más que hacer, puedo distraerme con el helado, pero no me dejaras tocarlo.

Annie. Bien, si con eso deja de mirarme, pero no te lo vayas a comer todo.

Eider se levanta va al refrigerador, después de sacar el helado se acerca a ella Annie lo mira confundida, y comienza a retroceder hasta quedar atrapada en la esquina del gran mesón.

Eider no puede evitar reírse y abre unos de los cajones para sacar un cubierto, para después regresar a la banca donde estaba sentado, Annie por su parte suspira aliviada y regresa a la cocina olvidándose de él por completo.

Ya cuando termina, divide la comida que había hecho en dos platos y luego coloca frente a él.

Annie notó que ya no había comido suficiente helado y se acercó a él para quitárselo.

Eider. Que haces novata.

Annie. Ya comiste suficiente, el resto es mío.

Eider. regrésame ese helado.

Annie. No, hay tienes la comida.

Annie camina al refrigerador a guardar el helado y regresa para empezar a comer.

Después de algunos minutos ambos terminan de comer, Annie le coloca su plato encima del suyo y Eider la mira con ambas cejas arqueadas.

Annie. Yo cocino, tú lavas los platos.

Eider. ¿Es broma verdad? Yo nunca he lavado un plato en mi vida.

Annie. Siempre hay una primera vez novato.

Annie se levanta y va refrigerador y busca su postre mientras que Eider ve el friegaplatos, Annie se sienta a dónde estaba el, siendo ella ahora que lo observa.

Annie. Si abres la llave saldrá agua.

Eider. Ja, ja, ja muy graciosa.

Annie. Solo quise ayudarte.

Eider empezó a lavar los platos y Annie se acerca para asegurarse que estén bien limpios.

Annie. Muy bien novato, para ser tu primera vez no lo hiciste nada mal.

Eider se acerca a su oído y apartando su cabello que cubría sus hombros.

Eider. Yo todo lo hago excelentemente bien novata 😏.

Annie no puedo evitar sonrojarse por la manera en que se acercó y le hablo cerca de su oreja.

Eider solo sonrió y se comió el helado que había en el cubierto que sostenía en el aire.

Annie. Eider apártate de mi helado.

Eider. Y si no quiero.

Annie. Ya comiste, lo siento, pero estoy es mío.

Eider. No yo quiero más, así que deberás compartir.

Annie. Ni lo sueñes.

Eider. Te lo quitaré

Annie, comienza a correr a la salida de la cocina, pero antes de llegar él la abraza por detrás con una mano y la otra intentando de quitarle el helado.

Annie. Déjame Eider, esto es mío.

Eider. Debes compartir.

Annie. Lo hice y prácticamente te lo comiste todo.

Eider. No seas exagerada.

Eider le arrebato en helado de sus manos haciendo que se volteara encima del cabello de Annie y parte de su cuerpo.

Annie. Mira lo que hiciste.

Eider. Esto no fuera pasado si compartieras el helado.

Annie. Idiota quieres congelar mi cerebro.

Eider se acerca ella haciendo que Annie retroceda varios pasos hasta quedar pegada a la puerta de cocina.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***