Capítulo 19

Hoy, todos los empleados que trabajan en el Grupo Paragon parecían estar más ocupados de lo habitual. No estaban ocupados trabajando, sino preparándose para asistir al evento que tendría lugar esa tarde en la empresa.

En cuanto al trabajo, los empleados fueron relevados de su rutina habitual. Sin embargo, estaban obligados a ayudar al personal correspondiente a preparar todo lo relacionado con el evento.

No solo el edificio principal parecía estar ocupado, sino que la residencia del propietario del Grupo Paragon también parecía estar ocupada con todos los preparativos. Había varios hombres de confianza del Sr. Castilo, incluido Alex, que estaban listos para llevar a cabo sus tareas.

"¿Lo tienen claro? ¿La tarea principal que deben realizar?", dijo Alex a varios de sus hombres.

"Sí, señor. Llevaremos a cabo nuestra tarea correctamente como siempre", dijo el jefe del grupo de seguridad.

"¿Qué tal, Alex? ¿Está todo listo?", preguntó Castilo mientras se acercaba a sus hombres de confianza.

Los hombres se sorprendieron al ver a dos desconocidos caminando justo detrás de su jefe. Por supuesto, en sus mentes, se preguntaban quiénes eran esas dos personas.

"Sí, señor. Todo está dispuesto según sus órdenes", dijo Alex. "Todos están listos con sus respectivas tareas".

Castilo asintió varias veces, luego observó a varios hombres corpulentos que habían trabajado bajo su autoridad durante bastante tiempo como guardias de seguridad y guardaespaldas de la familia Castilo.

"Bien, antes de que nos vayamos, quiero presentarles a dos personas a las que deben vigilar de cerca", dijo Castilo, como si entendiera la curiosidad de sus hombres.

"Son mi esposa legítima y mi verdadero hijo biológico".

Los hombres volvieron a sorprenderse al escuchar este hecho. Con muchas preguntas en mente, inmediatamente saludaron a Namira y Erik.

"Ustedes deben protegerlos muy bien. Ya saben cuáles son las consecuencias si cometen algún error, ¿verdad?", dijo Castilo, relajado pero lo suficiente como para asustar a sus hombres.

"Entendemos, señor", respondió el jefe de seguridad.

"Bien, prepárense ahora. Nos vamos ahora", ordenó Castilo. "Alex, acompaña a mi esposa e hijo".

"Sí, señor", respondió Alex. "Por favor, señora, joven amo, síganme".

"Espera, ¿no vamos a ir juntos, cariño?", Namira parecía sorprendida.

"No, cariño", respondió Castilo. "Sigan a Alex y a mis hombres de confianza. Por su seguridad. ¿Entienden lo que quiero decir?"

Narima asintió lentamente. "Está bien, entonces nos vamos nosotros primero". Namira y Erik inmediatamente estrecharon la mano de Castilo. Después de eso, caminaron, siguiendo a Alex hasta uno de los coches que estaban esperando.

Mientras tanto, en otro lugar.

"¿Qué te pasa? ¿Por qué estás tan nerviosa?", le preguntó un hombre a la mujer que estaba sentada en la sala de estar. La pregunta no estaba fuera de lugar porque el rostro de la mujer que estaba allí se veía realmente angustiado.

El hombre, que acababa de bajar del piso de arriba, inmediatamente se acercó a la mujer con la que había estado cerca durante mucho tiempo sin ningún vínculo matrimonial.

"Tengo miedo de que nuestro plan falle, Marco. No quiero que mi hijo pierda su derecho como heredero de la familia Castilo", dijo la mujer llamada Natalia, mirando tristemente al hombre a su lado.

"¿De verdad nuestro hijo tiene derecho a su fortuna?", Marco lanzó una pregunta en tono de broma pero suficiente para molestar a Natalia.

"Ten cuidado con lo que dices, Marco, no dejes que Dave sepa la verdad", espetó Natalia, pero Marco respondió con una amplia sonrisa.

"Tranquila, Dave no va a perder nada. De hecho, esta es una gran oportunidad para nosotros. Si nuestro plan tiene éxito, usaremos al verdadero heredero para presionar a Castilo para que convierta a nuestro hijo en el heredero de Paragon", dijo Marco pareciendo muy relajado.

Natalia asintió con la cabeza en señal de comprensión. Esto también era lo que la mujer siempre había deseado. Pero debido a que sus actos ya habían sido descubiertos, siempre había tenido dificultades para acercarse a Castilo y conquistarlo.

Natalia y Victoria eran dos mujeres que tenían la gran ambición de convertirse en la Sra. Castilo desde que conocieron el nombre del hombre. Habían intentado muchas cosas, pero sus esfuerzos siempre habían fracasado.

Debido a que el uso de métodos justos siempre fallaba, las dos mujeres finalmente decidieron utilizar métodos deshonestos.

Las dos mujeres habían logrado una vez tenderle una trampa a Castilo y ganarse el corazón de los padres del hombre para obtener su apoyo. Sin embargo, por desgracia, su suerte no duró mucho.

De alguna manera, Castilo, utilizando algún método, descubrió fácilmente su malvado plan en ese momento. Además, cuando salieron las pruebas de ADN de sus hijos, Natalia y Victoria quedaron indefensas porque no tenían pruebas sólidas de que Dave y Morgan fueran hijos de Castilo.

Pero eso no los detuvo. Su astucia resurgió y fue la más cruel. Las dos mujeres le rogaron a Castilo que las ayudara en su situación debido a su inestable economía.

Al principio Castilo se negó, pero por consejo de su padre, se llegó a un acuerdo en el que Castilo accedía a mantener a los hijos de las dos mujeres hasta que Castilo se reuniera con sus propios hijos biológicos.

Castilo pensó que el asunto estaba resuelto, pero resultó que las dos mujeres eran demasiado codiciosas. En secreto, Natalia y Victoria planearon encontrar a la esposa e hijo biológico de Castilo hasta que ocurrió el incidente del incendio de la casa.

La situación de Castilo, que estaba en un país diferente y en ese momento estaba siendo obligado por sus padres a aprender sobre la empresa, hizo que Castilo no pudiera hacer mucho hasta que perdió el rastro de Namira y su hijo biológico.

Finalmente, Castilo también jugó sucio después de enterarse de la verdad detrás del incendio de la casa. Fingió creer que su esposa e hijo habían muerto y accedió a mantener a Dave y Morgan durante muchos años, con el pretexto de honrar la memoria de su hijo biológico.

Y ahora, debido a que la paz de las dos mujeres se había visto perturbada de nuevo, volvían a tramar un plan con el mismo hombre, para hacer realidad el sueño que habían estado planeando durante muchos años.

Aunque a las dos mujeres les resultaba muy difícil acercarse a Castilo, nunca se rindieron en su empeño de formar parte de la familia millonaria.

Mientras Marco y Natalia estaban enfrascados en su conversación, el teléfono del hombre sonó. Marco inmediatamente pulsó el botón verde después de ver quién llamaba.

"Nuestros hombres ya están en movimiento, el objetivo ha salido de su guarida", dijo Marco a Natalia después de recibir noticias de sus hombres.

"Me alegro", dijo Natalia con satisfacción. "En ese caso, vámonos ahora".

"¿Dónde está Dave?", preguntó Marco después de aceptar la invitación de Natalia.

"Está recogiendo a su novia. Dijo que Tasya quería venir".

"Oh, está bien, vamos a darnos prisa. Estoy impaciente por ver el drama que le espera a Castilo hoy".

Los dos salieron inmediatamente de la casa con risas llenas de confianza.

Lo mismo ocurría con Victoria y Bram. Como tenían el mismo objetivo, optaron por colaborar con Natalia y Marco para hacer realidad su sueño.

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