Un granero

Una hora después, diez hombres con materiales de construcción estaban afuera de la casa Marriot.

- Buen día señorita, hemos venido a construir el granero y las bodegas

- Buen día.

- Iremos inmediatamente al patio, nos podría por favor indicar en que lugar tenemos que construir.

- Si.

Jasmín, les indico el lugar y los hombres comenzaron a trabajar.

Llevaban varias horas trabajando, cuando una de las señoras María, fue a buscarlos

- Señores pasen a la cocina, la señorita preparo el almuerzo

- No es necesario

- Ella ya lo tiene listo, la misma marquesa prepara todos los alimentos.

- Nunca hemos comido nada preparado por una mujer noble.

- Les aseguro, que será el mejor almuerzo.

Los hombres aun sorprendidos pasaron a la cocina a comer, mientras lo hacían vieron que Jasmin servía mas platos.

- Señorita, espera a mas personas.

- Si, llego el rey a almorzar

- ¿Comeremos de la misma olla del rey? ¡No podemos hacer eso, tendremos problemas!

- No tendrán problemas, comerán de mi olla, de lo que yo preparé

- Muchas gracias señorita.

Los hombres continuaron comiendo mientras el rey, esperaba su almuerzo.

(Black) – [Ese granero se verá mejor lleno]

(Rey) – Por supuesto, además harán una bodega

(Black) – [Bien, porque ahora también como lo que ella cocina]

Durante el almuerzo, Jasmín le contó acerca de los avances de su tienda.

(rey) – ¿tendrá nuevos sabores?

(Jasmín) - Inicialmente, solo los que usted ha probado.

(rey) – Bien, quiero ser el primero en probar todos sus postres.

(Jasmín) – Bien, pero debe ser honesto, si hay alguno que no le guste.

(rey) – Por su puesto. ¿Cómo va la construcción?

(Jasmín) - ¿Quiere verla?

(rey) – Bien, vamos.

Ambos salieron a ver los avances y mientras llegaban escucharon una conversación entre los hombres.

- La comida que prepara la señorita es exquisita

- Comería todos los días

Jasmín sonrío, por los comentarios y después volvieron a la casa.

(Rey) – Cuando este listo, lo llenarán con todos los ingredientes necesarios.

(Jasmín) – No es necesario majestad

(Rey) – Claro que lo es, vendre a comer aquí a diario, además ya pague por todo.

(Jasmín) – A diario?

(Rey) – Si, necesita algo mas, para preparar sus comidas.

(Black) – He escuchado que hay carnes muy exclusivas en la cocina real

(Jasmín) – No es necesario.

(rey) – Bien, le diré a las cocineras, que traigan las cosas que han recibido de otros lugares o que sean costosas.

(Black) – [Si toda la carne es bien recibida]

(Jasmín) – Black es un tragón carnívoro.

(Rey) – Ahora me voy, debo volver al Palacio, no creo que venga a cenar.

(Jasmín) – Bien.

(Rey) – Pero no tendré nada para comer mas tarde.

(Jasmín) - ¿Quiere que le empaque todo lo que quedo?

(Rey) – Sí, solo lo que usted preparó.

(Jasmín) – Bien.

Jasmín, uso una canasta y envolvió todo.

El rey se fue en su caballo y en menos de una hora, estaba en el palacio.

- Buen día tío ¿Cómo está?

- Bien, gracias

- La canasta que llevas huele muy bien. ¿Qué es?

- Comida

- ¿Me das?

- No.

Después de saludar a su sobrino, el rey estuvo en diferentes reuniones, aunque mientras escuchaba a sus consejeros, se servía de los diferentes alimentos que tenia en su canasta.

- Majestad, quiere que le preparen la cena

- No.

- Pero, si tiene hambre, podemos detener la reunión.

- No, sigan.

Jasmín y el rey continuaron con sus labores hasta altas horas de la noche.

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