Ana

Pasaron los años y Diana seguía luchando con su enfermedad y lidiando con los vicios de Andrés, quién habiéndose convertido en un vicioso y depravado comenzó a mirar a Ana como un depredador, desde que ella cumplió diez años comenzó a notar conductas inusuales y un poco atrevidas en su padrastro y sintiéndose acechada le participaba a Diana su incomodidad y tristemente nunca le creía, una noche cuándo Andrés llegó tarde a casa, Ana estaba en la sala viendo la tv mientras su madre y su hermana dormían, entonces Andrés decidió aprovechar el momento y se desnudó frente a Ana, ella se sintió amenazada y decidió gritarle a su madre para pedirle ayuda, en ese momento, Andrés, corrió a la cocina y simuló estar comiendo, entonces Diana no le creyó a la niña sólo la reprendió por estar despierta a altas horas de la noche, Ana decidió al dia siguiente contarle todo a su abuela con quién llevaba una estrecha relación y la señora muy indignada habló con su hija Diana y le pidió la custodia de su nieta, Diana en forma altanera le respondió que en los asuntos de su hogar no se metiera y amenazó con decirle a Andrés que arremetiera en su contra si insistía, la madre de Diana conociendo la fama de Andrés se asustó y decidió olvidar el asunto. Andrés sabiendo que Diana siempre estaría a su favor se desvestía continuamente delante de Ana y se tocaba su intimidad, Ana cerraba sus ojos y sólo pedía a Dios que la protegiera. Un día cuándo ya la niña tenía doce años, estaba la familia reunida, celebraban el cumpleaños de Diana, y como ya todos estaban pasados de copas Andrés aprovechó el momento y se introdujo al cuarto de las niñas mientras éstas dormían y sé postró a un lado de la cama y pasando su brazo por encima de Liz quién observaba todo en silencio, el intentaba quitarle el short a Ana que al sentir su tacto saltó de la cama y corrió hacia afuera y buscó rápidamente a su madre y como no la encontró decidió contarle a sus tíos para que la protegieran, éstos decidieron esperar a Diana que andaba en busca de más cervezas para ponerle solución al grave problema, mientras esperaban a Diana, Andrés sin saber que ya sus cuñados sabían lo que había intentado hacer en el cuarto, pedía continuamente que le dejaran salir con la niña a buscar "supuestamente" una herramienta de trabajo, ésto con el fin de poder amenazar a la niña para que callara, llegando Diana al lugar sus hermanos le contaron lo sucedido y ésta viéndose obligada por ellos le pidió a Andrés que abandonara la casa, así Diana tuvo que quedarse sóla en casa con sus hijas, y ésto sólo provocó que se ensañara con Ana viéndola como la culpable de su separación. Ana ni imaginaba lo que estaba por venir para ella, nunca imagino que a su corta edad tuviera que adquirir la responsabilidad de una familia rota.