El protector
Después del almuerzo, Asher se dirigió al baño, pero su camino se interrumpió al ver a dos Alfas intimidando a un chico Omega.
Asher frunció el ceño y se acercó a ellos, su voz irónica.
"¿Qué pasa aquí? ¿No tienen nada mejor que hacer que acosar a alguien más débil?"
Los dos Alfas se volvieron hacia Asher, su expresión desafiante.
"¿Y qué te importa?", preguntó uno de ellos.
Asher sonrió, su mirada desafiante.
"Me importa porque no me gusta ver a gente como ustedes abusando de su poder."
Los Alfas se resignaron, sabiendo que no podían enfrentar a Asher, y se alejaron enfadados.
El chico Omega se acercó a Asher, agradecido.
"Gracias, gracias mucho. Me llamo Sam."
Asher sonrió y le extendió la mano.
"Soy Asher. No hay problema, Sam. Solo ten cuidado en el futuro."
Sam se sintió protegido por la preocupación de Asher.
"Si necesitas algo, no dudes en hablar conmigo", dijo Asher.
Sam asintió, sintiendo una conexión instantánea con Asher.
Su mirada, su voz, su altura y su belleza lo dejaron sin aliento.
Asher sonrió y se despidió de Sam, sin darse cuenta del efecto que había causado en el chico Omega.
Sam se quedó mirando a Asher mientras se alejaba, sintiendo una atracción inexplicable hacia él.
"¿Quién es ese chico?", se preguntó Sam, sonriendo para sí mismo.
La protección de Asher había despertado algo en Sam.
Una nueva admiración había nacido.
El cantante sorpresa
En la siguiente clase, Asher no pudo resistir la tentación de comer algunos bocadillos mientras el maestro daba su lección.
El maestro, conocedor de la costumbre de Asher, lo miró y sonrió ligeramente, pero no dijo nada.
Después de todo, Asher era el mejor alumno de la clase.
Al salir de la escuela, Asher caminaba con sus amigos cuando Kal le dijo:
"Hey, Asher, canta algo para nosotros."
Asher dudó un momento, pero finalmente aceptó.
"Bueno, pero no se burle, jajaja", dijo Asher, sonriendo.
Y comenzó a cantar una canción que había escuchado recientemente.
Sus amigos y personas cercanas se sorprendieron al escuchar la increíble voz de Asher.
"¡Dios mío, Asher! ¡Eres un cantante nato!", exclamó Crist.
Victor se unió a la admiración. "Sí, tienes una voz impresionante."
Las personas que pasaban por la calle se detuvieron a escuchar, hipnotizadas por la voz de Asher.
Incluso Sam, el chico Omega que Asher había ayudado anteriormente, se acercó a escuchar, su corazón latiendo más rápido.
Asher cantaba con pasión y sentimiento, su voz llenando el aire.
Cuando terminó, hubo un aplauso espontáneo de la multitud.
Asher se sonrojó, pero sonrió, sintiendo una sensación de libertad.
"Gracias, amigos", dijo, riendo.
Nadie sabía que Asher tenía un talento oculto.
Pero ahora, todo el mundo lo sabía.
El robot perfecto
Asher sonrió, diciendo de manera burlona: "Mañana a la misma hora, jajajaj."
Sus amigos se rieron también, y la conversación continuó.
"En serio, Asher, eres como un robot", dijo Victor, riendo.
"Sí, parece que eres perfecto en casi todo", agregó Kal.
Crist se unió a la broma: "No es perfecto en aguantar el hambre, jajajaj. Come para cinco personas él solo."
La grupo se rió a carcajadas, y Asher se sonrojó ligeramente.
"Hey, no es justo", dijo Asher, sonriendo. "Tengo un metabolismo rápido, eso es todo."
"Seguro, Asher", dijo Victor, guiñando un ojo. "Eres un robot con un estómago insaciable."
Asher se rió, disfrutando de la broma.
Pero en el fondo, sabía que no era perfecto.
Tenía sus debilidades y secretos, como su relación con Kalet.
Pero para sus amigos, Asher era el ejemplo de perfección.
Y él estaba contento de mantener esa imagen.
Por ahora.
La despedida
Asher llegó finalmente a su departamento, después de un día lleno de emociones y risas con sus amigos.
"Bueno, hasta mañana", dijo Asher, sonriendo. "Váyanse con cuidado."
Sus amigos se despidieron con abrazos y palmadas en la espalda.
"Descansa, Asher", dijo Crist. "Mañana te esperamos con hambre."
Asher se rió. "No te preocupes, siempre tengo reservas."
Kal sonrió. "Y no te olvides de nuestra sesión de canto de mañana."
Asher asintió, sonriendo. "No me olvidaré."
Victor fue el último en despedirse. "Cuidado, Asher. No te conviertas en un robot."
Asher se rió. "No te preocupes, Victor. Mi corazón sigue siendo humano."
Después de despedirse de sus amigos, Asher entró en su departamento, cerrando la puerta detrás de él.
Se sintió aliviado de estar solo, después de un día lleno de actividad.
Se dirigió al sofá, se sentó y suspiró profundamente.
Sacó su teléfono y miró la foto que Kalet le había enviado anteriormente.
Sonrió, sintiendo una oleada de amor y cariño hacia él.
"Mañana", dijo Asher en voz baja, sonriendo. "Mañana hablaré contigo de nuevo, Kalet."
La noticia inesperada
Asher se acostó en el sofá, besando la foto de Kalet mientras se quedaba dormido, sumido en un sueño tranquilo y feliz.
Mientras tanto, en su casa, Kalet estaba cocinando para su abuelo, preparando su cena favorita.
Su abuelo llegó a casa, y Kalet se dio cuenta de que algo estaba mal.
"Kalet, siéntate", dijo su abuelo, con una expresión seria.
Kalet se sentó, sintiendo una oleada de nerviosismo.
"¿Qué pasa, abuelo?", preguntó Kalet.
Su abuelo respiró profundamente antes de hablar.
"Kalet, hace unos días, el padre de Asher me pidió que te alejaras de Asher."
Kalet se sorprendió, sintiendo como si hubiera recibido un golpe en el estómago.
"¿Por qué?", preguntó Kalet, su voz temblando.
Su abuelo se inclinó hacia adelante, su mirada seria.
"El padre de Asher no quiere que ustedes dos estén juntos. Cree que eres un obstáculo para el futuro de Asher."
Kalet se sintió devastado, su corazón partido en dos.
¿Cómo podía el padre de Asher hacer algo así?
¿No sabía que Asher y él se amaban?
Kalet se levantó, determinado a hablar con Asher y resolver esto de una vez por todas.
Pero su abuelo lo detuvo.
"Kalet, debes tener cuidado. El padre de Asher es un hombre poderoso y no quiere que se interpongan en el camino de su hijo."
Kalet se sintió una mezcla de miedo y determinación.
La rutina de amor
A la mañana siguiente Kalet decidió no decirle nada a Asher sobre la conversación con su abuelo por ahora.
No quería preocuparlo innecesariamente.
Al día siguiente, Kalet le envió un audio a Asher, deseándole un buen día.
"Buenos días, mi amor. Espero que tengas un día increíble. Te amo."
Asher se despertó sonriendo al escuchar el audio de Kalet.
Se sentó en la cama, mirando su celular con una sonrisa.
"Te amo también", dijo Asher, grabando un audio para enviarle a Kalet.
"Buenos días cariño. Tu mensaje me hizo sonreír. Te amo más que ayer."
Asher envió el audio y se levantó de la cama, sintiendo una energía positiva.
Se preparó para vestirse, desayunó y se fue a la escuela, con la sonrisa aún en su rostro.
La rutina de amor entre Asher y Kalet seguía siendo una fuente de felicidad para ambos.
Nada parecía capaz de interrumpir su conexión.
Pero la sombra de la oposición del padre de Asher seguía presente, esperando el momento adecuado para actuar.
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