juntos

Juntos en el huerto

Asher y Kalet trabajan juntos en el huerto, plantando semillas y cuidando las plantas. La atmósfera es relajada y cálida, y Asher se siente cómodo cerca de Kalet.

Aunque intenta no ser demasiado obvio, Asher no puede evitar mirar a Kalet de vez en cuando. La forma en que Kalet se concentra en su trabajo, la manera en que su cabello cae sobre su frente, la sonrisa que se escapa de sus labios cuando se ríe...

Kalet nota las miradas de Asher, pero no dice nada. En su lugar, se siente un poco nervioso y emocionado. Le gusta la atención de Asher, pero no quiere parecer demasiado interesado.

"¿Cómo se llaman estas plantas?", pregunta Asher, intentando romper el silencio.

"Son zanahorias", responde Kalet. "Mi abuelo las plantaba siempre."

Asher sonríe. "Me encantan las zanahorias", dice.

Kalet se ríe. "Pues entonces, esta es tu suerte", dice.

La conversación fluye fácilmente entre ellos, y Asher se siente cada vez más cómodo cerca de Kalet. No puede creer cómo se siente atraído por este Omega.

De repente, Asher se da cuenta de que su mano está cerca de la de Kalet. Se detiene un momento, temiendo que Kalet se sienta incómodo.

Pero Kalet no se retira. En su lugar, deja que sus dedos rocen los de Asher, enviando una descarga de electricidad por todo su cuerpo.

Asher mira a Kalet, y ve que está sonriendo. "¿Estás bien?", pregunta Asher.

Kalet asiente. "Sí", dice. "Estoy bien."

La tensión entre ellos es palpable, y Asher se pregunta qué pasará a continuación.

La sorpresa de Asher

Asher mira a Kalet con curiosidad. "Kalet, ¿cuántos años tienes?", pregunta. "Te ves muy joven."

Kalet se ríe y se ruboriza ligeramente. "Acabo de cumplir 23 años", responde.

Asher se sorprende y sonríe. "No lo hubiera imaginado", dice. "Pareces mucho más joven."

Kalet se encoge de hombros. "Supongo que es porque soy un Omega", dice. "Los Omegas tendemos a mantener una apariencia más juvenil."

Asher asiente, interesado. "No sabía eso", dice.

Kalet sonríe. "Hay muchas cosas que no sabes sobre los Omegas", dice, con una pizca de coquetería.

Asher se ríe y se siente atraído por la seguridad y la confianza de Kalet. "Me gustaría aprender más", dice.

Kalet se mira las manos, y Asher nota que está sonriendo. "Puedo enseñarte", dice Kalet.

La tensión entre ellos es palpable, y Asher se siente emocionado por la posibilidad de estar cerca de Kalet.

"Me encantaría", dice Asher, su voz baja .

Kalet levanta la vista y se encuentra con la mirada de Asher. Por un momento, se quedan así, mirándose, con la conexión entre ellos creciendo cada vez más fuerte.

La revelación

Kalet mira a Asher con curiosidad. "Asher, ¿cuántos años tienes?", pregunta.

Asher duda por un momento, sintiendo una mezcla de emociones. No sabe cómo reaccionará Kalet al saber su edad.

Pero decide ser honesto. "Tengo 17 años", responde, con una voz suave.

Kalet se sorprende, y su expresión cambia. "17 años", repite. "Eres muy joven."

Asher se siente incómodo, pensando que Kalet lo verá como un niño. "Lo sé", dice. "Pero soy el heredero de mi familia. Tengo responsabilidades."

Kalet lo mira con una mezcla de sorpresa y comprensión. "Entiendo", dice. "Debes tener una gran carga sobre tus hombros."

Asher asiente, sintiendo un alivio porque Kalet no se ha alejado. "Sí, es difícil", dice.

Kalet se acerca a él, y Asher siente su calor y su proximidad. "No te preocupes, Asher", dice Kalet. "No te veo como un niño. Te veo como alguien que necesita apoyo y comprensión."

Asher se siente conmovido por las palabras de Kalet. Nadie había hablado con él de esa manera antes.

"Gracias, Kalet", dice, sintiendo una conexión más profunda con él.

La diferencia de edad entre ellos es significativa, pero en ese momento, Asher se da cuenta de que no importa. Lo que importa es la conexión que sienten, y la forma en que se hacen sentir el uno al otro.

La invitación

Kalet sonríe y se limpia el sudor de la frente. "Ven, entra no seas tímido, jajaj. Mi abuelo no está, fue al pueblo."

Asher se ríe y se siente aliviado. "Gracias, Kalet. Me encantaría un vaso de agua fría."

Kalet asiente y se dirige hacia la casa. "Vamos, te mostraré donde está todo."

Asher sigue a Kalet, admirando la simplicidad y la calidez de la casa. Kalet le ofrece un vaso de agua fresca y se sientan en la mesa de la cocina.

Kalet lo mira con curiosidad. "Oye, y qué andabas haciendo por acá", pregunta, con una sonrisa pícara. "Tu casa queda un poco lejos, no"

Asher se ríe y se siente un poco nervioso. "Quería... uh... inspeccionar las fincas cercanas", dice, intentando mantener su excusa.

Kalet levanta una ceja. "Inspeccionar las fincas, ¿eh?", repite, con una sonrisa sarcástica. "No te creo."

Asher se ríe y se siente atrapado. "Bueno, quizás no era solo eso", admite.

Kalet se inclina hacia adelante, interesado. "¿Qué más?", pregunta, con una voz baja y sensual.

Asher se siente emocionado por la proximidad de Kalet y la forma en que lo hace sentir. "Quería verte", dice, con sinceridad.

Kalet sonríe y se acerca un poco más. "Me alegra", dice. "Me alegra mucho."