17. Se miran con amor

Alberto está instalado en un hotel, había pensado en venir para ver a Lorena y no en regresar, no pudo encontrar un pasaje de avión para volver de inmediato, así tendrá que hacerlo mañana, se pone una bolsa de hielo en el golpe y profiere en su ser una cantidad de insultos contra su exesposa como si ella fuera la culpable, incapaz de reconocer su gran culpa.

- "Tuve que hacer un viaje de emergencia por un contrato no llegaré a casa, estaré mañana en la noche", dijo Alberto, con el pensamiento fijo de volver a buscar a Lorena, mientras hablaba por el móvil con su actual esposa.

- "No te preocupes amor, trabaja tranquilo", manifestó Paulina.

Paulina a los segundos de cortar la llamada, se comunicó con su amante, y después de acordar el encuentro se comunicó con la niñera para que viniera a cuidar el sueño de los pequeños; después de tiempo podría estar toda la noche con el amante de turno, a Paulina con la misma manera en que Alberto le hace el amor ya se había aburrido, su amante la hacía vivir momentos más excitantes.

Por otro lado, Tomás hizo acopio de serenidad para no reírse, era evidente que Lorena era una mujer reservada, y no se iba a lanzar a vivir una aventura.

- "Si bien señala que pedirán una sola habitación para ambos, eso solo quedará para los registros. Cada vez que viajes con Gabriel también lo hará Magaly, serán ustedes quienes compartan la habitación, no creo que tengas algún problema de compartir la habitación con ella, puesto que es tu amiga; debemos asegurarnos de los detalles", manifestó Tomás.

- "La gente pensará que realmente dormí con él", dijo Lorena, abriendo los ojos.

Para Lorena aún se sentía extraño que la relacionen con otro hombre, Alberto la abordó cuando ella tenía dieciséis años, no se había enamorado antes, la supo conquistar y cuando Lorena cumplió dieciocho fueron oficialmente novios, dos años después se casaron y la llevó a vivir lejos de su familia, toda su experiencia sentimental y sexual giraban en torno a Alberto.

- "Le dará mayor seriedad a su relación, y a su edad no creerán que solo estén de las manitos y con besos castos", expresó Tomás.

- "Lo sé, solo que... Bueno ya entendí que únicamente es por el registro. Otra duda es cómo es esto de cambiar mi residencia y tener un nuevo empleo, no es que me sea muy fácil conseguir uno nuevo, mi experiencia...", manifestó Lorena.

- "Ella no se puede quedar sin empleo por esto", agregó Gabriel preocupado.

- "Tengo otro contrato, Lorena con esta decisión puedes cambiar la vida de muchas personas, sé por Magaly y por el tiempo que llevamos conociéndonos, que te preocupan sinceramente las personas y deseas apoyar con un granito de arena en mejorar algo los problemas de la sociedad", expresó Patricia.

- "Sí, por eso también estoy haciendo esto, pero (lee un poco el contrato que le da Patricia) ¿Fundación Cisneros?, ¿aquella que ayuda a las mujeres?", inquirió Lorena completamente sorprendida.

- "Tengo un amigo, Franco Cisneros es abogado y su familia maneja la Fundación, necesita un asistente personal para una clienta muy importante, que aparte es una amiga personal a quien tiene gran estima y que ha pasado por algo terrible, un esposo golpeador, de quien ha logrado el divorcio, además ese hombre ahora está llevando un juicio por ser un violador. Franco necesita a alguien que pueda organizar la vida de su clienta, créeme que vas a ayudar a esta mujer a que su vida vuelva a tener luz después de un matrimonio espantoso y una vida algo delicada. Sé que eres secretaria, pero en estos meses has hecho más que eso, si miras bien, la paga es muy buena y aparte te dará una mejor imagen. No parecerá que estás detrás de Gabriel por su posición, sino que tienes un compromiso social. Grecia Luján, la cliente de Franco, ha hecho un importante donativo para la creación y funcionamiento de un albergue para mujeres maltratadas, ayudándola vas a cambiar vidas, Lorena. Además, es un trabajo que podrías seguir teniendo cuando acabe todo esto", explicó Tomás.

Lorena se quedó leyendo ahora un nuevo contrato, mientras Patricia y Magaly le explican la importancia de ese nuevo trabajo, que no solo verdaderamente ayudará a personas que lo necesitan, sino que también garantizará una muy buena imagen para la campaña.

Mientras que Gabriel y Tomás fueron a tomar una copa de vino.

- "¿Ella va a trabajar directamente con Grecia Luján o también con Franco Cisneros?", preguntó Gabriel.

- "Conoces a Franco también como yo, no te va a robar a la supuesta novia; además está visiblemente enamorado de Grecia Luján, aunque aún no sean pareja. A veces pasa, que todos vemos los sentimientos y los interesados, ni cuenta se dan. Así que, no te pongas celoso Gabriel, nadie te va a quitar a Lorena", manifestó Tomás.

- "¿Celoso?, no digas tonterías, esto es solo una relación falsa", dijo Gabriel, para tomar el vino de un gran sorbo, como si intentara creerse lo que él mismo estaba diciendo, si la relación fuera real se sentiría más seguro. "Solo quiero asegurarme que ella esté bien, y pueda trabajar tranquila ya vez como fue con Augusto, pero tienes razón la familia Cisneros tiene un gran prestigio en la ayuda social; y de lo que conozco a Franco, pese a su juventud es un caballero", agregó.

Tomás siguió bebiendo un poco más, mientras observaba los gestos de Gabriel, le agradaba que a su amigo, el duelo eterno se le haya acabado, pero le preocupaba que pudiera distinguir con claridad los sentimientos que estaba empezando a sentir por Lorena, y se pregunta si su plan resultará bien o complicará las cosas.

Cuando Lorena terminó de analizar todo, firmó ambos contratos, era consciente de que su vida iba a cambiar completamente y que se estaba metiendo en terrenos desconocidos.

- "Gracias, espero que todo salga bien, señor Larrea", dijo Lorena.

- "Eso tiene que cambiar", dijo Tomás, "no pueden seguir tratándose de usted, tienen que tutearse, parecer más cercanos; a ver cuando se tomen de las manos en público cómo lo van a hacer", agregó Tomás.

- "Eso es cierto, no pueden parecer jefe y secretaria, se supone que son novios y se aman", expresó Patricia.

- "Sí, así que tienen que entrelazar los dedos, y mirarse con amor, como dos enamorados", manifestó Magaly con una gran sonrisa.

Gabriel y Lorena se ponen nerviosos y ante la insistencia de los presentes, se toman las manos entrelazando los dedos; se quedan mirando el uno al otro, la calidez que se ha formado entre ambos es una sensación única y la mirada del otro parece quedar grabada en la retina, ellos no se han dado cuenta, pero los espectadores se han dado percatado sin lugar a dudas que se miran con amor.

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