Mi reunión con Dyen Zu.

Otro día comenzaba, al levantarme me coloqué a pensar que mi vida ya no era la misma de hace unas semanas atrás. Estaba viviendo sola en una ciudad muy lejos de casa, tenía amigos, un trabajo y hasta el comienzo de un amor.

También pensaba que llevaba varías noches sin soñar con él, no lo volví a soñar desde la noche que lo vi a través de los cristales de la ventana de aquel lugar donde me había reunido con mis compañeros de trabajo y si lo pensaba bien no soñé con él desde la primera vez que lo ví, realmente eso era muy extraño.

Comencé a organizarme para la reunión que mi Jefe había programado con Dyen Zu el misterioso hombre de mis sueños, ese día sentía ganas de verme linda como nunca antes me había visto, escogí el mejor vestido los zapatos mas hermosos de aquel armario, yo no era de maquillarme pero hoy lo tenía que hacer.

Me miré al espejo y ¡wow! Estaba muy hermosa.

Salí del apartamento, y emprendí mi viaje hacía la empresa de Dyen Zu, cuando llegué a la empresa quede con la boca abierta, era grandísima el lugar era muy impactante sus espacios estaban bien limpios y remodelados. Habían mujeres hermosas, hombres vestidos formales y muy elegantes. Realmente todo se veía bien.

Al llegar a la recepción, la recepcionista me indica donde debo esperar, ya en este momento estaba muy nerviosa lo iba a volver a ver, hasta impaciente me llegue a sentir.

En la sala de espera donde me encontraba para esperar la hora de mi reunión. De un momento a otro empecé a sentirme un poco mareada tal vez eran los nervios estaba sudando frío y trataba de tranquilizarme. En ese momento la secretaria de Dyen Zu me buscó y me dirigió hasta su oficina.

Me levanté como pude (Sentía que estaba apunto de desmayarme) llegué hasta la oficina de él, al entrar lo saludo cordialmente. Él me invita a sentarme cuándo voy caminando hacía el asiento, sentí como mi cuerpo lentamente se desplomaba.

¿Cómo podía desmayarme justamente hoy?

En el instante que mi cuerpo va cayendo siento como unos brazos con fuerza detienen mi caída, desde ese momento ya no supe más nada de mi hasta que volví a despertar.

Cuándo por fin abrí los ojos después de haberme desplomado él estaba justo frente de mí, me estaba mirando como lo hacía en esos tantos sueños que tuve con él. En ese momento se me vino a la mente aquel último sueño donde me iba a dar aquel tan esperado beso que nunca se dió.

El todavía tenía su mirada puesta en mi, me daba la impresión que su forma de mirarme tan detenidamente era porque algo en mí llamó su atención, Pero no me atreví a preguntar el porqué me miraba de esa forma. Fué como si uno de mis sueños con él se estuvieran haciendo realidad.

El interrumpió ese juego de miradas para preguntarme:

__Dyen Zu; ¿Ya estás bien?.

__Sol; Si, ya estoy bien. Gracias por preocuparse y atenderme.

__Dyen Zu; Tranquila, ¿Comenzamos la reunión? o ¿Prefieres posponerla?

__Sol; Ya que estoy aquí, y ya me encuentro bien. Comencemos La reunión.

Comenzamos la reunión, hablamos sobre los puntos que nuestra empresa le quería aclarar, el habló sobre sus inquietudes respecto a mi trabajo. Y llegamos a un acuerdo.

En todo momento él me sostenía una mirada fría muy diferente a la mirada que tenía cuando había despertado de aquel desmayo, estaba algo confundida con su manera de ser. Al principio fue cálido y amable, después se torno frío y obstinado. ¿Qué le sucedía a él? No podía entenderlo.

La verdad ya me estaba cansando de esas actitudes pero preferí callar para conseguir el contrato del trabajo, no quería estar despedida por no tener paciencia. Al final de aquella reunión el me hace una pregunta muy extraña.

__Dyen Zu; Señorita Sol, ¿Usted tiene algo que decirme?

__Sol; (yo estaba sorprendida, ¿A qué se refería él con esa pregunta?). ¿Sobre que Presidente Dyen Zu?

__Dyen Zu; Sobre nada, tranquila ya se puede retirar.

Me despedí de él y emprendí mi regreso a la oficina para contarle sobre la reunión a mi jefe, que ya me estaba esperando para darle respuesta sobre el contrato. Sin dejar de pensar en aquella extraña pregunta que me hizo Dyen Zu, ¿Qué tendría que decirle? No es como si él supiera que soñaba con él, lo cierto es que cada vez tenía más dudas y ni una sola respuesta.

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