Volví a soñar con él.

Después de aquella rica comida, me fuí acostar tendida en la cama y mirando hacía el techo haciéndome todo tipo de preguntas que sinceramente sentí que no tenían respuesta alguna me quedé dormida, me sumergí en lo más profundo de mi ser y él apareció.

En mis sueños este hombre reflejaba una mirada cálida pero al mismo tiempo muy distante que atravesaba mi cuerpo y alma, sinceramente me hipnotizaba nunca antes una mirada me había cautivado.

Esa mirada acompañada de una sonrisa pícara que expresaba su rostro me atrapaba cada vez más.

Él en ese sueño se acercaba lentamente hacía mi yo no podía hablar, ni mucho menos moverme era como si una fuerza extraña me obligaba a estar inerte, solo podía mirarlo aunque su rostro por alguna razón a veces no lo podia ver claramente me sentía hechizada.

Hay un momento del sueño donde él me toma de las manos mientras me mira fijamente, se iba acercando cada vez más a mis labios colocando una mano en mi cabeza y con la otra va rodeando mi cintura yo sentía como mi respiración se iba acelerando, mis labios ya estaban muy cerca de los suyos. El espacio que separaba sus labios de los mios podría decirse que era la del grosor de una simple hoja de papel y antes de aquel tan esperado beso desperté.

Al abrir mis ojos ya había amanecido, sentí que la noche había pasado rápido. Me quedé pensando en aquel sueño que se sentía tan real y no dejaba de pensar en ese rostro que ya había cautivado mi ser.

Me levanté de la cama y miré hacía los lados y aún estaba allí en este lugar mágico. Lugar que no recordaba como había llegado, pero de alguna manera me sentía feliz de estar.

Otro día que comenzaba, llegué al trabajo nuevamente preparé mis oficios correspondientes me pareció que ese día había sido hermoso se sentía cálido, al final de la jornada tenía una salida con mis compañeros de trabajo. Llegamos todos al lugar donde íbamos a comer. tomamos algunas cervezas, era de noche ya, todos disfrutábamos de la comida entre chistes y risas.

De repente miré a través de los cristales de una ventana cuando de pronto apareció un rostro parecido al del hombre misterioso de mis sueños, me quedé fijamente mirando hacía dónde se encontraba y sí era él lo estaba viendo, aquel era él de mis sueños o ¿Era una alucinación?.

Sentí que todo se detuvo y mi cuerpo quedó paralizado, aquel rostro estaba ahí a unos pasos de mí.

Cuando decidí levantarme corrí en dirección donde se encontraba él y ya no estaba, había desaparecido ¿Fueron acaso las cervezas? ¿Alucinación? o el simple hecho que quería conocer aquel con el que tanto soñaba.

Por Dios ya sentía que todo era extraño acaso ¿Me estaba volviendo loca?.

Al volver a casa sentía que mi corazón ya latía más rápido de lo normal mientras pensaba en aquel hombre. Solo deseaba volver a soñar con él, quería saber si de verdad era real o simplemente existía en mis sueños e imaginación.

Este día había pasado tan rápido, acostada ya en mi cama solo pensaba en él, hasta cuándo iba a pensar en alguien que no conocía o tal vez estaba pensando en algo que era producto de mi imaginación, me quede dormida esta noche sentí que descansé como nunca antes lo había hecho, extrañamente no soñé con él.

Me desperté por el sonido de una llamada entrante era mi amiga Lin, me estaba llamando para reunirnos y salir a comer.

Mi amiga Lin vivía cerca de mi departamento, pero debido al trabajo de ambas a veces muy poco nos veíamos ella era creadora de webtoon una chica lista e inteligente además siempre tenía algo bueno que decir.

Ese fin de semana con ella me pareció que fué muy lindo, no podía creer que tuviera una amiga que me quisiera tanto.

En todo ese tiempo hablé de diversas cosas con ella, reímos y en realidad como disfruté de su compañía. Entre charlas y risas le comenté a ella sobre mis extraños sueños y sobre el hombre del cuál yo no dejaba de pensar.

Ella sonriente me responde.

__Lin; Sol a lo mejor la razón por la que tienes esa clase de sueños es por que nunca haz tenido pareja o algún amor, tu puedes pensar en ese hombre hasta soñarlo, pero no necesariamente significa que él exista.

__Sol; (A lo cuál yo le respondí) tienes toda la razón.

(Aunque nunca le comenté que lo había visto en aquel lugar donde había ido con mis compañeros de trabajo, de todas formas no estaba segura si realmente era él).

Y pensándolo bien las palabras de mi amiga tenían mucho sentido, solo debía dejar de pensar en eso.

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