Capítulo 19: En la taberna

La Ciudad de los Ecos era un laberinto bajo el agua, donde los corales formaban túneles y cavernas que parecían susurrar en la oscuridad. El grupo avanzaba con cautela, sus pasos resonando en las paredes cubiertas de bioluminiscencia. A medida que se adentraban más en la ciudad, las estructuras de coral se volvían más complejas y vibrantes, iluminadas por la luz suave de las criaturas marinas que flotaban a su alrededor.

Después de un rato de explorar, llegaron a un cruce de caminos donde encontraron una taberna sumergida, un lugar donde viajeros y habitantes de la ciudad se detenían para descansar. Las ventanas estaban hechas de cristal transparente que permitía ver el océano afuera, y las luces internas eran suaves, creando una atmósfera extrañamente acogedora a pesar de estar bajo el agua.

"Creo que este es un buen lugar para pasar la noche."- sugirió Basil mientras examinaba el lugar desde la entrada.

Demian asintió, agradecido por la oportunidad de descansar antes de enfrentarse a la búsqueda de la Llave del Olvido. -"Vamos a preguntar si tienen habitaciones disponibles."

El grupo entró en la taberna, y fueron recibidos por un hombre de aspecto robusto y piel azulada, probablemente un nativo de Orintha.- "Bienvenidos, forasteros. ¿Qué puedo hacer por ustedes?"

"Necesitamos habitaciones para pasar la noche."- respondió Demian.- "Tenemos un largo viaje por delante."

El hombre asintió y les dio las llaves de tres habitaciones disponibles.- "Podrán descansar aquí sin problemas, solo denme 6 monedas de plata Akvy. La ciudad es segura, pero les sugiero que no vaguen solos por la noche. Hay lugares donde incluso la magia puede volverse contra uno."

El grupo subió por las escaleras de coral pulido hasta sus habitaciones. Se dividieron en grupos, como lo habían hecho en Falfit. Demian, Kai y Hades compartían una habitación, aunque Hades no estaba del todo contento con la idea.

"¿Por qué tengo que compartir con él?"- murmuró Hades, lanzando una mirada de desaprobación hacia Kai. -"No tengo tiempo para andar jugando a la casita."

Demian soltó un suspiro.- "No estamos aquí para jugar, Hades. Solo es una noche. Kai no va a molestarte."

Kai, quien había escuchado el comentario de Hades, se encogió de hombros con indiferencia. -"No me molestaré en hablar contigo, Hades. No soy un gran fan tuyo tampoco, así que hagamos esto lo más llevadero posible." - dijo con desdén.

Hades entrecerró los ojos, pero al final aceptó a regañadientes. - "Está bien. Pero no esperes que sea amigable."

Mientras tanto, Sirius y Basil se dirigieron a su habitación. Basil parecía ansioso, mientras Sirius permanecía en silencio, sus pensamientos centrados en la misión y en cómo proteger al grupo.

"¿Crees que estaremos bien aquí, Basil?"- preguntó Sirius mientras cerraba la puerta detrás de él.

"Lo haremos."- respondió Basil con una sonrisa tranquilizadora. -"Este lugar es extraño, pero si todos nos mantenemos juntos, no hay razón para que algo salga mal. Además, tenemos a Hades con nosotros."

Sirius asintió, aunque aún parecía preocupado.- "Es solo que... esta ciudad tiene una energía extraña. No puedo sacudirme la sensación de que estamos siendo observados."

Basil miró a su alrededor, consciente del sentimiento de inquietud.- "Lo sé, pero no podemos dejar que el miedo nos controle. Vamos a descansar. Mañana será un día largo."

En la tercera habitación, Liz y Melissa también se preparaban para descansar. Melissa, aunque normalmente era enérgica y habladora, estaba inusualmente callada, observando cómo Liz organizaba sus cosas.

"Liz." -comenzó Melissa, rompiendo el silencio,- "¿Estás bien? Has estado muy callada desde que llegamos a esta ciudad."

Liz se detuvo por un momento, su mente aún girando con los eventos recientes. -"Solo estoy... pensando en todo. Esta misión, Hades, la Llave del Olvido... Todo parece tan abrumador."

Melissa se acercó a ella y le puso una mano en el hombro.- "Entiendo lo que sientes, pero no estás sola en esto. Todos estamos aquí para apoyarnos mutuamente. Y si Hades no puede ver tu valor, eso es su problema, no el tuyo."

Liz forzó una sonrisa y asintió.- "Gracias, Melissa. Aprecio que estés aquí conmigo."

"Siempre," respondió Melissa con una sonrisa cálida. "Ahora, vamos a descansar. Mañana será un día nuevo, y estaremos un paso más cerca de salvar Akvy."

"Mel... yo, quiero pedirte una disculpa, yo besé a Kai cuando estábamos en Falfit, se que te gusta, y en verdad lo lamento." - dijo Liz con una cara triste.

"No te preocupes Liz, ya lo sabía, pero todo está bien, solo por favor aclara las cosas con Kai, es lo único que puedo pedirte como amiga, ahora si vamos a dormir." - dijo Melissa mientras cerrabas los ojos.

Con todos en sus respectivas habitaciones, el grupo se preparó para la noche. Sin embargo, la energía mágica y misteriosa de la Ciudad de los Ecos los mantenía alerta, sabiendo que lo que les esperaba no sería fácil. Hades, aunque algo molesto por la compañía, sentía una conexión de amistad creciente con Demian, admirando su determinación y fuerza.

Mientras la noche caía sobre la ciudad submarina, todos sabían que el verdadero desafío comenzaría al amanecer. La búsqueda de la Llave del Olvido estaba a punto de empezar, y el destino de Akvy pendía de un hilo.

A la mañana siguiente, la Ciudad de los Ecos despertaba lentamente bajo el manto de agua que la cubría. Los primeros rayos de luz que se filtraban desde la superficie daban un resplandor mágico a los corales bioluminiscentes, haciendo que todo el paisaje submarino pareciera un sueño. El grupo se reunió en el comedor de la taberna, donde el desayuno ya estaba servido.

El menú consistía en platos típicos de Orintha, como algas marinas sazonadas con especias locales, pescado fresco preparado con hierbas mágicas, y un tipo de pan que parecía estar hecho de corales triturados. Las bebidas, una mezcla de jugos de frutas marinas y un té especial que brillaba ligeramente, completaban la exótica comida.

Mientras desayunaban, las tensiones de la noche anterior parecieron disiparse un poco. Incluso Hades, normalmente taciturno y distante, intercambiaba algunas palabras con Demian y Basil.

"Debo admitir que el desayuno aquí es bastante interesante."- comentó Basil, probando el pan de coral con curiosidad.

"Sí, es mejor de lo que esperaba." - añadió Demian.- "Este té tiene un sabor único."

Hades asintió, aunque no dejó de observar a su alrededor, siempre alerta. - "El lugar es extraño, pero tiene su encanto. Aunque no podemos relajarnos demasiado. Hoy empezamos la búsqueda de la Llave del Olvido."

"Correcto."- dijo Demian, agradeciendo internamente la capacidad de Hades para mantenerse enfocado. -"Debemos estar preparados para cualquier cosa. No sabemos qué tipo de desafíos nos esperan."

Liz escuchaba la conversación en silencio, tratando de mantener su mente enfocada en la misión. Sin embargo, los recientes eventos seguían pesando en su corazón. Mientras tanto, Kai, que había estado observando a Liz con una mezcla de preocupación y determinación, decidió que era el momento adecuado para hablar con ella.

Cuando el grupo terminó de desayunar, Kai se levantó y se acercó a Liz. -"¿Podemos hablar un momento en privado?" - le preguntó, su tono tranquilo pero serio.

Liz lo miró, notando la seriedad en su rostro. Aunque sabía que la conversación sería difícil, también sabía que era necesaria. Asintió con la cabeza. - "Claro, vamos."

Se levantaron y salieron del comedor, dirigiéndose a un rincón más apartado de la taberna donde podrían hablar sin ser interrumpidos. Kai tomó aire profundamente, buscando las palabras adecuadas.

"Liz, sé que las cosas han sido complicadas entre nosotros últimamente."- comenzó Kai, mirando a los ojos de Liz. -"Pero necesitaba aclarar lo que siento. Lo que pasó entre nosotros… Me hizo darme cuenta de cuánto te amo. Y por eso, quiero pedirte que seas mi novia."

Liz sintió un nudo en el estómago al escuchar las palabras de Kai. Lo miró con tristeza, sabiendo que lo que tenía que decir no sería fácil, pero era lo correcto.

"Kai." - comenzó, su voz suave pero firme.-"no sabes cuánto me duele decirte esto, pero... me he dado cuenta de que no puedo seguir ilusionándote. Lo que pasó entre nosotros... fue un error. Me dejé llevar por los momentos, por la confusión, pero ahora veo con claridad que mis sentimientos por ti no son los mismos que tú sientes por mí."

Kai la miró, sus ojos mostrando una mezcla de dolor y resignación.- "¿Es por Demian, verdad?" -preguntó en un susurro.

Liz asintió, aunque su corazón se sentía pesado. -"Sí, en parte. Pero no es solo eso. Me di cuenta de que no es justo para ti seguir alimentando algo que no es real. Como te dije la ultima vez yo no te amo, Kai, no de la manera en que tú me amas. Lo mejor es que ambos sigamos adelante, como amigos, sin falsas esperanzas."

Kai cerró los ojos por un momento, asimilando las palabras de Liz. Sabía que eran sinceras, y aunque le dolía profundamente, también comprendía que Liz estaba siendo honesta. Abrió los ojos y esbozó una leve sonrisa, aunque su tristeza era evidente.

"Gracias por decírmelo, Liz. Aunque duele, prefiero saber la verdad. Y... sí, seguiremos adelante como amigos." -respondió con un tono decidido, aunque su voz temblaba ligeramente. -"Siempre estaré aquí para ti, sin importar qué."

Liz le sonrió con gratitud. -"Gracias, Kai. Realmente aprecio que entiendas."

El momento fue interrumpido cuando Demian apareció, llamándolos desde la distancia.- "¡Liz, Kai! Es hora de que nos pongamos en marcha."

Kai asintió, volviendo su mirada hacia Liz una última vez antes de dirigirse de vuelta con el grupo. Liz suspiró, sintiendo un peso levantarse de sus hombros, pero al mismo tiempo, una sensación de tristeza por haber herido a alguien que le importaba.

Al regresar al grupo, Liz y Kai mantuvieron una distancia cordial, ambos sabiendo que habían dado un paso importante hacia la verdad. Hades, que había observado desde lejos, notó el cambio en la dinámica, pero no hizo comentarios. Su mente estaba enfocada en la misión, al igual que Demian.

Con el grupo completo nuevamente, comenzaron a prepararse para su siguiente paso en la búsqueda de la Llave del Olvido. Aunque los desafíos que enfrentaban eran inmensos, sabían que con cada paso se acercaban más a salvar Akvy. Pero en el corazón de Liz, una nueva batalla interna había comenzado, una lucha por encontrar su verdadero lugar en este mundo de caos y magia.

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