La Planificación

La Planificación

*Después del almuerzo*

- Iris quiero que búsques toda la información sobre la Condesa Elizabeth y si alguno de nuestros sirvientes tuvieron alguna conección con la Condesa.

- Pero señorita… Está bien

- Ah! También asegúrate de que nadie más sepa de esto.

(Creo que hasta el momento Iris es la única en la cual puedo confiar… de sólo pensar en el hecho de que en mi vida pasada la Condesa le cortó las manos sólo por haber manchado su vestido, en esta vida me aseguraré de darle un mejor futuro)

*En el cuarto de la Condesa*

- Lucia recuerda que tienes que ganar el favor del Duque, para convertirte en la heredera de toda la fortuna.

*Sonrisa maliciosa*

- Pero mamá, Ámbar es muy torpe por lo que e visto, será fácil superarla.

- Lucia recuerda que ella crecerá y no será la misma que es ahora… cuando me convierta en la Duquesa la próxima semana, te prepararé un profesor, para que te conviertas en la chica envidiada por todos.

- De sólo pensar de que esa niña sea la hereda del Duque…

- Por eso es que tienes que ganarte el favor del Duque, por eso tienes que superarla

- Mamá haré lo que sea necesario para superarla, solo espera.

*El día antes de la boda*

- Señorita, no pude encontrar mucha información de la Condesa, pero al parecer una de las nuevas sirvienta que eligió el Duque trabajó, anteriormente trabajo como la sirvienta personal de la Condesa.

- Bien hecho Iris, por ahora necesito que investigues a esa mucama

- Sí, señorita

*Dos días después*

*En el comedor*

- Buenos días papá

*Lo abraza*

- Hola Ámbar, estás contenta de tener una hermana.

- Sí, claro que lo estoy. Por fin tendré con quién jugar

*Alegre*

*Toc toc*

- Hola Ámbar, hoy es nuestro primer día como familia.

*Cariñosa*

- Oh! Buenos días Con- Buenos días Duquesa.

*Reverencia*

- No tienes porqué ser tan educada, y ahora que somos familia, porque no me llamas mamá?

- Lo siento Duquesa, pero…

*Triste*

- Lo entiendo, no te preocupes. Ah! Ámbar que te parece tener otra sirvienta.

- Sí, me gustaría así tendría otras personas con quién jugar.

*Alegre*

(Enserio se le ven las intenciones en la cara)

- Te parece bien que te envíe yo una sirvienta?

- Sí, no me molesta

*Alegre*

- Entonces la enviaré mañana

- Gracias, por su preocupación

(Si, como no, preocupación, es obvio para que me la está dando)

*Reverencia*

- Les quería decir que desde mañana las dos tendrán que recibir clases, les asignaré un profesor para cada una. ¿Les gusta la idea? (Dice el Duque)

*interrumpe*

- Sí, hace tiempo que quería tener un profesor. (Dice Ámbar)

- Duque, cuáles serán las clases que nos asignarán? (Dice Lucia)

- Serán, matemática, historia, literatura, etiqueta, bordado, entre otras. así que no tendran mucho tiempo para jugar.

(Uf…al fin se acabó… podré dejar de fingir jugar con esas muñecas)

- Tendrán que esforzarse mucho

- Sí, papi

*Alegre*

- Si, Duque

*Al mismo tiempo*

*En la tarde*

Iris, mañana vendrá la nueva sirvienta, tienes que hacer que me vea cómo una persona malvada. Ya que mañana tendré que empezar con las clases, asegúrate de contarle a la sirvienta que no soy muy estudiosa y no doy inteligente.

*Seria*

- Entiendo señorita.

(Tengo que hacer todo lo posible para que me vean cómo una presa fácil, y sólo así caeran en mi trampa)

*En la noche*

*La oficina del Duque*

*Toc toc*

- Puede pasar

- Papi, quería pedirte algo

*Tierna*

- Dime, que necesitas?

- Pues… quería tener un profesor de esgrima, si pudieras...

- Un profesor de esgrima... No crees que eso no es alg-

- Quiero a un profesor de esgrima para defenderme de los que pudieran querer lastimarme en el futuro.

*Interrumpir*

- Si eso es lo que quieres, le diré a la Duquesa que contraté a alguien.

- Papá me gustaría que lo de aprender esgrima fuera un secreto, para que cuando aprenda bien les pueda mostrar mis habilidades, algo así cómo una sorpresa.

- Si así lo quieres, contrataré a uno personalmente y podrás entrenar después de las otras clases, tendrás que entender que requerirá de mucho esfuerzo.

- Lo entiendo, si me disculpas papá me retiro a dormir, no trabajes mucho buenas noches.

- Antes de que te retires, quería decirte que pasado mañana es le cumpleaños del principe heredero, como su prometida debería asistir

- Claro que asistiré. Buenas noches papá

*Alegre*

*En el cuarto de Ámbar*

(En mi vida pasada Lucía empezó a practicar con la espada, porque el príncipe heredero, le gustó cómo una chica realizó la danza de la espada, en esta vida no espero nada de ellos más que verlos sufrir, espero que se preparen)

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