Una noche loca

Dylan sé encuentra esa noche, sirviendo bebidas, pues el club está lleno y, falta personal, sí que no le quedo más que servir bebidas, sus ojos están puestos en Alejandra, no puede evitar verla, le parece la choca más hermosa que ha visto, pero ella ni siquiera lo voltea a ver, solo está cabizbaja, sin voltear a ver a nadie.

Ya no hay lágrimas, solo siente Alejandra en esos momentos, una gran decepción, por el engaño de Fernando , y el de su padre que tal parece que solo es un negocio para su padre.

Después de un rato Dylan, le vuelve a preguntar. - Si quiere que le lleve algún lado, Alejandra solo le responde.

- Ni siquiera sé, si en estos momentos tengo casa, después de lo que hice. - Le dice Alejandra a Dylan.

Bueno, te puedo llevar a donde gustes, a casa de una amiga, estás algo pasada de copas y, en ese estado puede ser peligroso.

- Está bien. - Dylan se porta amable con ella, al verla que no puede no puede caminar por lo ebria que está, la ayuda tomándola por la cintura, para que pueda caminar y, no se llegue a caer.

Cuando están por salir del club, Nubia que está ahí sentada un poco retirada de la entrada la ve. - Wow, esto si es un verdadero milagro para mi, estoy salvada. -

De inmediato saca su teléfono y, trata de tomar las mejores fotos que la salvaran de que su tío la corra de la casa por lo que hizo.

Después de tomar varias fotos, las revisa, pero sé da cuenta que no logro tomar bien el rostro del hombre con el que Alejandra está saliendo del club, pero el rostro de Alejandra se ve perfectamente y, de como va abrazada a ese desconocido.

Como Dylan no sabe a donde llevarla, decide llevarla a su departamento, cuando llegan al departamento, Dylan la lleva cargando hasta la habitación, donde la deja sobre la cama, pero Alejandra lo jala por el cuello de la camisa diciéndole.

- Te parezco fea, o ves algún defecto en mí. -

El destino los a vuelto a juntar, pues el es la persona con la que ella se estrello en el aeropuerto, Dylan desde que la vio sentada en la barra, la reconoció.

Ahora ella está hablando con el, pero tal vez después ni siquiera se acuerde de él.

Pero ella ni siquiera sabe que es él, pues ni siquiera lo volteo a ver, Dylan le responde. - No, claro eres una chica muy hermosa, estaría encantado que fueras mi novia. - Le dice Dylan con una sonrisa.

Alejandra solo lo queda viendo y, lo atrae hacía ella, tomando la iniciativa, lo besa, Dylan se queda atónito, pues lo ha tomado por sorpresa, pero no puede resistirse a los encantadores labios suaves dulces y delicados de Alejandra.

Dylan le corresponde de la misma manera, que no se detienen, como si fueran dos amantes, que no se han visto en mucho y, tienen el deseo de estar juntos.

Y dar rienda suelta a sus pasiones más íntimas, Dylan comienza a quitarle la ropa poco a poco, observando cada parte del cuerpo de Alejandra, ante sus ojos tiene el cuerpo perfecto más perfecto que, jamás haya visto.

No deja ni un solo centímetro del cuerpo de Alejandra sin recorrer con sus besos, pero nota que Alejandra está un poco tensa y se detiene, Alejandra solo le dice. - No te detengas, termina lo que has comenzado. -

Se queda un poco pensativo, por lo que ella le a dicho, Alejandra le comienza a desabrochar la camisa, Dylan solo sé deja llevar por ella.

Pues la tentación por esa chica es grande, desde que la vio en el aeropuerto, le gustó y ahora está en su cama, y no piensa dejarla ir. Sin que la haga suya después le pedirá que se quede con él. Porque se enamoro de ella a primera vista.

Después de una larga y loca noche de pasión, que no pararon en repetir y saciar sus ansías de estar juntos. < Que tendrá consecuencias >

Dylan sé a quedado profundamente dormido, Alejandra a aprovecha para irse sin que él, se de cuenta, son casi las seis de la mañana.

Mientras que por otro lado, el padre de Alejandra le han enviado las fotos de Alejandra.

Donde sé ve claramente, abrazada de otro hombre que no es Fernando. Su padre está más que furioso. - Como es posible que Alejandra le haga esto a Fernando, el que se aportado tan bien con ella. -

Alfonso, el padre de Alejandra camina de un lado a otro, mal diciendo el momento en que dejo ir a Alejandra a ese viaje.

El padre de Alejandra piensa, que ella solo hizo viaje para encontrarse con su amante.

Cuando Alejandra llega a su casa, su padre la está esperando al verla que entra enseguida le dice. - Así es como le pagas a Fernando. - Su padre le avienta la fotos a Alejandra en el rostro, para después abofetearla, que hace que Alejandra tropiece y, este a punto de caer al suelo.

- Te comportas como una prostituta, a caso a eso fuiste a Seattle, nada de que fuiste a ver a esos inversionistas, te fuiste a ver con tu amante. -

Alejandra está atónita, que no sabe como responderle a su padre, por su mente solo pasa, ¿como pudo su padre enterarse tan rápido? de lo que hizo la noche anterior. ¿Cómo lo supo?

Yo no tengo ningún amante padre, yo no sé dé donde salieron esas fotos.

Que me puede usted decir, del trato que tiene con Fernando, porque eso es lo que soy un maldito, trató que hizo usted con él. Es por eso que el se casa conmigo.

Pero el padre de Alejandra la vuelve abofetear, de lo tan fuerte que la abofeteado la hace caer al suelo.

Alejandra arremete en contra de su padre. Ya veo que solo soy un negocio para usted señor Alfonso.

Donde quedo yo como su hija, y si me fui con otro hombre, después de que lo encontré con.

Pero Alejandra sé queda callada no pronuncia el nombre de su prima.

No eres más que un cualquiera Alejandra, te quiero fuera de esta casa, en mí casa no viven prostitutas, vete con el hombre que pasaste la noche, a ver si él te quiere.

Mientras el padre de Alejandra la corre de su casa, Dylan sé a despertado, se da cuenta de que la chica, con la que paso la noche no está, a su lado.

Se levanta la busca por todo el departamento. - Como demonios no me di cuenta a que hora te fuiste. No me hagas esto mi pequeña, te quiero conmigo.

Después toma su teléfono móvil, hace una llamada. - Quiero que busquen a la chica con la que salí del club anoche, vean los vídeos de vigilancia, debió de ver quedado grabado. -

Al otro ido de la línea. - Si jefe no se preocupe la encontraré. -

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