capitulo 3

Me quedé en el cuarto de doña Petronà allí había dos camas la de ella era de bronce y la mía de metal me levantaba a las 7 de la mañana para ayudar a preparar el desayuno para Ester y su esposo Juan después Petronà y yo desayunábamos en la cocina y también almorzábamos allí estaba prohibido estar en el comedor junto con ellos porque para Ester nosotras no merecíamos comer en la mesa una por vieja y otra porque yo era una bastarda como me llamaba ella

Cuando no hacíamos bien la limpieza o yo no lavaba bien la ropa Ester se dedicaba a golpearnos en mí caso vaya y pase porque sé que era una arrimada y tenía que ganarme el plato de comida, pero doña Petronà era su mamá no entendía por qué le tenía tanto odio la golpeaba feo a veces la encerraba en el baño, otras veces la bañaba con agua fría y se podía escuchar sus gritos suplicando que la dejara tranquila y yo me sentía impotente por no poder hacer nada, al igual que ella lloraba en el rinconcito que teníamos las dos dónde se sentaba en su sillita junto a la mía en la cocina cerca de la ventana, cuando Ester la dejaba de pegar yo entraba al cuarto a abrazarla para consolarla y limpiar sus heridas entre sus lágrimas ella me decía

_ está bien todo está bien vamos a la cocina antes que ese demonio vuelva

_ bueno abue déjame ayudarte

_bueno sabes que yo soy de hierro??

_No abue porque??

Contigo aquí tengo más fuerza ese demonio no me va a tirar así nomás

Pasó el tiempo hasta que un día Juan no fue al trabajo y se quedó en casa Ester tuvo que salir a la tarde a ver una amiga que estaba embarazada, él se quedó en la sala viendo la tele con imágenes en blanco y negro, las primeras que había en los años 86

Pidió que le llevará un jugo porque ese día hacía calor y abue estaba cansada como para levantarse de la silla así que yo tuve que llevar el jugo

_ hola pequeña

Yo no decía nada tan solo verlo me causaba temor no veía la hora de salir corriendo

¿_que te comieron la lengua??

Cuánto estaba por irme me agarró de la muñeca y me puso unos caramelos

ven toma esos son muy ricos

Me puso las manos en mi hombro y me sentó en una silla que estaba juntó a él

_Mirá ya va a empezar unos dibujitos

Yo miré la tele y estaba dando unos dibujitos y en ese momento de descuido el aprovecho para levantarme en sus brazos y llevarme al cuarto yo intenté agarrarme del marco de la puerta pero no pude me tiró sobre la cama quise escapar pero el ya estaba encima mío metiendo sus manos debajo de mí ropa me tapo la boca para que no se escuche mis gritos hasta que , apareció Ester gritando en la puerta

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