CAPÍTULO 11

...Cielo...

Mientras cantaba una canción de mi cantante favorita, me planche el cabello, puse un poco de rubor y brillo labial, me coloqué un vestido cinco dedos por arriba de las rodillas color rojo y unos zapatos de tacón negro, tomé mi abrigo y baje las escaleras cantando feliz, pero mi sonrisa se congeló al ver a papá enojado parado al final de la escalera

- Acabo de hablar con el intendente - dijo masajeando su frente

- Mira que divertido, bueno ya me voy - intenté pasar rapidito por su lado pero el me detuvo

- Algo ahí jovencita!! En que rayos estabas pensado Cielo? En que momento pasastes de rayar autos a golpear personas? Eso es lo que con tu madre te hemos enseñado?

- No Pero tampoco me iba a quedar de brazos cruzados viendo como ese bastardo golpea a mi amiga y nadie hace nada!! Lo siento papá Pero debo de irme, Rodri me espera

- Cielo Wilson!! - grito papá molesto y me detuve nuevamente

- Que sucede papá? - pregunte con una sonrisa inocente

- Le has roto la nariz!! En este momento el chico se encuentra en cirugía, su tío quiere que te disculpes con el...

- Pues que me agradezca, le urgía una rinoplastia - dije y papá dejo ver una pequeña sonrisa - Y no, no me voy a disculpar por darle su merecido

- Dios mio que haré contigo? - pregunto papá sonriendo

- Amarme como lo has hecho durante estos veintidós años - respondí fingiendo inocencia

- A dónde tienes tu dichosa cita con el policía? - pregunto papá con seriedad, puse los ojos en blanco antes de responderle

- Se llama Rodrigo papá, Rodrigo!! Cómo si no conocieras su nombre, no porque no siguió una carrera según tu " exitosa " deja de ser menos o mejor persona, es el chico que amo y deberías comenzar a hacerte la idea de que no pienso volver a separarme de él

- Mi pequeña rebelde que haré contigo? Vamos te llevo a tu cita - papá tomó las llaves de su auto y salió delante de mi

Durante los siguientes veinte minutos ninguno hablo, papá estaba perdido en sus pensamientos, quien sabe que estaría pensando, de cualquier modo el silencio no era para nada incómodo, al contrario siempre me sentí segura al lado de mi padre

El auto de papá se detuvo en él puerto, el se giro y me observo con dulzura

- Escúchame princesa si quieres volver a casa, te sientes incómoda o pasa algo me llamas y vendré volando a recogerte de acuerdo? - pregunto mientras acariciaba mi mejilla

- Papá estaré bien, mejor ve a casa mamá pronto saldrá de la clínica

- Cierto tu hermosa madre pronto terminará su jornada laboral, creo que mejor le preparé una cena Romántica en casa - dijo papá pensativo - No en casa no, mejor la paso a buscar por la clínica y la llevo a cenar a su restaurante favorito - dijo emocionado

- Esa es una excelente idea papá

- Si, si mejor ya bájate del auto hija que debo de ir rápido antes que tú madre se vaya

- Bueno, bueno tampoco es para que me corras - bromee

- Cuídate mucho princesa cualquier cosa me llamas y papá vendrá pronto, te amo hija

- Ve tranquilo papito, también te amo - después de que mi padre me diera un beso en la frente baje del auto

Caminé unos metros hasta llegar a un yate que estaba amarrado bajo el nombre del "Viajero " Rodri estaba parado a un lado del yate esperándome, se veía muy guapo llevaba puesta una camisa blanca desprendida los tres primeros botones y un pantalón negro, sonreía ampliamente

- Creí que no vendrías - mencionó él

- Y perderme nuestra cita? Jamás

- Estás hermosa mi bella Cielo - dijo mientras me abrazaba y guiaba adentro del yate

- Gracias tu también estás precioso Rodri

Una vez que subí al yate él lo desato y comenzó a moverse

- Cenaremos a la luz de la luna mi bella Cielo

Me quedé encantada al ver el interior del yate estaba decorado con pétalos de rosas y velas en forma de corazón, tal como Rodrigo lo dijo el yate se detuvo en medio del agua bajo la luz de la espléndida luna llena, una música suave se escuchaba de fondo, Rodri me guío hasta la mesa y un mozo se apresuro a destapar los platos dejando a la vista una rica lasaña de vegetales, nos sirvió dos copas de vino y luego se retiró

- Wow tiene pinta de estar buena - mencioné mientras llevaba un pequeño bocado a mi boca

- Lo tiene, aunque dudo que sea ni la mitad de deliciosa como tú comida

La cena transcurrió entre bromas y anécdotas cuando menos me di cuenta ya llevábamos más de cinco horas en el yate, hacía tantos años no me sentía tan cómoda con alguien como con Rodri, me dolía la panza de tanto reír

Cuando el yate se acercó nuevamente al muelle, unas gotas gordas comenzaron a caer, el cielo se iluminaba con los relámpagos que anunciaban la llegada de una tormenta

- Será mejor que te lleve a casa - menciono Rodri mientras se quitaba su campera y me la colocaba en mis hombros, ya que debido al apuro de papá por qué bajará me olvidé mi abrigo en su auto

- De acuerdo vamos

Mientras nos dirigíamos a dónde estaba su auto, se podía escuchar con claridad la música de un boliche bailable que se encontraba a unos metros de distancia, la canción que sonaba era mi preferida, sin importarme la lluvia comencé a bailar en medio de la calle, Rodrigo comenzó a reír a carcajadas

- Ven mi amor baila conmigo - mencioné tirando de el

- Estás loca preciosa yo no sé bailar además está lloviendo muy fuerte vamos sigamos - dijo entre risas no me di por vencida y seguí insistiendo

- Anda no seas aburrido... por favor!! - rogué haciendo un evidente puchero que logro convencer a Rodri

El comenzó a moverse o al menos intentar moverse al ritmo de la música era muy gracioso verlo intentando bailar, se notaba que para esto Rodri es pésimo, a esta altura la lluvia ya era torrencial pero no nos importaba, coloqué mis brazos al rededor de su cuello y el me tomo de la cintura y comenzamos a bailar, coloque mi cabeza en su pecho y podía sentir como su corazón latía a gran velocidad

Nuestras risas eran todo lo que se podía escuchar bajo la lluvia, corríamos intentando llegar al auto de Rodri mientras los rayos caían incesantemente

- Eso fue divertido, debemos volver a hacerlo - mencioné una vez estuvimos dentro del auto

- Hacía tantos años no me divertía tanto! Gracias Cielo por esta noche y por hacerme tan feliz - dijo Rodri acariciando mi mejilla

- Te amo Rodri nunca lo he dejado de hacer - mencioné, ya no quería seguir esperando no podía negarlo lo amaba desde que era una niña y no estaba dispuesta a seguir perdiendo tiempo lejos de el

- Yo también te amo Cielo, te he amado toda mi vida, eres el amor de mi vida, mi dulce amor, te amo tanto - dijo y nos besamos

Nos separamos por falta de aire, Rodri sonrió y acarició mi cabello y luego habló

- Cielo quieres ser mi novia?

- Claro que quiero!! - respondí y me abalance sobre el

Una hora después estábamos estacionados fuera de mi casa, no me quería separar de el nuevamente pero sabía que no podíamos quedarnos mucho tiempo aquí afuera o papá sería capas de aparecer en cualquier momento, nos despedimos y entre a casa, aún estaba mojada por la lluvia, entre a mi habitación y fui directo al baño, me apoye contra la puerta y suspiré como tonta sin dejar de acariciar mis labios que hasta hace unos minutos habían Sido besados por Rodrigo, sin quitar la enorme sonrisa de mi cara entré a ducharme me sentía tan feliz había recuperado a mi amado Rodrigo y esta vez nada ni nadie nos separaría.

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