CAPÍTULO 10

...Cielo...

Ya ha pasado una semana que arregle el mal entendido que había entre Rodri y yo, una semana en dónde he Sido la chica más feliz del mundo, siento que en cualquier momento voy a despertar y volver a cuando Rodri se había convertido en un extraño para mí, todos los días me envía flores con una nota de buen dia y un poema diferente escrito a puño y letra por el, es tan romántico, hemos decidido tener citas por lo que está tarde me llevará a pasear, no quiso decirme a dónde segun el es sorpresa, ya quiero que llegue la hora

Así como ya pasó una semana de que Rodri y yo estamos juntos también, hoy se cumple una semana de que papá está durmiendo en uno de los cuartos de invitados, mamá decidió colocarle la ley de hielo por tiempo indefinido, es muy gracioso ver a papá arrastrandose pidiendo perdon a mamá, hasta le regaló una camioneta nueva y ni de esa manera logro algo, lo cierto es que mi hermosa madre solo está jugando con el, ya que después de regañar a mi padre como si fuera un niño pequeño ya lo había perdonado pero eso no se puede enterar papá no por ahora según mamá el debe de aprender a no cometer estupideces ni actuar a sus espaldas, cada vez que papá sale de casa como un cachorro abandonado, mamá mis hermanos y yo comenzamos a reír a carcajadas, esta tan arrepentido que hasta invito a Rodrigo a comer a casa mañana a la noche

Estoy en mi restaurante terminando de dar unas órdenes sobre el menú de esta noche cuando una de las empleadas me dice que me busca una chica,salgo a ver y me encuentro con Anahí mi mejor amiga

- Hey que sorpresa más linda!! Al fin te cuerdas que tienes amiga! - la regaño ya que hace más de una semana que no la veo

- Hola Cieli lo siento he estado algo ocupada - me responde algo cabizbaja Anahí y es ahí cuando caigo en cuenta que está algo rara

- Porque rayos tienes lentes de sol un día lluvioso? - pregunto acercándome a pasos apresurados hasta ella y le quitó de un tirón los lentes que cubren la mitad de su cara

- Me caí - es lo primero que me dice cuando el morado que rodea su ojo queda al descubierto

- Ese infeliz te golpeó no es así? - pregunto más que indignada ella solo agacha la mirada provocando que mi irá aumente más

- Ana, te he dicho mil veces que no hagas eso levanta la cabeza, tu no tienes la culpa de que ese maldito psicópata no pueda controlarse

- Ya no se que hacer Cielo, ya no se cómo hacer para alejarme de él, estoy tan cansada amiga

Me apresuró a abrazarla y besar su cabeza, Anahí tuvo la mala suerte de enamorarse de un niñito rico de esos que creen que por ser hijitos se papi pueden hacer lo que quieren incluso golpearla por nada, varias veces ha intentado denunciarlo, pero al ser el sobrino del intendente es intocable, también intento huir una vez Pero él la encontró antes de que llegara a la terminal y la llevo a la fuerza nuevamente con el, tristemente Anahí no tiene familia que la defienda de ese loco, solo me tiene a mi

- Porque no vas a casa y te quedas ahí? Sabes que estarás más protegida que en cualquier lado

- No quiero meter a tu familia en problemas

- De eso ni te preocupes

La acompaño hasta la calle y después de subirla a un Uber y asegurarme de darle bien la dirección me quedo pensando unos minutos, Anahí es como una hermana para mí, la conocí en una de las casas hogar que tenía mi abuela yo tenía díez años y ella once, había acompañado a mamá atender a las niñas y ahí la conocí nos hicimos amigas y siempre que podía iba a visitarla, cuando cumplió los dieciocho mamá la ayudo dándole trabajo en el hospital y pagando le la carrera de enfermería, actualmente esta recibida y es la mejor en su profesión

Saque mi celular y busqué en las redes sociales el nombre de ese infeliz, el parásito no hacía nada en todo el día más que estar en algún bar o haciendo acto de presencia en algún acto de su tío, sonreí al darme cuenta de que estaba en un club a unos minutos de aquí, si la policía no hacía nada por mi amiga lo haría yo

Subí a mi auto y maneje hasta el club, le pedí a Víctor que me acompañará, pero que no interfiera a menos que yo se lo pida, él asintió

Víctor era mi guardaespaldas desde que tengo uso de razón, creo que me cuida desde que era una niña, es excelente en su trabajo, tanto que a veces hasta me olvidó que existe

Al entrar al club privado el cuál por ser horas de la tarde estaba bastante lleno, busque con la mirada al parásito del novio de mi amiga, lo encontré enseguida estaba jugando al pool con dos amigos, caminé hasta ellos y hablé

- Oye tú imbécil quiero hablar contigo - dije llamando la atención de los tres

- Oh pero si es la princesita Wilson acaso te escapaste del castillo - se burlo el idiota de Hernán

- Quiero que dejes en paz a Anahí, no le vuelvas a poner una mano encima o te juro que te vas a arrepentir - dije y el le dedicó una mirada a sus amigos y comenzaron a reírse

- Si? ¿Y que me vas a hacer princesita? ¿Arrojarme uno de tus pastelitos a la cara?? Porque mejor no sigues jugando a la cocinerita en tu castillo y nos dejas seguir en lo que estábamos…

Y cómo trato a la huérfana de tu amiga no es tu problema métete en tus asuntos - dijo el, en ese preciso momento perdí todo el autocontrol que tenía

- Maldito te gusta golpear a las mujeres? Haste el macho conmigo - dije dándole un empujón el cuál lo tomo desprevenido y lo hizo caer sobre la mesa de billar

- Que demonios? - grito el y se abalanzó sobre mí Pero antes que lograra tocarme fui más rápida y de un sólo movimiento lo acosté de cara contra la mesa sosteniendo con fuerza sus brazos en su espalda el comenzó a sollozar como nenita por dolor

- Pará que vas a quebrarme los brazos - chillo y sus amigos en ese momento quisieron meterse a defenderlo pero Victor los detuvo

De una patada lo hice caer de rodillas al suelo, sin darle tiempo a que reaccione le di un rodillazo en la cara produciendo que su nariz comience a sangrar sin parar, otro rodillazo en su entrepierna y el tonto cayo al suelo en posición fetal mientras lloraba como niño y se ahogaba en su propia sangre

- Si le vuelves a poner una mano encima a mi amiga te vas a repetir - dije mientras pisaba con todas mis fuerzas su vientre el sólo lloraba como niñita

Me di la vuelta para irme y me di cuenta de que todos estaban grabando con sus celulares, maldije despacito si mi padre se llega a enterar de esto me va a matar, le había prometido intentar controlar mis ataques de justiciera Pero no pude evitarlo, se trataba de Anahí mi mejor amiga y yo siempre la iba a defender de quien sea, ni jamás la voy a dejar sola así como mi tía Gina siempre apoyo y cuido a mamá también lo haré yo con Anahí

Enderece mi espalda y salí del lugar caminando como la reina que soy (Palabras de mi abuela Bárbara) Subí a mi auto y me dirigí a casa, mientras conducía pensé que bueno que era saber taekwondo, recuerdo que cuando teníamos once años Rodri se inscribió en un gimnasio para aprender dicha disciplina y como yo no podía estar lejos de él, según todos era como un abrojo pegada a Rodrigo todo el tiempo, decidí inscribirme a taekwondo con él, cuando le dije a mis padres papá pego el grito en el Cielo y obviamente se negó, Pero mamá como siempre me apoyo y me llevo a inscribir, recuerdo la primera vez que llegué con el primer golpe, mi padre exagerado como siempre tomo una escopeta que tenía guardada y quería ir a dispararle al niño que me había golpeado, si no fuera por mamá no sé que habría pasado

Al llegar a casa suspiré tranquila al darme cuenta que solo estaba el auto de mi hermano, subí a mi habitación y ahí estaba mi amiga durmiendo en mi cama se veía tan indefensa, tomé algunas cosas y me fui a bañar a uno de los cuartos de invitados, quería prepararme con tiempo para mí cita, no veía la hora de estar frente a Rodri, mi gran amor

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