Conociendo al Tito...

Felipe...

Me voy a mi habitación casi flotando de la felicidad. Apenas toqué con mi cabeza la almohada, inmediatamente caí rendido. Pero a las 5:30 de la mañana mi cuerpo ya como en modo automático se despierta. Es hora de hacer ejercicio. Voy por mi viejo a ver si va a hacer ejercicio y resulta que él también viene saliendo a lo mismo que yo.

Nos encontramos, nos venimos saludando y vamos en dirección al gym que tenemos en casa cuando veo que Brandon e Ian también bajaron. Me alegro mucho que mis hermanos estén bajando con nosotros. Estuvimos entrenando hasta las 7:30 de la mañana y fue así solo porque mamá fue a decirnos suficiente trabajo físico... Ahora a comer bien nutritivo y a entrenar los cerebros. Tienen sus clases especializadas así que andando. Y terminó palmeando sus traseros y el de papá incluido.

Salí de allí porque han sido muchas las ocasiones en las que me he aguantado sus escenas calenturientas, así que mejor me voy. Estoy sudando a cántaros por el entrenamiento que hicimos. Si bien es cierto que no pude usar mucho mi mano, use mis piernas y mi torso lo más que pude. Me quité la camiseta, cosa que siempre hago, y voy camino a subir a ducharme, cuando choqué con mi bonita. aaauuuuchhh... Perdón, lo siento... Dijo con su vocecita tierna. Al ver que era yo contra quién había chocado, pude sentir como sus ojos me recorrieron de cabeza a pies y un ligero mordisco en sus labios es suficiente para hacer que mi sudoración se vuelva a hacer copiosa.

Lo siento mucho Felipe... No sabía que tú... no era mi intención chocar contra ti. Por cierto, ¿De qué están hechos tus músculos? ¿Seguro que es solo músculo o hay concreto allí dentro? Dice sobando el brazo donde chocó contra mi. Mi sonrisa se vuelve más y más lobuna... Lo sé. Sé que mi cara en este momento debe estar reflejando las ganas que tengo que comerme esos labios rosaditos que tiene mi bonita. Miro esos ojos tan únicos que tiene y puedo ver las pupilas dilatadas. Me acerco a ella y no se mueve, está igual de concentrada que yo...

Voy bajando lentamente sin apartar mi mirada de la suya, hasta el punto en el que estoy a milímetros de su boca. Me quedo allí y las miradas pareciese que echaban chispas. Remojó sus labios con saliva, yo hice lo mismo y finalmente roce sus labios con los míos... Y digo rocé, porque literalmente cuando ya iba a profundizar el beso, Oliver comenzó a llamarla y ella dió un salto del susto y por instinto se alejó de mí. Voy pa... Fue lo único que dijo para luego mirarme, arreglar su cabello, bajar la mirada al piso, sonreír pícaramente e ir en dirección a donde la llamaba su papá.

Me quedé allí yo también sonriendo como idiota sabiendo ahora que ella SI desea que la bese, y si desea que esto suceda. Alzo los brazos en señal de victoria mientras agito la camiseta al aire. Veo a Paola a lo lejos, y me hace señas para que me bañe primero. Entro a mi habitación, y me meto directo a la regadera. Canto (cosa que nunca hago) salgo, me organizo con una ropa cómoda, pero casual y bajo casi volando. Cuando yo estoy entrando, de las puertas de atrás de la casa vienen entrando las personas que me dieron también todo el amor sin importar que.

¡Bebé mío! Dice mi Tito. TITOOOOOO grito mientras lo cargo y doy vueltas con él por los aires... Bájame, bájame niño... Me vas a terminar de partir la cadera... Lo beso en la coronilla de la cabeza y luego también cargo al abuelo Nate. ABUUUUU... Mi abuelo tan calmo como siempre se deja cargar y dar vueltas. Lo bajo y también besó su coronilla. Los extrañé comento. Bueno... Yo no te mandé a irte a ninguna parte, fuiste tú solo quien decidió irse tan lejos a estudiar las estrellas. Y con el Tito siempre es lo mismo... Si por él fuese, todos viviríamos aquí debajo de las sombras de sus alas.

Titooooo... Digo en modo de encontrar la paz porque cuando se le mete un tema en la cabeza no hay quien lo saque de él. El abuelo Nate también lo coge de la mano y el Tito en señal de reclamo le jala la mano al abu y me da un zape a mí en el hombro. Estamos en eso y cuando nos dimos cuenta, todos estaban en la sala de estar mirando el espectáculo. Entonces aprovecho y digo Bueno Tito, deberías agradecer a que me fui lejos de aquí, porque gracias a eso es que encontré a la chica más hermosa del mundo.

Sally se puso como un tomate mientras Oliver y Samantha se abrazan. Papá, buen día, pa... Saluda mi papá a los abuelos, mamá y mis hermanos también saludan, pero estos últimos si vienen corriendo hacia ellos. Cada uno da un beso en la mejilla a ambos abuelos y comienzan a bajar unas pequeñas escaleras que separan las salas. Bueno, -Dice mi Tito- A ustedes los tengo todos los días y hacemos travesuras TODOS los días, ahora déjenme ver a la futura señora Johnson.

En eso se levantan Oliver, Samantha y por último mi Sal. Un placer conocerlos a ambos Dice Oliver con mucho respeto y hasta una media reverencia. El Tito sin poder dejar de ser él, le dice... Yo no soy de la realeza Señorrrr... Oliver se da cuenta de que no ha dicho sus nombres, por lo que inmediatamente se corrige. Soy Oliver Brent, mi esposa Samantha y nuestra bebé milagro... Sally. Concluyó Oliver. Mucho gusto. Nosotros somos los abuelos de Felipe, Mi esposo Nathan Johnson y yo soy Brandon Johnson. Presentó mi Tito.

Sally se había quedado un poco detrás de sus padres, por lo que el abuelo no la había detallado mucho. Saludó de beso y abrazo a mis suegros y ellos encantados. Mi abuelo Nate a pesar de ser tan callado, es una persona sumamente gentil. Sabe cuándo hablar y cuando no. A mi Tito ya lo conocen. Habla hasta dormido. Estuvieron interactuando un poco hasta que el Tito dice... Pero... ¿Sam es que llama la chica? Yo lo miro y le hago señas que no... Perdón mi niña... Perdona a este viejo que ya no tiene buena memoria... ¿Me repites tu nombre por favor?

Oliver estuvo a punto de volver a decir el nombre de su hija, pero Samantha inmediatamente lo frenó. Déjala que se presente ella. Susurró, cosa que agradecí. Sally es como una cebolla hay que irla pelando capa por capa, pero para el Tito no es así, el Tito siempre dice que cuando las personas son así, hay que pelarlas con cuchillo que es más rápido y sé que con Sally será de la misma manera. Sally se paró y tímidamente lo miró con una carita de pánico y se presentó. Mucho gusto... soy Sally, Sally Brent. Cuando el Tito finalmente pudo mirarla a los ojos, Dio un grito... ¡Por todos los cielos! ¡Qué ojos tan hermosos tienes mi niña hermosa! Wow... Es impresionante la belleza tan única y fuera de este mundo que posees en tus ojos. Sally estaba que si le pinchan aunque fuese un poquito sus mejillas, se desangraría por completo porque creo que toda la sangre se fue hacia allá.

¡No me defraudaste mi niño!. Me dijo. Sonreí porque él siempre me decía que si le traía una Barbie "plástica y perfecta" me la correría con agua caliente para que todo lo plástico se deshiciera. Eres una joya preciosa en medio de un mundo lleno de joyas de vidrio y falsas. Ya me imagino por qué mi nieto se fijó en ti. Vales todo lo que él te quiera dar y más. Y si él se comporta mal contigo, vienes y me lo dices a mí que ya el Tito sabrá cómo hacerlo pagar.

Desayunamos? Me estoy muriendo de hambre. Terminó diciendo como si con lo que acaba de decir no me estuviese metiendo en un problema del tamaño del mundo. Mis padres y hermanos solamente se rien y burlan de mi, mientras el abuelo Nate me miró y me palmeó 2 veces el hombro. Sabes que lo que Brandon dice no es jugando ¿No es cierto? Asentí con la cabeza. De ahora en más debo andar con el doble de cuidado, porque el Tito es de armas tomar.

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