Una advertencia inesperada

Dos días después del encuentro con Rebecca, Kyle y Annia habían vuelto a su rutina, Kyle trataba de mantener la normalidad en medio de la tensión subyacente, se ocupaba a distancia de lo que pudiera ocurrir en la empresa sin descuidar su papel de esposo por contrato, mientras James habia contratado a alguien para que siguiera a Elena y a Marcos quienes hasta el momento se mantenían alejados y en calma. Era más del mediodía y Annia estaba en la sala, concentrada en su libro de bocetos, cuando el teléfono de Kyle comenzó a sonar.

El jóven, que estaba en la cocina preparando algo para almorzar, miró la pantalla y vio que era James nuevamente. Sintiéndose un poco inquieto, contestó la llamada.

-¿Qué pasa, James?- preguntó Kyle, tratando de mantener la voz casual.

-Kyle, necesito que te presentes en la empresa lo antes posible. Hay una documentación urgente que debes firmar- respondió James, su tono sonaba urgente.

Kyle suspiró, sabiendo que no tenía opción.

-Está bien, estaré ahí en unos minutos- dijo antes de colgar.

Se dirigió a la sala donde Annia seguía dibujando, y mantenía su concentración total en la página.

- Annia- dijo suavemente, no queriendo sobresaltarla.

Ella levantó la vista, sonriéndole.

-¿Sí, Kyle? ¿Todo bien?

Kyle asintió, aunque su mente estaba ocupada con la llamada de James.

- Sí, es solo que mi agente llamó nuevamente. Parece que nos han aceptado para una campaña publicitaria y necesito ir a firmar unos papeles.

Annia dejó su lápiz y se levantó, su rostro se iluminó con una sonrisa genuina.

-¡Eso es maravilloso, Kyle! Me alegro mucho por ti. No te preocupes, ve tranquilo. Yo planeaba reunirme con Cloe en su departamento más tarde de todas formas.

Kyle se sintió aliviado por su comprensión.

-Gracias, Annia. Prometo que no tardaré mucho.

Ella se acercó y le dio un abrazo rápido.

-No hay prisa. Disfruta de la oportunidad. Te veré luego- afirmó.

Kyle le devolvió el abrazo, sintiendo una mezcla de gratitud y culpa. Después de un momento, se separó y le sonrió.

-Cuídate, Annia. Nos vemos luego- se despidió.

-Nos vemos- respondió ella, volviendo a su libro de bocetos con una sonrisa llena de satisfacción, ya que al parecer a él se le estaba hallanando él camino en el ámbito laboral.

Kyle salió de la casa y caminó unas cuadras hasta el lugar donde James lo esperaba nuevamente en el automóvil. Subió al coche y cerró la puerta con un suspiro.

-¿Qué está pasando, James?- preguntó, notando la preocupación en el rostro de su amigo.

James arrancó el coche y comenzó a conducir hacia la empresa.

-Kyle, hay algunos documentos financieros que necesitan tu firma inmediata. Además, hay rumores de que Rebecca está planeando algo más grande. Necesitamos mantener todo bajo control.

Kyle asintió, sabiendo que no podían permitir que Rebecca interfiriera más en sus planes.

-Está bien, veamos esos documentos y asegurémonos de que todo esté en orden-;replicó él.

Al llegar a la empresa, Kyle fue directamente a la oficina de James, donde una pila de documentos lo esperaba sobre el escritorio. James le pasó un bolígrafo y comenzó a explicarle los detalles de cada documento.

-Estos son los informes financieros del último trimestre. Necesitamos tu firma para aprobar los gastos y el presupuesto del próximo trimestre- dijo James, señalando los lugares donde Kyle debía firmar.

Kyle firmó los documentos, su mente aún estaba pensando en Annia y en cómo mantener su vida separada de los problemas de la empresa.

-¿Y Rebecca? ¿Ha hecho algún movimiento desde nuestra última conversación?- preguntó Kyle, levantando la vista de los papeles.

James negó con la cabeza.

-Hasta ahora, no ha aparecido de nuevo. Pero sus intenciones son claras. Quiere forzarte a tomar una decisión rápidamente.

Kyle apretó los dientes, sintiendo la presión aumentar.

-Necesitamos tiempo. No podemos dejar que ella dicte los términos.

James asintió, su lealtad firme.

-Estoy contigo, amigo. Haremos lo que sea necesario para mantener el control.

Mientras tanto, Annia había llegado al departamento de Cloe. La amiga la recibió con un abrazo y una sonrisa.

-¡Annia! Qué bueno verte. ¿Cómo estás?- preguntó Cloe, llevándola al sofá.

-Estoy bien, Cloe. Sólo necesitaba un poco de tiempo fuera de la casa. Kyle está en una reunión por una campaña publicitaria, así que pensé en visitarte- respondió Annia, sentándose cómodamente.

Cloe la miró con interés.

-¿Y cómo va todo con Kyle? Parece que las cosas están funcionando bien entre ustedes.

Annia sonrió, aunque una sombra de incertidumbre cruzó por su rostro.

-Sí, estamos bien. Kyle es un gran apoyo. Aunque a veces siento que hay algo más que no me está diciendo.

Cloe levantó una ceja, intrigada.

-¿A qué te refieres?

Annia suspiró, jugando con una hebra de su cabello.

-No lo sé. Tal vez son sólo mis inseguridades. Pero a veces parece preocupado por algo, como si llevara una carga que no quiere compartir conmigo.

Cloe le dio una palmada en la mano, su expresión comprensiva.

-Dale tiempo, Annia. Los hombres a veces son complicados en ese sentido. Pero si hay algo que necesitas saber, estoy segura de que te lo dirá cuando esté listo.

Annia asintió, sintiéndose un poco más tranquila.

-Tienes razón, Cloe. Gracias por escucharme.

-Siempre, amiga. Sabes que puedes contar conmigo para lo que sea- dijo Cloe, sonriéndole con calidez- Pero... ¿puedo darte un consejo?

-Dime-;respondió la muchacha intrigada.

-Procura no mezclar lo personal en todo este asunto- le dijo su amiga- Que no se te olvide que esto que hay entre ustedes es solamente como un negocio, un contrato de trabajo.

-¿Por que me dices eso? - preguntó la muchacha- Yo tengo bien claro como es esto- afirmó y no pudo dejar de notar que su amiga hacia una mueca de descontento.

-Lo sé, pero... Mirá, yo conozco a Kyle desde hace tiempo y el no es un hombre de compromisos- le explicó- Tu eres mi mejor amiga, como mi hermana y no quiero que te ilusiones por alguien que no sabrá corresponderte- término diciendo y Annia suspiro con resignación.

Cuando Kyle terminó de firmar los documentos y se dirigió de vuelta a casa, su mente aún se encontraba llena de preocupaciones. Al llegar, encontró a Annia en la sala, terminando otro dibujo en su libro de bocetos.

-¡Hola!- dijo ella, levantando la vista con una sonrisa- ¿Cómo te fue?

Kyle se obligó a sonreír, tratando de mantener la apariencia.

-Fue bien. Todo está en marcha. ¿Y tú? ¿Cómo fue tu reunión con Cloe?-respondió él

Annia cerró su libro y se acercó a él.

-Fue genial. Hablamos de todo un poco. Me hace bien verla- replicó.

Kyle asintió, aliviado de ver que Annia estaba de buen ánimo.

-Me alegra escuchar eso. ¿Vamos a cenar algo? Puedo cocinar esta vez.

Annia sonrió, asintiendo.

-Me encantaría, Kyle. Vamos a disfrutar de una buena cena juntos.

Mientras se dirigían a la cocina para preparar la cena, Kyle no podía evitar sentir la creciente presión de las mentiras que sostenían su vida actual. Sabía que eventualmente tendría que enfrentarse a la verdad, pero por ahora, estaba decidido a mantener las cosas estables y proteger a Annia de cualquier amenaza externa.

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