Quiero Tener Un Hijo

quiero tener un hijo

...relación terminada...

Mi nombre es Gabriela tengo 25 años, graduada de economía y finanza , no es por nada Pero tengo una figura envidiable, cabello crespo que me llega hasta la cintura. Tengo ojos azules y dos amigas, una se llama Estefanía y la otra Laura. Las quiero mucho porque siempre han estado para mí. Desde que éramos niñas hemos sido inseparables. Estoy comprometida con Ian, mi novio, estoy muy enamorada. Ya tenemos fecha de boda y estoy muy feliz. Hoy es el cumpleaños de mi amiga Laura y vamos a asistir todos a una discoteca. Ya es hora de cambiarme, le dije a mi amiga Estefanía, que por cierto está en mi casa para quedarse unos días. Entro al baño para relajarme en la tina, me quedo dormida inconscientemente. Mi amiga me llama para que me apure a salir, que se nos está haciendo tarde. Ya salgo... Voy a mi recámara y miro hacia mi cama, un hermoso y sexy vestido se encuentra conmigo. Sonrío y digo: hoy Ian no podrá separarse de mí ni un segundo. Estamos listas, Ian nos está esperando en su carro deportivo, es un Mazda-MX-5 negro precioso. Nos pita y sale del carro con una sonrisa, qué guapo, le digo, y nuestras miradas se cruzan y me da un guiño. Bueno, apurémonos que nos están esperando. Llegamos y la disco estaba hasta más no poder de gente. Entramos, presentamos la tarjeta VIP y pasamos sin hacer fila. Había buena música, buen ambiente. Divisamos a nuestros amigos y a la cumpleañera. Nos abrazamos las tres y le cantamos feliz cumpleaños a Laura. Ella estaba muy feliz, todo estaba saliendo súper, pero ya estábamos un poco borrachas. Mi prometido salió a bailar con mi amiga Laura y yo estaba hablando con unos conocidos de mi familia. Cuando volví, no estaban. Empecé a preguntar que dónde estaba Ian y Laura,, pero nadie me daba razón. Quise salir a buscarlos y cuál fue mi mayor sorpresa, estaban discutiendo en un callejón, y ella le decía si en serio quería casarse con una mujer tan simple y súperficial como yo, que solo le interesaba lo que le quedaba bien, si las uñas las tenía pintadas, etc. Él le respondió que así se casara, él siempre iba a estar con élla, porque élla sí era una mujer de verdad que se entregaba a él. Yo, como pude, me limpié las lágrimas y los encaré. Les dije que no se preocuparan, que Yo no me iba a interponer en su camino, que siguieran félices sin preocuparse, que esto se terminaba aquí. Él salió corriendo tras de mí con los pantalones a medio poner y me decía que todo era un malentendido, que no me fuera así. Me agarró fuerte del brazo, pero como pude me solté y agarré a Estefanía, nos fuimos corriendo. En el camíno iba hecha un mar de lágrimas, Estefanía no Entendía qué pasaba. Yo, como pude, le conté lo que acababa de ver y de escuchar. Ella se detuvo y quiso volver. Yo la cogí del brazo y le dije que no valía la pena, que si Laura quiso terminar una amistad que teníamos por un hombre, que estaba bien. Yo no quería mostrarle a Estefanía cómo estaba,,, pyro por dentro no podía con todo. Estaba destrozada, sentía morir de dolor por la traición de Laura e Ian. Llegamos a la casa, me encerré en el baño a llorar. No podía creer que esto me estuviera pasando a mí. Pasaron dos horas y salí del baño, y ahí estaba Estefanía esperándome en mi cama. Se me acercó y me tranquilizó. No sé en qué momento me quedé dormida... Me desperté, ya era de mañana, Estefanía me tenía el desayuno preparado, pero no tenía hambre. Me levanté con la idea de que todo fuera un mal sueño, pero no, todo seguía como ayer y me dolía el alma. Mi amiga me dijo que no podía dejarme vencer por esas malas personas, que yo era más fuerte e inteligente que ellos. Nos fuimos a almorzar fuera de casa para poder distraerme.