La noche me pertenece. Desnudo contemplo la soledad de mi habitación. ¿Por qué la luna hace brillar mi alma? Mi sexo está libre y hay restos en mi interior de un hombre que logró ser explosión de placer con mi cuerpo. ¿A qué costo le pedí a la luna que se acostara en mi cama para alumbrar mi desdicha? Mi cuerpo es consciente del tacto que él tiene para conmigo y mi boca gime. ¿Qué tan placentero puede ser el sexo? ¿Qué tan intenso tiene que ser un orgasmo para que un hombre se sienta como un macho? ¡Los placeres también son una utopía!
Sus manos no son tan expertas, pero aun así, finjo estar muy complacido por la forma en que me toca. ¡No hay de otra! La ventaja de esto es que el frasco de Popper se abre y al inhalarlo puedo sentir que soy fuego. ¡Me caliento mucho!
—¡Ahhhgg! ¡Hummm! ¡Hmggg! ¡Qué rico! —Sus palabras me hipnotizan, el deseo se intensifica en todo mi cuerpo—. Todo esto, me gusta.
—¡Eres increíble! —Sus manos me aprietan a su cuerpo.
Explota adentro de mi alma. Siento que me aprieta más fuerte a él, ha tenido un orgasmo y sus manos, han creado un suceso sobrenatural. ¿Cuánto tiempo le tomará salir de mi cuerpo? Tengo abiertas las piernas, su pecho brilla en la oscuridad y me observa con fijeza. ¿Está sonriendo? En su mirada percibo que busca cariño en mí. ¡No puedo darle ese afecto!
—Puedes bañarte si quieres. Hay agua caliente —le hago saber.
Y no quiero estar más con él. ¡No quiero estar más así! Me duele el culo y me alegro mucho de haber terminado. Apago la cámara que use para grabar.
—Bueno, iré a bañarme —dice él. Entonces, sale de mi interior y veo el látex que cubre su miembro. ¡No fue mucha leche!
—Sí. Hay toallas en el último cajón del mueble de baño.
Le tomo veinte minutos ducharse y diez minutos para irse de mi casa. ¡Un alivio al cerrar la puerta!
El aroma de la noche me inunda en oscuridad y creo que está lloviznando afuera. ¿Hasta cuando tendrá que ser mi vida así? ¿Mi alma debe ser tan solitaria como para no disfrutar de la compañía? Suena música por mis auriculares, no tengo sueño y mis pensamientos comienzan a torturarme. ¡Estoy deseando cambiar de alma! Pero a pesar de lo que quiero, mi alma está enfocada en editar el video y una pregunta me invade.
¿Esta será mi última colaboración? ¡No lo sé! ¡Tal vez no! ¿O sí? Pero es inevitable no dejar de hacer esto. Es como un círculo vicioso donde hago las cosas por el puro impulso de saldar una deuda.
—¡Me quiero morir! —Exclamo en mi pensamiento.
¿Y qué debo hacer para lograr cambiar de alma? Una parte de mí está consiente de que no quiero seguir con esto. ¿Cómo puedo cambiar? ¿Qué debo cambiar? ¿Por qué querer cambiar? ¡Todo esto debe terminarse!
En mi mesita de noche hay medicamentos para dormir, dulces de menta, Halls negros, tres frascos de Popper, condones, lubricante y agua para beber. ¡Mis herramientas de trabajo!
Son las once y media de la noche, dentro de mi pensamiento siento que he estado mal, pero a mí actuar le da igual. ¡Me acabo de coger a alguien! ¡Y alguien me acaba de coger a mí! No hace mucho que él estaba en mi cama, adentro de mi espacio personal y tocaba mi interior con mucho placer.
—¡Me encantas! Todo tu cuerpo, de verdad que estás bien rico —recuerdo que dijo.
Sonreí ampliamente. Decidí hacer una colaboración con él porque dijo que estaba supercaliente y además, me ofreció un dinero extra.
—Gracias por haber venido —parecía no darse cuenta de que yo estaba dándole una señal para que ya pudiera marcharse.
—¿Si te gustó? —Se anima a preguntar.
—Sí, estuvo bien —dije.
—¡A mí me encantó! —Seguía desnudo, acababa de salir de la ducha.
—¿No tienes ganas de volver a tu casa? —Fui directo con mis palabras. Ya no quería que estuviera conmigo.
Después de bañarse, se vistió rápidamente, no fui capaz de ayudarle a ponerse la ropa y eso fue irónico. ¿Por qué nos ayudamos a desnudarnos para comernos sin miedo en el sexo y después, cuando todo ha terminado, cada quien debe vestirse sin ayuda de nadie? ¡Cosas patéticas!
¡Esta noche eso fue lo que me sucedió!
Me animé a desbloquear la pantalla de mi celular, no tengo sueño. ¿Cómo podría calmar esta ansiedad de saber que algo no anda bien conmigo? ¡Mi alma se siente como catástrofe! Mi pecho está cubierto con un encaje blanco y mi sexo por igual. ¡Me pidió usar lencería! La lluvia comienza a descender del cielo nocturno, me animo a abrir Twitter y veo que ahora ya se llama X. ¿Por qué le habrán cambiado el nombre?
Era evidente que la sección de noticias se había llenado de porno. En sí, Twitter había sido el lugar más fácil para exhibirse en internet. ¡Muchos creadores de contenido! Y allí estaba yo también. Nunca creí que el tamaño de mi pecho o las curvas de mi culo, fuesen lo suficientemente grandes como para atraer la atención de muchos hombres sedientos de porno. ¡Era obvio que yo también me exhibía sin pena en internet! ¿Y a qué costo? ¿A qué libertad le soltaba mi pudor?
De momento no me sentía feliz. Aunque, el sexo es algo rico y así, después de tenerlo, siempre me quedaba un gran vacío emocional. ¡Solo era sexo! El placer efímero que saciaba el deseo de gente adicta al porno. ¿Por qué esta gente disfrutaba de gastar su dinero en una suscripción de Only Fans? Estar con un hombre diferente en la cama era algo delicioso y en videos yo gemía muy rico, a mis suscriptores les gustaba cuando yo usaba lencería y les encantaba verme ser bien puta. ¿A quién rayos se le ocurrió que era una buena idea vender porno? ¡Por qué se gana bien! ¡Y se pierde también!
Grabarme se había vuelto una costumbre, tenía bien claro que el propósito de prostituirme en internet era para pagar la mentada deuda. ¿Cuánto me faltaba para finiquitar aquello?
Pongo Play al video y allí estoy con él. ¡Teniendo sexo!
...Lloro, por quererte, por amarte, por besarte....
...Lloro, por quererte, por amarte, por besarte....
...¡Ay cariño! ¡Ay mi vida!...
...Nunca, pero nunca, me abandones cariñito....
...Nunca, pero nunca, me abandones cariñito....
La melodía que sonaba en mis oídos provocó un montón de nostalgia. ¡Me dieron ganas de cambiar algo en mí!
—¿Y si mi vida cambiara un poco? Supongo que estoy en la edad perfecta para poder buscar mi felicidad —hablar con mi pensamiento era un hábito lindo al que ya estaba muy acostumbrado.
Sentía que la soledad podía abrazar mejor que mil compañeros. ¡Ya sabes! Un pornstar no puede darse el lujo de estar en una relación exclusiva, aunque muchas veces, me he cuestionado la idea de tener a alguien con quien compartir mi corazón. ¿No poder sentir amor por alguien con quien tienes sexo? ¿Nunca amar? ¿Nunca tener a alguien con quien dejar de sentir ausencia de amor?
Me animo a abrir mi presupuesto de deuda y me sorprendo mucho cuando veo que ya mucho cuando recuerdo y confirmo que este es el último pago para poder terminar con ese embrollo. ¡Qué bueno! El sonido de la trompeta me anima a querer cambiar algo en la forma de llevar mi vida, la canción me gusta. ¡Estaba decidido! Me esforzaría por lograr encontrar mi felicidad.
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