Capítulo 18.- Cambio de planes

Le llame aquí porque debo decirle que su compromiso con mi sobrino, seguirá en pie, le aclaro eso porque aquí mi hija insistía en que debía romper ese acuerdo, me podría explicar porque señorita Hiriako? — dijo el emperador y yo estaba atónita.

No es eso su majestad pero es que su sobrino no me respeta como mujer, siempre me comentan que anda con una chica y luego con otra, me estaba convirtiendo en la burla de la sociedad, ya no es como antes porque me hice ver como mujer, porque hoy en día por las acciones que hago ya se dicen más cosas buenas de mi que siendo la burla de aquí — dije firme sin titubear porque debo mostrarme fuerte.

Comprendo eso señorita Hiriako pero déjeme decirle que no a habido testigos que vean que mi sobrino le sea infiel, el ir y caminar con otra joven no significa que se estén acostado y la sociedad hoy en día solo quiere perjudicar a los de mejor estatus así que a menos que yo lo vea con mis propios ojos no aceptaré que este compromiso se rompa, aparte mi sobrino me comentó algo, es verdad que a estado viendo a otro joven — dijo el viejo y yo no me lo podía creer, es encerio que lo está justificando y a mi me está cuestionando, le aseguro que si tomo control el segundo al que le cortaré la cabeza será a este hombre.

Eso fue hace casi más de un año y medio, era un joven de otro imperio que me ayudó una vez y es conocido de mi padre, aparte usted mismo lo dijo, como con su sobrino, solo estaba con él y ya, pero no significa que le fuera infiel — dije y al final mostré una sonrisa de burla, vi claramente como el emperador me veía con enojo pero no le di importancia.

Bueno señorita siendo así, puede retirarse y no quiero volver a escuchar esos rumores, porque no accederé a romper su compromiso señorita Hiriako con mi sobrino — dijo y este solo me miro con cierta burla, pero ya verá el viejo, se arrepentirá cuando yo tenga una daga en su cuello y esté rogando por seguir viviendo.

—Al salir de hay mi madre se había adelantado porque tenía que calmar a mi padre, él es uno del consejo del emperador solo porque quería ver que no planeara nada contra nuestra familia, pero el mientras estaba con los demás se estaba aguantando las ganas de grítale al emperador así que cuando salí con mi madre él salió furioso entonces mi madre se adelantó con él para llévalo a casa para que se tranquilizara, por suerte yo traía un caballo extra por emergencia, por si surgía algo y como esto sucedió, se tendrán que ir solos mi mamá y papá en el carruaje, desde otro punto de vista me gustaba montar a caballo así que no será problema.

— Al llegar casi a la entrada sentí que me tomaban del hombro, por desgracia para cuando volteé vi a Frederik, supongo que estuvo presente.

Veo que no te resultó el romper el compromiso conmigo cariño, vez tendrás que quedarte conmigo para siempre, es el destino y yo se que esto es un capricho tuyo porque no te hacía caso— dijo el imbecil con su típica sonrisa de idiota, mientras me tomaba con fuerza la cintura.

No cantes victoria que aun falta para que nos casemos así que tal vez algo de una vuelta de 180º, así que suéltame si no quieres que te rompa la cara por tocarme sin permiso — dije molesta casi a punto de golpearlo cuando escuche a alguien.

Suéltala Frederik — dijo el príncipe heredero mientras caminaba hacía nosotros ¿que hacía aquí?

O vamos primo, es mi prometida, tengo derecho de poder tocarla, sin o con su permiso pero esta bien, la dejo — dijo el idiota, juro que lo golpeaba o lo quemaría vivo con mis llamas si me seguía tocando.

Realmente no tienes remedio Frederik, bueno mi padre te está buscando — dijo el príncipe heredero.

A claro, voy y después nos veremos cariño\~ — dijo mientras se alejaba de hay caminando recto por el pasillo asta perderse al dar vuelta por otro, suspire aliviada, realmente me da asco ese hombre, pero no entiendo, el no me quería, él por el contrario se alejaba de mi, pero ash que fastidio.

Al menos un gracias estaría bien señorita Hiriako — dijo el principito y yo solo lo volteé a ver.

A si gracias por eso alteza pero sabe ya debo retirarme — dije indiferente dado ya casi media vuelta para irme porque no se que intenciones tiene este.

O no, espere — dijo este mientras me detenía agarrándole del brazo con su mano, eso me detuvo y tuve que darme vuelta otra vez para verlo, que no puedo llegar a casa a dormir o comer golosinas.

A es solo que quiero ayudarla, mi hermana me comentó que quiere conseguir la aprobación de nuestro padre para cancelar su compromiso con mi primo y yo podría ayúdarla con eso — eso me dejó intrigada, ¿de verdad este hombre es de fiar?, tenia mis dudas

Y según usted ¿como? — dije cruzando mis brazos

Pues no le quiero decir aqui, alguien podría escucharnos, así que iré a su casa mañana por la tarde — dijo y yo dudaba pero al final accedí, no sé si hice bien pero no tenía nada que perder, si su hermana confió en él, yo debía confiar, así que así me despedí del príncipe heredero Henry.

—Al día siguiente por la mañana mi hermano me estaba visitando porque hoy era su dia de entrenarme pero mejor le dije lo que había pasado con el príncipe heredero.

¿Como que el príncipe heredero vendrá aquí? — decía mi hermano exaltado.

Eh si, pero era porque necesito escuchar su plan, la verdad es que si su hermana que es mi amiga más cercana confía en el, yo intentaré hacerlo, por favor quédate conmigo cuando él venga — dije casi en suplica, no entiendo que le pasa a este, él cuánto mencioné que vendría el príncipe heredero se alteró.

Esta bien princesa, aceptaré quedarme pero estaré fuera porque adentro con él me niego, pero fuera de eso será en la tarde así que tenemos tiempo para practicar pero solo la espada porque no nos arriesgamos a que él descubra nuestro don si es que llega antes — dijo y yo solo accedí, la verdad es que ya era bastante buena pero seguro practicando era muy divertido y más con mi hermano.

Nos pasamos un rato practicando, nuestros combates duraban horas, el sonido de las espadas se escuchaban resonando por el partió, mis soldados que estaban también en su entrenamiento se detenían observándonos, mis brazos ya no me dolían como al principio durante el primer año, era difícil pero me acostumbré tanto que mi agilidad me ayudaba mucho al igual que mi cuerpo pequeño, tengo pocos rasguños de los primeros combates, en la sociedad de hoy el tener una cicatriz te hacía ver mal porque era mal visto pero no me importaba, las tenía en mis brazos, piernas y abdomen pero no se notaban del todo, aun así algún otro que comentario se me hacía pero me daba igual.

Ya después de un rato se me informó que el príncipe heredero había llegado, mi hermano solo se fue a cambiar rápido, yo no porque quería seguir entrenando un poco más con mis soldados después, era divertido para mi como para ellos.

Ya al estar presente su alteza mi hermano aun no bajaba pero no le di importancia y solo me fui a mi despacho con el príncipe Henry.

Llega un poco más tarde de lo que esperaba su alteza pero dígame de qué trata lo que me tiene que decir — dije sin más

Pues quería decirle que- — estaba diciendo su alteza asta que se abrió la puerta del despacho y vi entrar a mi hermano, solo me alivie.

Buenas tarde su alteza, lamento la demora princesa, surgió algo pero ya está, sin más te espero afuera — dijo y cerró la puerta, vi al príncipe y estaba con una mirada ¿nostálgica?..

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