Capítulo 20

Con Henry

Me doy cuenta de que Mel está pensativa, acaricio su espalda.

Henry- ¿En qué piensas tanto?

-Ella respira hondo y me mira

Mel- ¿Eres celoso?

-Niego con la cabeza mientras la miro

Henry- Los celos son cosa de niños, Melissa. Soy un hombre de 39 años, ¡no tengo tiempo para eso!

-Hablo y percibo que se pone triste "pero no puedo mentirle, no sería justo" necesito animar a mi pequeña.

Henry- ¿Vamos a bañarnos?

Mel- ¡Sí!

-Me levanto con ella aún en brazos y la llevo al baño, abro el grifo de la bañera, la dejo en el suelo y me quito el preservativo, la tomo en brazos y entro con ella en la bañera que aún se está llenando, ella se acomoda en mí.

Mel- Mañana voy a casa de Rafa y después me voy directo a casa, si no, el señor Otávio puede sospechar.

Henry- ¡Está bien!

Mel- ¿Y tú a dónde vas?

Henry- Me invitaron a una fiesta con un amigo.

- Ella me mira y asiente con la cabeza.

Mel- Si quieres estar con otra, ¡avísame!

Henry- ¿Por qué?

Mel- Mejor ser sincero conmigo, así como yo lo seré contigo. Si mañana quiero estar con otro, te enviaré un mensaje.

-Estoy incrédulo con lo que sale de su boca.

Henry- ¿Quieres estar con otros?

- Ella niega con la cabeza.

Mel- Nadie más lo sabe.

- Sujeto su cuello con fuerza.

Henry- Dudo que eso suceda, ya que estás siendo bien follada.

Mel- ¿Por qué estás tan seguro de eso?

-Ella habla en un hilo de voz.

Henry- ¡Una mujer bien follada no necesita buscar fuera de casa lo que ya tiene! Y tú, Melissa, ya estás bien comida.

Mel- Eres muy confiado.

Henry- Tus ojos en blanco cada vez que te la meto es la confirmación de ello, y cada vez que pides más...

Mel- Idiota.

-Me doy cuenta de que la bañera ya está llena y cierro el grifo, nos quedamos charlando y jugando, y cenamos para luego irnos a dormir después de un sexo duro para que entienda que es mía y que no tendrá espacio en su cabeza para interesarse por otro.

- Después de que Mel sale para la casa de su amiga, termino de arreglarme y llamo a Pedro, y me avisa que ya dejó mi pase libre en el condominio.... Después de 1 hora me estaciono frente a la mansión de la casa de la amiga de Mel y veo a Pedro, voy hacia él.

Herny- ¿Qué tal, cabrón?

Pedro- ¿Qué tal, bandido?

Henry- ¿Qué tenemos?

Pedro- Aquí vamos a tener a las mejores, amigo mío, todas nuevas y locas por darla.

- Dice riendo y abro una sonrisa, pero por dentro estoy lleno de odio, entramos en la mansión que ya estaba abierta y nos dirigimos al área de la piscina, en cuanto pongo mis pies en la zona gourmet la veo con ese puto mini bikini, mi sangre hierve al verla sonreírle a ese hijo de puta, él mira el cuerpo de mi mujer y sonríe con malicia, tomo el vaso de whisky de la mano de Pedro y me lo tomo de un trago "contrólate, joder, contrólate", cuando sus sucias manos se posan en su cintura, pierdo todo el control y con paso firme me acerco a ellos, la agarro del brazo y la arrastro hasta el baño más cercano que encuentro dentro de la mansión, la empujo contra la pared y la sujeto por la cara obligando a esa desgraciada a mirarme a la fuerza.

Henry- Hija de puta, mírame, si otro hombre te toca le arranco las manos y te follo con tanta raiva que te dejo la concha en carne viva.

-La desgraciada se ríe y la agarro por el cuello.

Henry- ¡ERES MÍA!

-Junto nuestras bocas en un beso duro.

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