Lejos de casa

Habían pasado dos días de la partida de su prometido  hacia Sussex y Angelique podía respirar por primera vez en años. Inmediatamente  después de la muerte de sus padres,sus tíos habían insistido en que viviera con ellos  para “ cuidarla y mantenerla a salvo ”,idea que se encontraba muy alejada de la realidad, ahora lo sabía bien,puesto que en éste corto tiempo  en que había vivido en la casa del duque ,rodeada por los escasos sirvientes  (eran cinco ,contando a las cocineras) había descubierto el verdadero significado de la amabilidad y el respeto

-Señorita Lyon,espero que el desayuno sea de su agrado- dijo Aurelio, haciéndose presente en el enorme salón ,para depositar delante de ella distintos tipos de frutas y chocolate caliente.  

- Gracias- Angelique se sentía muy nerviosa ante la atenta mirada de aquel hombre moreno y robusto. Al principio cuando Frederick le había dicho que era el mayordomo dudó en creerle ,no porque pensara que el duque fuese un mentiroso,sino porque la apostura de aquel hombre no concordaba con la  imagen del típico mayordomo , más bien, su complexión se acercaba más a la de un mercenario . 

- Si me permite darle un consejo Señorita, le sugeriría  empezar con las fresas,ya que están a punto para comer – 

-Errrrr…tiene razón ….mmmm….gra-  en cuanto la futura duquesa levantó la mirada del plato para agradecer la sugerencia hecha , se sorprendió al darse cuenta que no había nadie en el gran salón y tuvo que admitir que Aurelio era increíblemente sigiloso para moverse y también que poseía una cualidad muy cotizada por la aristocracia y ésta era la de “leer a la perfección a las personas” ya que se había percatado de la incomodidad de ella y optó por dejarla sola para que pudiera así disfrutar del exquisito desayuno que se exponía hoy ante sus ojos

SUSSEX

-Jamás pensé que  volvería a verte  y mucho menos que el motivo de tu visita fuera para pedirme una licencia especial  para casarte ,jajajajaja. La verdad es que la vida nunca deja de sorprenderme- Jaime conocía al duque desde hacía cinco años, su amistad se había forjado en el fuego del combate y cómo tal se había mantenido fuerte e inalterable durante todo ése tiempo- ¿Entonces, por qué te quieres casar?

- Dudo mucho que haya algo que llegue a impresionarte y más teniendo en cuenta tu profesión , jajajaja. Ya que ,mi estimado amigo, sabes mejor que yo que en el confesionario es en donde verdaderamente  se esconde la miseria humana , y créeme que con sólo haber pasado unos pocos meses en Londres ,pude ver mucho de la basura de la aristocracia-  

-Sin duda alguna  Frederick,pero no soy quien para juzgar a mis feligreses, éso se lo dejo a Dios-

- ¿Quién mejor para juzgar a los simples mortales que aquellos quienes son considerados  la representación de Dios en la tierra?- 

- No me harás pisar el anzuelo ésta vez , quizás si yo no te conociera como lo hago caería en tus maniobras distractoras,pero para vergüenza tuya y dicha mía tengo plena conciencia de tu lengua de plata , jajaja-

-Me ofendes en demasía tu comentario estimado amigo. Yo que me tenía como un hombre de “lengua dorada”,pero veo con tristeza que he caído al simple adjetivo de “lengua de plata” ,jajajajaja,sin duda alguna sabes donde golpear-

-Conoces  tan bien como yo que tu ego es  tan extenso como el Imperio Romano y que ningún insulto por más elaborado que éste sea podría hacer mella en él. Jajajajajaj. Ahora,responde mi pregunta-

El duque seguía asombrándose de la perspicacia de su amigo,sabía muy bien que si no respondía a su pregunta Jaime iría en persona a su casa a conocer a su futura esposa

–Creo que es hora de sentar cabeza, ya sabes…mmmmm….un hombre de veintiocho años necesita dejar descendencia y más los aristócratas- 

-Pensé que odiabas la idea de pertenecer a “esa clase opresora”,pero veo que vivía en un engaño - Jaime le sonreía a su amigo,mientras le decía esto

- Digamos que la sociedad londinense a calado tan profundo en mi corazón que ha cambiado por completo la mentalidad que tenía – 

- Si quieres continuar con el engaño ¿ quién soy yo para atreverme a contradecirte?. Cómo bien lo aclare apenas entraste por ésta puerta, es obligación de un clérigo el bridar empatía y absolución a cada uno de mis feligreses - sonriendo maliciosamente añadió - Pero que quede claro Frederick ,tarde o temprano sabré la razón que se esconde detrás de tu boda-

-Jajajajajajajajajajjaja- el duque sabía que su amigo lo descubriría ,pero por el momento gozaba de la incertidumbre y malestar que aquel enigma le provocaba a Jaime. Quizás era cierto lo que decían de él y era el diablo reencarnado ya que ningún mortal encontraría tanto placer en el sufrimiento ajeno- Me duele ver que en los  tiempos que corren hoy en día ,existan todavía sacerdotes que duden del amor puro y real de dos jóvenes amantes-

- JAJAJAJAJA, eres incorregible Frederick..jajajaja. Ten – y le extendió los papeles que necesitaba - Creeme que pronto iré a conocer a la flamante Duquesa Barrow, muero por ver a la mujer que finalmente consiguió domar a la bestia-.

Y sin decir nada más Frederick salió de la rectoría pensando “ nadie puede domar a un hombre que ha vendido su alma a la muerte misma”...

CASA DEL DUQUE

Angelique estaba muy angustiada,tenía miedo de no poder reparar la enorme mansión señorial ,era notorio que la casa llevaba años descuidada con paredes completamente roídas por el moho , los suelos de madera se encontraban completamente edematizados y desgastados y ni hablar de las ventanas ¡ Santo Cielo!. La futura duquesa agarraba su  pequeña cabeza cobriza con ambas manos mientras se decía a sí misma ¡ Puedo hacerlo! 

-Señorita,han llegado las cortinas que ha elegido hoy en la tienda- una presurosa Amelia corría  al encuentro de su señora  para entregarle el pedido.

- Gracias Amelia, ¿crees que al duque  le gustará este color?- apenas hubo acabado de formular la pregunta ,sintió sus mejillas arder de vergüenza.

- Es de un hermoso azul marino señorita, creo que al señor le encantará ya que combina con sus ojos-

- Creo más bien que el color de sus ojos es más de un tono  azul grisáceo- 

-hooo!!!- Amelia se llevó una mano a sus labios – Es cierto señorita , no me había dado cuenta hasta que lo dijo -

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