Cap. 5

Al llegar al pueblo me dirijo a la plaza y me siento un rato el lugar es muy bonito después de descansar un rato voy a un lugar en donde venden tanto ropa de mujer como de hombre

Aziel: muy buenos días estoy buscando llenar mi armario me puede mostrar sus últimos diseños - la chica asiente y me lleva a verlos además de escoger varios trajes para mi elijo otros para el Emperador

chica: es mucho si quiere nos da la dirección y se lo llevamos - oh eso me gusta

Aziel: ah eso sería increíble sabe dónde queda el castillo del emperador - ella asiente

chica : es cerca del castillo de Emperador

Aziel: no es en el castillo del emperador lleve todo allí - digo y veo el traje que escogí para el - este es un regalo para el crer que le guste - digo pero no recibo respuesta la volteo a ver y ella está pálida - ey Nina estás bien - digo ayudándola a sentarse

chica: usted vive en ese castillo? - yo asiento - y no le da miedo el emperador y su maldición?

Aziel: no lo sabes? - una de las cosas que se de estos mundos de épocas que al no ver ni televisión, ni internet, ni teléfonos los chismes vuelan rápido así que le daré una ayudadita al que ahora es mi pareja - la maldición se rompió - digo tranquilo - más bien estoy comprando ropa por qué tengo que contratar gente que trabaje allí ya que pronto las puertas del castillo se abrirán a todo público en una gran fiesta cuando celebración para celebrar la boda del emperador conmigo - digo con una sonrisa

chica: eres la pareja del emperador? - yo asiento

Aziel: si yo logré romper la maldición por eso estoy aquí comprando algunas cosas para los dos - digo con una sonrisa resplandeciente - así que ya sabes si conoces a alguien que quiera trabajar en el castillo envíalo yo lo recibiré - ella asiente con una mirada de emoción por la historia tan ridícula que invente ( oh no se por que no me dedique a actor soy todo un dios en esto )

Y así estuve todo el día en cada tienda que entraba contaba la misma historia además de decir que buscábamos personal para trabajar allí, al caer la tarde decido que es hora de regresar pero veo mucho alboroto además de mucho guardias así que me acerco a uno de ellos

Aziel: ey está todo bien que es lo que pasa? - el me ve y abre los ojos grandemente

Guardia: alteza - se arrodilla - el Emperador está muy preocupado por qué no ha regresado al castillo ( esto no puede estar mejor ahora todo el mundo va a ver como este tonto mando guardias por mi y mi historia será más creíble)

Aziel: ah es así entonces volvamos no quiero preocupar más a Roland - digo para acompañar al guardia

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POV. Roland

cuando el general me dice que Aziel no está en ninguna parte del castillo además de haber pedido un caballo prestado para ir al pueblo mi corazón se sintió oprimido ya que me mintió para irse a mis espaldas tenía poca esperanza pero al llegar en dónde tengo todo el dinero me doy cuenta que se fue, primero quería creer que iba a volver pero al llegar la tarde y no volvía mandé a l.todos los guardias a qué lo buscaran hasta debajo de las piedras pero lo que lo trajeran y ahora lo iba encerrar así sea en la torre más alta de este castillo para que no se vuelva a ir de mis manos

Estaba desesperado pero en eso llega un guardia diciendo que traen al Aziel un grupo de guardias lo encontró y el vino sin resistirse

Roland: en dónde diablos estabas? - pregunto cuando llega a mi lado pero este ni se inmuta y me enseña unos bocadillos que trajo con él

Aziel: mira lo que compre además de que compre ropa para mí y zapatos jajaja y? - levanta el dedo tocando mi nariz - conseguí trabajadores para que el castillo vuelva a su antigua gloria - me agarra de la mano y me lleva al cuarto pero ante de detiene y le da las gracias a los guardias por acompañarlo - ah lo siento por preocuparte me distraje tanto que no me di cuenta lo tarde que era

Roland: entonces no huías de mi? - el niega con la cabeza

Aziel: quien dijo esa mentira solo fue a comprar ropa y buscar gente que trabaje aquí para que esté castillo no se vea así de descuidado

Roland: ya te dije nadie va avenir por el miedo a la maldición - el no le da importancia y sacude su mano

Aziel: eso también lo solucione - me toma de la mano y me lleva al comedor - ahora ven y come que compre unas cosas deliciosas - yo le toma la mano

Roland: no te vuelvas a ir sin decir nada pensabas que te habías ido y me habías dejado - yo veo como el aleja su mano y aparta la comida que puso al frente de mi para luego se tarde en la mesa y tomar mi rostro en sus manos

Aziel: ayer te dije claramente que no te iba a dejar así que no pienses en esas cosas ahora - dice para dejar un beso en mi frente pero yo no solo quiero eso, así que lo tomo de la cintura para sentarlo a horcajadas encima de mi para poder apretarlo contra mi y darle un beso que ansiaba darle desde hace mucho tiempo

Santos: ujumm - carraspea - señor el concejo está reunido esperando por usted - Aziel al ver el General se separa rápidamente y me deja los bocadillos para irse apresuradamente yo solo me quedé viendo su espalda para luego girar la cabeza a él general que este solo desvía su mirada - no sabía que estaban ocupados - dice avergonzado

Roland: algunas veces olvidó lo molesto que eres - este ríe

Santos: pero igual me quiere y no me puede dejar - dice el muy orgulloso ese

Yo solo continuo mi camino ya que es muy raro que esos del concejo vengan al castillo siempre mandan a alguien a decir sus quejas y este lacayo habla solo con él general que es el que me dice todo así que saber que están aquí es una gran sorpresa

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