capitulo 18:

Alondra también trago en seco ante esa mirada seductora y suplicante de esos ojos verdes turquesa, sin poder evitar estremecerse por sus palabras.

"no es justo Darío... si me miras así, como si me necesitaras para oder seguir viviendo... haciendo que mi corazon se estremesca cada vez que hablas de esta manera... tu mirada me suplica que sea tuya... como he de negarme a ellos cuando haces que mi corazon se acelere de tal manera?..."

sin poder evitarlo, Alondra se inclina uniendo sus labios a los del pelinegro en un tierno beso cargado de delicadeza que solo dura unos instantes.

Alondra se separa y al ver la expresión de Darío su cuerpo se estremece por completo, el estaba allí inmóvil mirándola a los ojos como si físicamente necesitara mas de ella.

_si me sigues miando así voy a enloquecer..._ dice ella antes de unir sus labios una vez mas en otro beso pero esta vez mas desesperado y cargado de pasión y deseo que hace que la necesidad de respirar se sienta innecesaria en ese momento.

al separarse Alondra no puede evitar sonreir sintiendo un inmenso deseo lujurioso de hacer un desastre de ese hombre frente a ella, al cual la desea lo suficiente para quedar perdido con el placer de un beso.

Alondra acaricia su mejilla e introduce su dedo en la boca abierta de Darío que mostraba unos filosos y atractivos colmillos sobresaliendo en su blanca y perfecta dentadura, para acariciarlos.

_vamos Darío... no te contengas y tómala..._ Alondra pasa su dedo por uno de los colmillos enterrandolo en él haciendo que la sangre comience a brotar e inundar la boca Darío _demuestrame que realmente no podrás vivir sin mí si te sacias con mi sangre, si realmente es así yo lo aceptare gustosa...

sintiendo ese elixir exquisito deslizarse en su boca nuevamente, Darío se estremeció entiendo ese éxtasis aterrador que lo llevo a tener la necesidad de mas y tomando la mano de Alondra, enterró sus colmillos en ella sin dudarlo y comenzó a succionar se sangre desesperadamente como si su vida dependiera de ello.

Alondra sonrie y lo lleva contra su cuerpo mientras él se aferra a su mano, sintiendo como su cuerpo se estremecía a cada instante estando completamente perdido en el placer.

una sonrisa desquiciada se forma en el rostro de Alondra siendo dominada por su lado más egoísta _eso... saciate hasta que que no puedas vivir sin mi, hasta que el solo pensamiento de vivir sin mí sea lo suficientemente aterrador para no dejarte dormir... hasta que seas solo mío y ser tocado por otra sea motivo de asco... saciate hasta que yo me convierta en lo único que necesites en este mundo para vivir Darío.

"se solo mio... completamente mio..."

Alondra tambien estaba completamente sumergida en el éxtasis que le provocaba la sensación de que Darío necesitara de ella con tanta desesperación y que así él el seria completamente suyo, por lo que no era consciente de las consecuencias que le traería en un futuro estas acciones.

ella no tenia idea de lo que estaba provocando dentro de Darío en ese momento y la tormenta que se desataría si algún día le llegara a faltar; ahora ella estaba completamente en sus garras y no había forma de escapar aunque lo quisiera en un futuro...

media hora pasó hasta que Darío no resistió mas el éxtasis y se separo de Alondra con su respiración agitada pero sintiendose completamente renovado e incluso con mas energía de lo normal.

Alondra lo miró con una sonrisa ladina y él la miró a los ojos seriamente acercandose y parándose frente a ella.

_espero que no te arrepientas de lo que acabas de hacer..._ dice uniendo sus labios a los de Alondra en un apasionado beso _ahora no creo poder vivir sin tí, soy completamente tuyo asi que tu también serás completamente mía.

Alondra simplemente asiente perdida en la mirada dominante del pelinegro y él la vuelve a besar en un fogoso beso que es interrumpido cuendo tocan la puerta.

alondra de inmediato se separa de Darío y da el permiso.

se trataba de una sombra _mi señor, ya han llegado los carruajes_ informa.

_bien, preparen todo para partir de inmediato.

la sombra asiente y sale de la habitación dejándolos solos nuevamente pero ahora que la calentura había bajado, era un poco incomodo.

_llevame con los chicos, voy a sanarlos_ dice Alondra para romper el silencio y Darío asiente al instante.

_gracias por eso, los chicos estan en la habitación de al lado, ven_ dice Darío caminando hacia la salida y Alondra simplemente lo sigue.

ambos llegan a la habitación de al lado donde estan los chicos y las dos sombras inconscientes sobre pequeños catres mientras varias sombras los estaban cuidando, a simple vista se podía ver que realmente estaban graves, además de que las vendas que cubrían sus heridas estaban ensangrentadas, sudaban frio y la fiebre en sus cuerpos quemaba con solo un toque.

Alondra de inmediato se acerca a ellos preocupada y no puede evitar mirar a Darío enojada.

_ellos podrían morir en cualquier momento y aun asi te negaste a que los tratara? acaso no te importan sus vidas?._ dice ella enojada.

Darío frunce el ceño _claro que me importan sus vidas, son mis amigos, deseaba que los trataras pero estuviste dormida por dos días y medio y acababas de despertar, crees que iba a pensar que estabas en estado de usar tu poder de inmediato?, ya los carruajes venian en camino asi que la mejor opción era esperar y llevarlos a imperio para ser tratados, ellos son fuertes, no van a morir por esto.

Alondra no dice nada y procede a poner su atención en los chicos _por favor ponganlos juntos, voy a tratar todos al tiempo_ pide Alondra a las sombras quienes miran a Darío este asiente por lo que de inmediato proceden a obedecer.

una vez los chicos estaban alineados uno al lado del otro, Alondra extendió sus manos sobre ellos y comenzó a usar su poder para sanarlos.

Alondra rápidamente se sintió fatigada pero su orgullo le impedía netenerse y darle la razón a Darío, asi que continuo y pronto se vio como las expresiones de los chicos se suevizaron, la fiebre bajó y sus heridas comenzaron a desaparecer sin dejar rastro alguno.

ahora solo estaban dormidos ya que la fatiga mental no era curada por el poder divino y debian descansar adecuadamente.

Darío corrió y sujeto a Alondra antes de que esta cayera al suelo exhausta.

_te dije que no estabas en condiciones de usar tu poder..._ reprocha él pero Alondra solo ignora satisfecha por su trabajo.

_quiero descansar..._ dice ella y Darío solo suelta un suspiro levantandola en sus brazos al estilo princesa y ella solo cierra sus ojos recargando la cabeza sonre el hombro del pelinegro.

_llevenlos a los carruajes, partimos a casa en este momento_ ordena Darío a las sombras para luego salir de la habitación y dirigirse a la salida con Alondra entre sus brazos...

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