¿Qué hiciste?

Samael al volver al cielo sentía una impotencia horrible.

Azrael lo intenta agarrar del brazo y este lo empuja.

Samael — NO ME TOQUES.

Azrael — ¿Qué te pasa ahora?

Samael — NADA AZRAEL NADA QUE TE LLEGUE A IMPORTAR.

Azrael — Que puta actitud la que te cargas.

Samael — DI LO QUE QUIERAS.

Samael caminaba frustrado por la ciudad del cielo. En eso se tropezó con Leonardo.

Leonardo — Oye ten más cuidad-...Oh eres tú.

Samael — ¿Qué carajo?, Fíjate por donde vas imbécil. — se levanta y sigue su camino —

Leonardo — ¿A quién le vienes a hablar de esa manera? — Este lo agarró fuertemente de la muñeca —

Samael quedó cara a cara mirándolo de manera amenazante.

Leonardo — ¿Quién te crees tú para venir a hablarle así al qué se te tope en frente eh?

Samael — Me estás lastimando...

Leonardo le apretó más fuerte la muñeca y el demonio se quejó.

Leo — Discúlpate.

Samael — SUÉLTAME LA PUTA MANO.

Azrael llegó e hizo que su hermano lo soltara.

Azrael — ¿Qué haces?

Leo — Este que le habla a cualquiera como quiere.

Azrael — ¿Y?, él puede hacer lo que quiera.

Samael — Azrael ya, déjalo.

Leo — No te metas.

Samael — Claro que me meto.

Leonardo molesto estaba apunto de agarrar a Azrael de una forma poco violenta pero Samael sacó fuerza de algún lado y le detuvo la mano.

Azrael se sorprendió y se sonrojó por la acción del demonio.

Leonardo — Oh...así que...¿Lo vas a defender?

Samael — Claro, el único que puede meterse con él soy yo.

Azrael — Samael...

Leonardo — Te crees mucho mocosito.

Samael — No me creo, soy.

Azrael — Ya, Leo tú y yo arreglamos esto después, y tú ven acá.

Azrael tomó la mano de Samael y se lo llevó arrastrando ya que él quería seguir peleando con su hermano.

Samael — Gracias Samael.

Azrael — Es increíble que no puedas pasar un día sin meterte en problemas.

Samael — De nada Azrael cuando quieras.

Azrael — Samael, es mi hermano.

— Le suelta la mano y este se levanta —

Samael — ¡No debería de tratarte así!

Azrael — Así nos llevamos.

Samael — ¡Pues yo no quiero que te trate así!

Hubo un silencio incómodo y ambos se sonrojaron.

Samael — Digo...o sea no me interesa lo que...hagan..

Azrael tenía un impulso por tomar su rostro y besarlo pero, se contuvo.

Samael — E-eh...¿No tenías una reunión?

Azrael — A-am..cierto...

Charlie corrió hacia estos.

Charlie — Samael Morningstar.

Samael — ¿Eh?

Azrael la mira con fastidio y solo piensa (Ush).

Azrael — ¿Estarás con él?

Charlie — Así es.

Azrael — Te veo en casa Samael.

Samael — Claro...

Azrael se fue y Charlie le agarró fuertemente la muñeca como nunca en su vida.

Samael — ¿¡Qué mierda Charlie!?, ¿¡Por qué todos hoy tienen la fan de hacerme mierda la muñeca!?

Charlie — En la casa vamos a hablar, vamos.

Samael — Dios ayúdame.

En la reunión de los arcángeles.

Leroy — ¿Cómo se sienten?

Gabriel — De lo mejor, ya necesitaba un descanso

Joel — Yo también

Galim — En realidad todos

Michael — Azrael, ¿Puedo hablar contigo?

Azrael — Claro, ¿Qué ocurre?

Michael — ¿Anoche qué hiciste con Samael? — Le susurra mientras los demás hablan —

Azrael — ¿Qué?, nada...

Michael — ¿Seguro?, Samael estaba muy...

Azrael — ¿Muy?

Michael — Provocativo, por lo que alcancé a ver.

Azrael — ¿Alguien más nos vió?

Michael — No, solo yo.

Azrael — Michael no digas nada, por favor.

Michael — Solo dime que no hiciste nada indebido con él

Azrael — ¡E-es un niño todavía Michael!, ¿Qué piensas?

Todos voltearon a ver a Azrael.

Gabriel — ¿Eh?

Azrael — Jaja...nada nada.

— Se acerca más a Michael para susurrarle — Obvio no.

Michael — Es un adolescente y en esa edad son muy...

Azrael — Más hormonales de lo que se puede llegar a pensar ya sé.

Michael — Y mucho más si es un demonio.

Azrael — Ya sé.

Michael — Sé que no serías capaz de abusar de él, pero aún así ten cuidado, los demonios adolescentes son bien lujuriosos cuando quieren algo.

Azrael — Sí, ya me di cuenta...

Michael — ¿Qué?

Azrael — Nada...

En casa Charlie estaba tan molesta que le dió una cachetada.

Charlie — ¿¡QUÉ LE DIJISTE A NUESTROS PADRES SAMAEL MORNINGSTAR!?

Samael — ¿¡ACASO NO TE CONTARON!?

Charlie — QUIERO QUE ME CUENTES TÚ.

Samael — PUES PAPÁ LE VENDIÓ SU ALMA A TU MADRE PARA QUE YO VINIERA AL CIELO.

Charlie — ¿Recién te enteras?

Samael — ¿Qué...?

Samael sintió un vacío ya que su hermana también lo sabía.

Charlie — ¿No lo sabías?

Samael — ¿Tú lo sabías...?

Charlie — Sí...papá también le venderá su alma a mamá para que venga al cielo.

Samael — ...

Charlie — Pero Sam, esa no es razón para gritarles todo eso que les dijiste, ellos quieren nuestro bien

Samael — Pero yo...yo no quiero estar en el cielo...

Charlie — ¿Vas a dejar qué papá haya vendido su alma en vano?

Samael — Charlie...yo no le pedí que la vendiera...

Charlie — Ninguno lo hizo, pero ellos tomaron esa decisión por nosotros.

Samael — Pero eso está en contra de mi voluntad

Charlie — Sam...piénsalo, ¿Eres feliz en el infierno?, tantas aberraciones diarias, destrucción por todos lados, prostíbulos, drogas, moteles, asesinatos, homicidios, suicidio, peleas, violencia, violaciones...

Samael — Es que...

Charlie— ¿Ves?, no tienes como defender tu posición esta vez Samael.

Samael estaba apunto de llorar y Charlie lo abrazó.

Charlie — Podemos ser felices aquí...

Samael — Charlie...hay algo que tú no sabes...

Charlie — ¿Qué pasa?

Samael — Es que Lilith-

Justo Lilith y Adán entraron.

Lilith — ¿Decían algo sobre mí?

Charlie — ¡Mamá! — Corre a abrazarla —

Samael ve a su hermana tan contenta y piensa (No quisiera arruinarle esa felicidad a mi hermana por más que odie a Lilith.)

Charlie — ¿Quieres seguir platicando Sam?

Samael — No...yo...eh me iré a dormir..

Charlie se acercó y le susurró al oído "Mañana iremos a que le pidas perdón a nuestros papás."

Samael — Pero Char...

Charlie — Sam

Samael — Está bien...

Charlie — Descansa, buenas noches

— Le dió un besito en su frente y lo abrazó —

Samael también la abrazó y se fue al cuarto de Azrael.

Samael — Me siento tan...solo y...traicionado?, Charlie...¿Por qué no me comentaste algo tan importante cómo eso?...

El demonio soltó varias lágrimas y abrazó la almohada.

Samael — Azrael...no..espera ¿Qué?, ¿Azrael qué?

Hizo una mueca de asco y tiró la almohada lejos por no aceptar que extraña al arcángel.

Samael — No voy a olvidar jamás que mi venganza contra ti sigue en pie, hasta que la cumpla.

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