Atentado

Hoy desperté con Alexander a mi lado, había sido de esta forma la última semana, venía hablábamos un rato, luego empezaba a jugar con el pequeño bulto en mi vientre y allí me quedaba dormida y al despertar estaba a mi lado, no les negare me sentía bien despertar envuelta en sus brazos y sentir su calor, tenía emociones encontradas, seguía confundida, algo dentro de mi me decía que debía estar alerta.

Pensaba en todo eso mientras tomaba el desayuno en la cocina  acompañada de Mirna, ella me transmitía mucha paz y confianza, a falta de mi madre que se supone debería estar apoyándome en esta etapa.

Seguía sin hablarme, ni siquiera una llamada, estaba molesta con ella, pero vamos, soy su hija y estoy embarazada y ahora solo contaba con Mirna y Alexander, que irónico, contar con el hombre que me había puesto en esta situación.

Deseche aquello de mi mente no quería deprimirme, con cosas que no podría solucionar.

Hoy Alexander dijo tener un asunto importante que tratar, por eso preferí venir aquí, lo que menos  quería era encontrarme con Sally, las cosas en esta casas se volvieron pesadas después de  su llegada, ya habíamos tenido un par de discusiones, la cuales Mirna tuvo que intervenir, para no llegar a mayores.

-Mirna, podría preguntarte algo- la mujer dejó lo que hacía, y me miró de forma complicada- Dijiste conocer a Alex desde niño, que tal era su carácter.

-Siempre fue noble, cariñoso, bastante responsable, preocupado por todos a su alrededor, cuando su madre murió y tuvo que hacerse cargo de todo cambió un poco, pero era necesario, tenía 18 años y hubo muchos que quisieron aprovecharse de eso para sacar ventaja.

Pero solo era así de duro, y frío con el resto, aquí en casa seguía siendo el mismo, hasta que pasó- silencio sus palabras, sabía la razón-.

-Eso lo marcó mucho verdad- me sentí triste, por él, por todo lo que había pasado-.

-Demasiado Kristy, al morir su madre todo lo que le quedó fue Laura, ella se convirtió en su todo, su razón para luchar, para no rendirse, y cuando eso pasó y él quedó solo pues…. Laura se llevó parte de él desde ese entonces no se había vuelto a comportar así con nadie- tomó asiento, mientras apretaba mi mano con dulzura- ahora te cuida, te procura, está volviendo hacer el de antes, ya no hay solo odio en su mirada, lo estás cambiando Kristy.

-Tu crees eso Mirna, estoy tan confundida, ya no se si este hombre de los últimos días es el real o si está fingiendo otra vez, me cuesta tanto confiar otra vez en él.

-Este es el verdadero Alexander, aunque todavía te falta mucho por conocer, es un excelente hombre, entiendo tu temor es muy válido después de lo que pasó, solo dale un oportunidad de demostrar lo que de verdad hay bajo esa fachada de frialdad.

En medio de nuestra plática, no alertamos al ver a Will, correr de un lado a otro, mientras daba la orden de estar atento a la entrada, mientras su radio no dejaba de emitir múltiples voces todas en alerta.

-Will qué sucede- lo abordó Mirna, mientras  se ponía de pie y se acercaba a él de forma rápida-.

-Es el señor, sufrió un ataque- al escuchar aquello, me puse de  pie y camine hasta ellos-

-¿Cómo?¿qué pasó?- interrogue, mientras sentía como mi corazón empezaba a bombear de forma rápida, y mi respiración se agitaba-.

-Parece que se dirigía a la empresa y dos autos lo emboscaron, chocando hasta hacerlo perder el control y estrellarse contra un muro de concreto.

-Esta bien,Will responde- Mirna le preguntaba algo alterada, mientras yo sentía como mi garganta se secaba, y me costaba el paso de aire, sentí como todo se empezó a poner negro, y como unos brazos me sostuvieron-.

-Will ¿cómo está?- Pregunté luego de volver a respirar de forma correcta-.

-No lo sabemos señora, Jackson solo nos informó que estuviéramos atentos y que el señor estaba siendo traslado al hospital- Jackson era el encargado de la seguridad-.

-Estoy segura que tú maldito padre tiene que ver con todo ésto- empezó a gritar Sally al entrar a la cocina- si muere te haré pagar Kristy, lo juro.

-Callate Sally, no estoy para escucharte ahora…. Will llévame al hospital-le dije sin pensar, sentí la necesidad de ir a verlo, de corroborar por mí misma que está bien-.

-No puedo señora, Jackson dió la orden de que nadie puede salir y mucho  menos entrar.

Quise replicar a eso, pero fue silenciada por lo sollozos de Mirna, agache la cabeza, suprimiendo las ganas que me entraron de llorar también, Alexander era mucho más importante para mí de lo que pensaba, eso lo sabía bien, pero no quería quebrarme ahora, Mirna necesitaba apoyo.

De pronto fuera de la casa se escuchó otro escándalo, llamando la atención de nosotros dentro de la cocina, entre tantas voces pude diferenciar la voz de mi madre y sin pensarlo me encamine hasta allá seguido por Will.

-¿Qué sucede? Madre ¿qué haces aquí?- dije sorprendida, la última vez dijo que no volvería a verla.

Trató de acercarse pero fue detenida por los hombres de  Alexander causando que ella volviera a protestar-.

-Dejenla pasar- pedí aquellos hombres, pero Will ordenó no hacerlo-.

-Señora nadie puede entrar, además recuerde las órdenes del señor- me miró serio, mientras acomodaba su radio.

-Will solo hasta este punto, y puedes quedarte, necesito saber a qué vino- le pedí de forma suplicante, él debía seguir las órdenes lo entendía, pero quería preguntar si lo que dijo Sally era cierto-.

Luego de unos segundo Will accedió, mi madre se acercó y tomó mi mano jalandome hacía la salida, siendo detenida por Will.

-La señora no puede irse- le dijo en voz firme, mientras detenía su andar-.

-Tu no eres nadie para decirme que hacer- le soltó mi madre con odió- ese hombre no está y yo me llevaré a mi hija.

-Madre tengo que preguntar algo- le dije soltandome de su agarre, mientras ella se giraba a verme- papá tuvo que ver con el accidente de Alexander- hice aquella pregunta con la esperanza de que ella lo negará, de que dijera que no tenían que ver con eso, pero si respuesta me dejó en Shock-.

-Sí, y espero que se muera como la golfa de su hermana- dijo tan normal, como si eso no fuera malo- ella se busco su muerte al meterse con un hombre casado y él por atreverse a meterse contigo, ahora camina, todavía podemos interrumpir ese embarazó.

-Como fueron capaz de hacer eso, no te entiendo mamá, cómo puedes aplaudir aquellas barbaridades- me aleje mucho más de ella, quedando  detrás de Will- no vas tocar a mi bebé, ahora vete de aquí y por favor no vuelvas- le dije firme y decidida-.

La escuché protestar y sin más remedio tuvo que irse, mientras yo en mi interior sentía tanta vergüenza y rabia por los que mis propios padres eran capaz de hacer, y encima celebrar aquello.

Al voltear todos me miraba de forma que no me gustó, era enojó mezclado con frustración.

-Sabía que era obra de él- sentenció Sally, luego de soltar una bofetada en mi mejilla, a lo que yo solo agache la cabeza, me sentía culpable y responsable de esto, no era mi culpa pero no pude evitar sentirme así-.

-Lo siento mucho Mirna de verdad la siento- dije con la voz ronca tratando de controlar el llanto, Mirna solo me observó con los ojos rojos, y su miraba de preocupación- yo lo lamento.

Dije aquello y corrí a mi habitación, necesitaba sacar todo, me sentía decepcionada, triste y sobre todo preocupada, esperaba que estuviera bien, pero no tenía la cara para verlo, no a él ni a nadie aquí, las cosas no tenían que ser así.

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