LLAMADA

 En ese momento Yoimar sintió un miedo terrible, sentía que se desgarraba por dentro, miró a su amigo para corroborar lo que había escuchado, Nilmar también lo miró preocupado y fijo:

NILMAR: que han secuestrado a Luciana, vamos con Hiana.

YOIMAR: ¿Dónde demonios estaba su personal de seguridad en ese momento?, ¿Por qué no estaban allí?.

NILMAR: no lo sé, todo tiene una explicación.

Al llegar al ascensor para marcharme de aquel edificio Yoimar llamó a un amigo hacker para que ingresara a los sistemas de cámaras del restaurante.

Cuando llegaron Hiana corrió a los brazos de Nilmar, ella contó como sucedieron las cosas y el porqué no estaban con su personal de seguridad.

Después de 15 minutos llegó el hacker y encontró todo lo que necesitaban, Yoimar analizó cada movimiento que hacían las mujeres, se dio cuenta de los hombres que estaban cerca de donde estaban ellas sentadas, inmediatamente Hiana los reconoció y dijo que ellos eran los que se habían llevado a Luciana, Yoimar siguió analizando y vio un hombre que se le hacia conocido al final de la sala del restaurante, pidió hacer cargo la imagen y se dio cuenta que era José el ex de Luciana y dijo:

YOIMAR: por Dios, ¡Luciana no podía estar en las manos de ese degenerado!

NILMAR: tranquilo que la vamos a rescatar.

HIANA: ¡no! ese infeliz es capaz de... de... hay no

¡No podía ni tan siquiera pensar en lo que podría hacer ese psicópata.

YOIMAR: ese tipo querrá vengarse por lo que le hicimos

Yoimar gritó por la desesperación imaginándose lo sucedido y las razones que llevaron a José a secuestrar de aquel modo, en un lugar tan concurrido y a plena luz del día. Nilmar ya tenía listo a todo el departamento de seguridad trabajando para encontrarla.

NILMAR: La vamos a encontrar, ya veras

HIANA: ese tipo querrá venganza, pero seguro que ante todo lo que quiere es hacerla sufrir, ay que avisar a la policía.

NILMAR: ya lo hice, en pocos miestaránstaran aquí.

Luciana había despertado y José le dijo que le diera el número de Yoimar, ella lo dio, José sonrió y guardo el número, después se acercó a ella y la golpeó hasta dejarla desmayada, el salió y llamó a su novia pero ella no le contestó, después de una hora entró a lugar donde tenia a Luciana y la movió, ella no se movió y decidió llamar a Yoimar.

 En ese momento a Yoimar le entro una llamada de un número desconocido, el contesto y escucho cuando le dijeron:

—Tengo a tu zorra, creo te divertiste mucho todo este tiempo, esta vez puede que me divierta mucho yo mejor, la pusistes hermosa, ahora me provoca y mas ahora que sé que no nos vas a interrumpir.

El dijo eso porque se dio cuenta que Luciana había despertado, la vio muy asustada y no iba a desaprovechar la oportunidad de hacerla sufrir, y sabía que el hombre que estaba al otro lado de la línea también tenía que estar asustado, pero José no tenía intenciones de abusar de ella.

YOIMAR: ¡no se te ocurra tocarla! Le tocas un solo pelo y eres hombre muerto infeliz, te juro que…

JOSE: ¡No jures tanto y escúchame si quieres volver a verla con vida! quiero Cincuenta millones de euros en la cuenta que te voy a pasar, cuando los tengas hablamos.

José no espero respuesta y corto la llamada, Yoimar se dio cuenta que la cifra era algo descomunal, pero el estaba dispuesto a todo por su prometida, desde la oficina del restaurante el hacker revisaba todas las cámaras de seguridad del sector.

La policía también empezó con su trabajo, en cada calle de la ciudad la policía revisaba camionetas y todo vehículo que cruzaba.

Mientras ellos buscan pistas para dar con el paradero de Luciana, José aprovecho y la golpeó partiendo los labios y cejas, Luciana daba gritos por los fuertes golpes mientras José le decía.

JOSÉ: ¿que creíste que te ibas a librar de mi fácilmente? eres un zorra.

LUCIANA: y tu un desquiciado, poco hombre.

Ella no le importaba lo que él pudiera hacele, sabía que mientras estuviera atada el iba hacer lo que quisiera, para ella era inútil tratar de convencerlo de lo contrario, José sonrió ý volvió a golpearla, Luciana ya tenía la cara irreconocible, el la golpeó sin piedad hasta que ella perdió el conocimiento.

En la oficina Yoimar lloraba desesperado, temía por la vida de Luciana en manos de José, sabía que era capaz de cualquier cosa por venganza, su amigo trataba de animarlo.

NILMAR: Vamos a encontrarla amigo, tranquilízate y pensemos con cabeza fría.

El hacker hacia todo lo más rápido que podía, sabía que la mujer corría peligro y era mejor dar con alguna pista lo antes posible, el buscaba hasta que vio la camioneta donde se había llevado a Luciana y dijo:

— Encontré la camioneta, vamos a ver hasta donde llega..

Los hombres miraron todo el recorrido y se dieron cuenta que cambiaron de camioneta, hacia donde se dirigieron no habían cámaras de seguridad, eso desespero a Yoimar y dijo:

YOIMAR: si le pasa algo… yo....

La voz se le quebró en el último instante porque no era capaz de imaginarse una vida sin Luciana, la quería demasiado para admitir que su mundo entero ahora era ella.

HIANA: no pienses lo malo, roguemos a Dio que la encontremos bien.

NILMAR: seamos fuertes, y cuando la encontremos, y encontremos a ese tipejo me aseguraré de que el no vuelva a ver la luz del día nunca más, hacemos que lo redundan en un calabozo, en la celda más oscura y fría que exista.

Ya eran las 5 de la tarde, Nilmar decidió llevar a Yoimar y al hacker para la mansión y trabajar desde allá, todos buscaban el más mínimo detalle en las imagines de las cámaras pero no daban con nada, decidieron descansar un poco porque eran las 10 de la noche; Yoimar no era capaz de dormir unos minutos para estar despejado en caso de ser necesario, temía que si lo hacía al despertar todo hubiera acabado y ella nunca volvería de nuevo a sus brazos, lo desesperaba el hecho de no poder hacer nada, de no saber en qué parte se encontraba e ir el mismo a rescatarla.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***