La venganza

Frederick llegó al lago y mandó a detener a su hijo, el pobre de Gerard no entendía absolutamente nada:

____ ¿Padre que ocurre?___ Preguntó el muchacho, sorprendido.

____ Me enteré de tu relación con Josh, eso no está permitido en la familia Lambert, es un pecado que se paga con la muerte___ Dijo Frederick apenas soportando el peso de su mirada suplicante.

____ Que absurdo, ¿No pensarás matarme?___ Preguntó Gerard, asustado.

____ Lo siento mucho hijo___ Expresó Frederick con lágrimas.

____ ¿Qué hiciste con él?___ Preguntó Gerard sacudiéndose con fuerza.

____ Estará lejos, mientras tú desapareces hijo mío___ Expresó Frederick tras caer de rodillas.

____ Déjame verlo, por última vez Padre, por favor te lo Suplicó___ Imploró el joven llorando.

____ Sí espero un poco más, no seré capaz de llevar el apellido Lambert en lo alto__Contestó él, hundido en su dolor.

_____ Padre, no lo hagas; ¿No hay otra manera de pagar? ___ preguntó Gerard, y en ese mismo instante comenzó a llover.

_____ Si en este momento, alguno ofrece morirse en tu lugar; tus pecados serán limpiados si te apartas de ella___ Confesó Frederick.

_____ Sabes perfectamente que eso no ocurrirá___ Dijo Gerard agotado de tanto luchar por escapar de aquellos gorilas que lo sostenían con fuerza.

____ Lo sé, llévenlo en la horca___ Ordenó Frederick con mucho dolor.

El joven fue arrastrado por los hombres de su padre, quién de atrás lo seguía.

_____ Soy tu único hijo, ten piedad de mí, padre___ Suplicó el muchacho ya todo embarrado.

La horca en donde murió su tío estaba en el estómago del bosque, y es allí en donde Gerard morirá, pagando un delito que jamás cometió.

Mientras tanto, Margaret luchaba por soltarse de las cuerdas que estaban penetradas a su carne.

____ Por favor, déjame ir a ver a mi amado por última vez __Suplicó Margaret llorando sin consuelo.

____ No, tú estás destinado a perder tu amor así como yo perdí al mío ___ Bufó el capataz y así por fin dejar a luz que era él, la persona quién amó al tío de Gerard.

_____ Pues esta historia no es igual que la tuya, yo soy una chica____ Gritó ella.

El hombre levantó la vista sin sorprenderse.

_____ ya lo sabía____ Confesó el hombre sonriendo descaradamente.

_____ ¿Y como se atrevió a enviar a Gerard a la horca?____Gritó Margaret.

_____ Shhhh, silencio todo esto es tu culpa, tú fingiste ser quien no eras, Tú misma lo mataste___ musitó el hombre.

_____ Nooo, suélteme por favor; déjame ir ____ Gritó ella con un profundo dolor y desesperación, que estaba lleno de culpa.

_____ Llegaste al castillo, como un anillo al dedo; me ayudaste a llevar a cabo mi venganza___ Bufó el hombre.

_____ Se lo Suplico, por favor déjame ir con él____ siguió Gritando ella.

En el estómago del bosque...

El lamento de Frederick retumbó espantando a los pájaros que habitaban allí, un zumbido en sus ambos oídos lo dejaban sordo al escuchar la voz suplicante de su hijo rogando por su vida con la soga a su cuello:

____ Padre, déjame ver a Josh por favor ___ Suplicó Gerad al temblar de frío.

_____ Nooo, hijo nooo, suéltalo maldito___ Gritó Victoria al llegar corriendo toda embarrada con sus vestidos blanco.

____ Madre, madre quiero ver a Josh una última vez por favor____ Rogó una vez más el joven.

____ Hijo mío, mi Gerard. Bájalo de allí Frederick___ Suplicó Victoria al dar palmazos en el pecho de su marido.

Frederick estaba decidido a hacer lo que tenía que hacer, solo una orden bastará para terminar con aquel sufrimiento.

Victoria se arrodilló en frente de su marido ofreciéndose ella en su lugar, sin embargo; Frederick no le tomaría en cuenta.

Marc, recién llegado al castillo después de visitar a sus abuelos, encontrando a todas las personas del servicio llorando y lamentando:

____ ¿Qué pasó aquí?___ Preguntó.

____ Ay muchacho, no sabes la tragedia que está ocurriendo ahora mismo__ Comunicó Albert consolando a su esposa.

____ Pero, que sucedió ¿Dónde están todos?___ Preguntó mirando alrededor.

____ El joven Gerar y Josh cometieron un pecado, que para los Lamberts es de muerte___ Contó Albert.

____ ¿Qué clase de pecado? ¿De qué hablan?___ Preguntó el muchacho alarmado.

____ Ellos tenían un amorío y son del mismo sexo___Respondio Albert.

_____ Noo, Josh es mujer____ Confesó Marc, desesperado.

Albert y Emma se colocaron de pies atónitos.

____ ¿De qué rayos hablas muchacho?___ Preguntó Emma petrificada.

____ Ella se llama Margaret y llegó aquí escapando de su padre maltratador___ Confesó.

Era todo lo que ellos querían escuchar, era como un milagro del cielo en aquel momento.

_____ Debemos salvar al Joven Gerard, no puede morir siendo inocente____ Expresó Albert, mientras corrían con Marc en busca de ellos al bosque en los caballos.

Margaret, aun intentaba soltarse de las cuerdas, no le importó destruirse la muñeca con tal de salvar a su amado.

El capataz estaba ocupado hablando con su hijo, mientras ella luchaba con todas sus fuerzas por escapar.

La lluvia seguía cayendo sin parar, y la agitada respiración de Gerard, por fin cansado guardó silencio.

____ Hazlo de una vez Padre, ya no soporto estas cuerdas en mi cuello___ Rogaba Gerad, con sus ropas completamente empapado.

____ No lo hagas, Frederick___ Suplicó Victoria.

Finalmente, Margaret pudo sacarse las cuerdas de las muñecas de seguidas a eso, se soltó la de los pies y empezó a correr con todo lo que le daba las piernas, apenas salió de la cabaña el capataz se dio cuenta y la persiguió el hijo, por lo resbaloso que era la tierra, ella caía y se levantaba, no obstante; sin rendirse siguió aunque el cuerpo se negaba, corrió y de tras el hombre veloz.

Por otro lado, Frederick estaba listo para dar la orden, mientras se tenía un odio profundo a sí mismo.

Marc y Albert cabalgaban a todo lo que daban, no obstante por la lluvia se les hizo aún más complicado todo, Albert sabía perfectamente donde era el lugar en donde los Lambert consumaban el castigo.Lo que más temió Albert era llegar tarde.

Margaret seguía corriendo sin saber para dónde exactamente dirigirse, tembló su alma, su corazón y todo su ser al oír un disparo al aire un tanto cercano de ella.

Y es que aparentemente ese era la señal de Frederick para darle fin a la vida de su hijo.

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