No Existe Una Familia Más Poderosa Que La Mía

Después de la extenuante noche, los esposos dormían plácidamente un sueño perturbador asaltó a Sophia.

"¡Sophi, Sophi, despierta! Me tengo que ir, pero volveré, tienes que ser fuerte cariño. Te amo, nunca te lo he dicho, pero te amo. Confía en mi familia, confía en mi hermano, regresaré, lo prometo" Dijo Mylan mientras colocaba las bragas y su camisa a la rubia.

Sophia abrió los ojos de inmediato ella creyó que la hipnosis estaba haciendo estragos y ahora soñaba las cosas que no pasaron, observó a su esposo "Eres tan guapo y tan caballeroso" Musitó.

Sophia fue a la ducha y cuando estaba por salir el grándote ingresó, tomó el jabón y empezó a enjabonar su espalda "Estaba por salir"

"Ayúdame con esto, primero" Dijo el castaño recostando su erec*ion en la espalda de su mujer.

"Hace un tiempo vi un vídeo donde la mujer lo metía hasta el fondo de su garganta ¿Quieres eso?" Preguntó Sophia moviendo su cuerpo para provocarlo más.

"Sophi ¿Ves po*no?"

"¿No te gusta? Dyl"

"Me encanta, has lo que aprendiste, seré tu conejillo de indias" Dijo el hombre recostado a la pared.

Sophia, se deslizó bajando sus manos por el musculoso y fuerte cuerpo de su esposo, hizo maniobras y su lengua no dio tregua, haciendo llegar al clímax al ruso de manera contundente.

Sophia salió del baño primero y fue con Karoll quien no dejó de mirarla ni un instante "Anda pregunta"

"¿Cómo estuvo? ¿Rico, delicioso, despampanante?" Preguntó Karoll riendo.

"Las tres, ahora dame de tu tónico anticonceptivo, tendré que visitar alguna doctora" Susurró la rubia riendo.

"Me alegro de que te hayas divertido ¿Qué haces?" Preguntó Karoll, mientras preparaba el tónico.

"Preparo unas tortillas que me encantan, acércate y te muestro"

"¿Le hiciste un oral?" Preguntó Karoll muy curiosa, pelando un banano, metiendolo a su boca fingiendo cierta actividad sex*al.

"¿Karoll? ¡Compórtate!" Exclamó Sophia y Dylan entró a la cocina.

Karoll al ver a su jefe embutió toda la fruta en su boca y fue a lavar sus manos.

"Volkova, nos asustaste" Dijo Sophia avergonzada, no sabía como dirigirse.

"Karoll retírate" Ordenó el empresario acercándose a ver lo que hacía su esposa.

Karoll con la boca llena "Mmmm" Asintió.

Sophia al verla como Casi soltó una carcajada, pero se contuvo apretando los labios y mirando divertida a su esposo quien al ver a la empleada salir, dijo "Anda, puedes reír, espero que todo lo que aprendiste con el banano lo pongas en práctica"

"Estás descarado" Golpeó sutilmente su fuerte brazo, sintiendo arder su rostro.

"¿Qué haces?"

"Algo que me gusta y le gusta a mi madre, me preparaba tortillas cuando era una pequeña y quiero sorprenderla"

"¿Pequeña? Entonces no fue hace mucho, porque sigues siendo enana" Dijo Dylan comiendo varias cosas de la encimera.

"¿Eres comediante? ¿O estás de muy buen humor? ¿Cómo estuvo tu noche cariño?"

"Húmeda, caliente..."

"Basta, no sigas, me estás avergonzando y te burlas por eso" Dijo Sophia ruborizada.

"Pero tú empezaste, me preguntaste..."

"Está bien déjalo, ¿Desayunarás? Puedo darte de lo que preparé" Dijo la mujer observando el rostro perfecto de su hombre, estaba feliz, no lo podia negar.

Dylan asintió, sentandose en la mesa de la servidumbre "Te iba a pedir que no estuvieras la mayor pare del tiempo en la cocina como si fueras una empleada, pero como de ahora en adelante tendrás empleo eso se acabará"

"Si jefe" Dijo Sophia riendo mientras colocaba su mano en la frente acatando órdenes.

Dylan se mantuvo serio, metió a la boca alimento que su esposa colocaba en la mesa y continuó diciendo "Entras a las 8:00, te asignaré una oficina, podrás salir a la hora que gustes siempre y cuando mantengas al día mis finanzas"

"¿Por qué te vas mucho antes de 7:00?" Preguntó Sophia, lo había visto salir muy temprano.

"En la empresa hay un gimnasio y hago ejercicio, tengo una habitación en mi oficina donde hay ropa deportiva y trajes entre otras cosas"

"¿Esa será mi oficina?" Preguntó Sophia, no sabía de dónde sacaba lo descarada, pero así como ella se sonrojaba, el ruso también lo hacía ante sus comentarios subidos de tono, ella lo veía jodidamente adorable.

"Pienso estrenarme todos esos lugares con mi jefa de finanzas" Confesó el castaño mordiendo una tostada y guiñando un ojo.

"No quiero que tus empledos sepan que soy tu esposa y antes de que digas que no estas de acuerdo, te diré que sería muy incómodo para mí. Quiero ganarme las cosas por lo que hago y no por tener contento al jefe en la cama" Dijo Sophia.

"Está bien, vamos a ver cuanto de dura el jueguito, soy muy exigente y no tendré compasión, entonces como no eres mi esposa estarás en periodo de prueba. Randy pasará por ti antes de 9:00, recuerda la cita con tu hermana y su esposo" Dijo el hombre levantándome, sacudiendo su traje.

Sophia se acercó, se puso de frente, alzó su mirada y acomodó la corbata de su esposo, se inclinó para alcanzar los labios del sujeto, mordisqueó el labio inferior y luego chupeteó "¿Estás enojado?"

"En la empresa te diré Anderson, inicias mañana. Después de hablar con tu hermana y cuñado. Lleva a tu madre al centro comercial y compren todo lo que necesiten sin medir gastos, Randy varios hombres de seguridad estarán al pendiente" Dijo Dylan ignorando la pregunta.

"Si jefe" Dijo Sophia apartándose.

El hombre la atrajo colocando su mano en la cintura y dijo sobre sus labios antes de besarla "Creo que tendré un romance de oficina con una practicante, procura comprar esa lencería sexi que usas" El hombre la besó dejándola con ganas de más y se marchó.

El castaño se dirigió a la empresa, fue al gimnasio, a pesar de haber tenido se*o con su esposa tenía con ganas de más, se sentía como un adolescente en celo queriendo coger todo el tiempo, esperaba que hacer ejercicio le ayudara a quemar un poco el deseo.

Luego fue a las duchas y a las 8:00 estaba impecable en su oficina, revisando algunos papeles en compañía de Justin "¿Entonces estás disfrutando tu sexualidad? Al principio el difícil contenerse, si no se protegen terminaras llenando la casa de niños"

"La escuché decir que visitará a una doctora" Dijo Dylan.

"¿Y mientras? Compra condones, amigo, mientras empieza el tratamiento" Aconsejó Justin.

"Señor, la señora Isabella Anderson desea hablar con usted" Dijo Nahomi la secretaria del empresario por la línea.

"¿Qué hora es?" Preguntó Dylan.

"Son las 8:15 ¿Le dijiste a las 9:00?" Preguntó Justin y Dylan asintió.

"Naomi, hazla pasar ___ Y tu amigo coloca la grabadora" Ordenó Dylan.

Isabella ingresó a la oficina, era también una hermosa rubia, era notable el parentesco con Sophia. Isabella posó la mirada en el hermoso hombre que tenía en frente, lo había visto en revistas y llegó a la conclusión que era mucho más hermoso en persona.

"Señora Willis, creí haberla citado a las 9:00, mi nombre es Dylan Volkova ___ Me imagino que ya conoce a Justin"

"Si señor Volkova, puede decirme Isabella y yo podría decirle Dylan, no entiendo porque tanto formalismo" Dijo la hermosa rubia.

Dylan la observó detenidamente, su mirada fue gélida, tanto que a Isabella le causó escalofríos "¿Su esposo?"

"El vendrá a la 9:00, le dije que llegaría un poco antes"

"Tome asiento __ Bien seré directo, aprovecharé que su esposo no está para mencionar algunas cosas de la cual estoy enterado" Dijo Dylan e Isabella miró a Justin, sabía que él había abierto la boca.

"Adelante, lo escucho" Dijo la mujer.

"Eras amante de Mylan, traes a tu hermana, la metes a mi empresa para que mi hermano le rompiera el corazón, sabías que era un casanova __ Entonces dijiste: Se acuesta con ella, la abandona y te vengas por el matrimonio forzado con el señor Willis, pero no contabas con que mi hermano se obsesionara con Sophia. Entonces ahora tu venganza es contra mi hermano ¿Me equivoco?"

Isabella se alteró "No es así, Sophia se enteró de que conocía a Mylan y me pidió que la ayudara a realizar sus prácticas y se obsesionó con él, hasta inventó que era virgen para atraparlo y el muy tonto cayó, mi hermana solo quería ser su viuda, ella es tan interesada, no la conoces"

"¿Sabías que Mylan tenías hermanos?" Preguntó Dylan enojado por la acusación en contra de su esposa.

"No, solo nos veíamos algunas noches, no hablamos de nuestras familias" Dijo Isabella.

"Que mal señora Willis, cuando me voy a meter con una familia procuro averiguar que tan peligrosa puede llegar a ser y sabe algo no existe una familia más poderosa que la mía. ¿Ha escuchado hablar de la mafia Rusa?"

Isabella empezó a temblar, ese hombre no se parecía a Mylan, era tres veces peor o tal vez más "Sí, he escuchado algo"

"Mi familia es peor que todas las mafias juntas, ni tú, ni tu esposo contrabandista podría conmigo, ahora le pregunto ¿Conoce a los Lombardi o a los Phriston?"

Isabella se arrepintió de ir sola al lugar, creyó que podía convencer al hermano de Mylan con una sonrisa o caricias, pero se había equivocado, ella desconocía por completo quienes eran los Volkova, solo sabía que eran muy ricos. Lo peor fue escuchar esos apellidos, eran los más importantes en el país, nadie en sus cinco sentidos se metía con ellos "Sí, se quienes son, los empresarios en tecnología"

"Bravo señora Willis, si tuviera una estrellita la colocaría en su frente como regalo por responder correctamente, los Phriston y los Lombardi, también hacen parte de mi familia __ Hizo una pausa el hombre __ Entonces si sabes donde está mi hermano ¡Más te vale que empieces a hablar!" Gritó Dylan mientras apretaba el mentón de la mujer.

"No lo sé" Lloró la mujer.

"¿No lo sabe? ¿Por qué se escondieron de mí por tres meses? Están aquí porque me he metido en su puto negocio de porquería ¿Tu esposo te envió primero? ¡Responde! ¿Él quiere saber que terreno pisa? Dile que lo tengo en la mira sé lo que hace, cuando va al baño, cena y hasta cuando te coge"

Isabella empezó a llorar de terror, estaba muy asustada, ese hombre era de lo peor "Si nos tienes vigilados sabrás que no sabemos nada de tu hermano, la perra de Sophia ella lo mató"

Dylan sonrió fríamente "¿Esta muerto? ¡Vaya! crei que estaba desaparecido ¿Dónde esta tu hermana?"

"Está detenida y aislada, no hemos podido verla, debe de estar pasándola muy mal, con ella debes desquitarte" Dijo Isabella.

La línea sonó nuevamente y la secretaria Naomi dijo "Señor, la señorita Anderson acabó de llegar"

Isabella espernancó los ojos por la sorpresa, Dylan la miró y respondió "Naomi, hazla pasar"

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