Inicio De Una Entrega Total

Dylan entró a la habitación de la rubia, esta tenía un minúsculo short que dejaba ver la punta de su trasero. La chica dio vuelta quedando ahora boca arriba, el conjunto de dormir era color crema satinada, la luz de la luna reflejada por la ventana dejaba ver unos lindos pechos redondos y firmes, también observó detalladamente la parte delantera de su pequeño pantalóncito ceñido en aquel lugar que a la mayoría de los hombres volvía loco. Ahora el se incluía entre el montón de trogloditas, deseaba probar nuevamente ese sitio.

Sophia abrió los ojos sintió que alguien la observaba, tomó la lámpara de un solo movimiento y dijo "¡Largo de aquí, estoy armada!"

"¡Mátame! Adelante" Dijo Dylan cómico.

"Eres un enfermo ¿No me digas que todos los días me espías?" Preguntó Sophia colocando la lámpara en la mesa y encendiendo la luz.

"Si, después del almuerzo vine a verte y estabas en la bañera, no quise molestar, pero no te preocupes no alcance a ver mucho" Dijo Dylan riendo y bebiendo un jugo en una botella, también traía una bandeja con pasabocas que había preparado Karoll para su tarea de gastronomía.

"Me imagino que fuiste a satisfacerte con tu mano, recordándome ¿Qué traes ahí?"

Dylan se acercó riendo "Por muchos años ella ha sido mi compañera, pero desde hace un tiempo... No, desde hace aproximadamente tres meses, no es suficiente" Refieriendose a su mano.

Sophia acababa de meterse a la boca unos pequeños chuzos de pollo y al escuchar a su esposo ser tan descarado, casi se ahogó "No te creí tan desvergonzado, andabas con una cara de puño que no podías con ella y ahora te la pasas lanzandome indirectas, que bien actúas Volkova"

Dylan quiso cambiar de tema y preguntó "¿Podemos hablar mientras cenas?" Sophia asintió con la boca llena.

"Quiero que duermas conmigo de ahora en adelante, entonces mañana pasaran tus cosas a mi habitación" Dijo Dylan y la rubia empezó a toser.

"¿Hablas en serio? Suena como una orden"

"Antes de conocerte, solo hacía bromas con mis hermanos, ahora bromeó contigo, pero lo de dormir en mi habitación es serio. Aclaro, no es una orden, pero no acepto un no como respuesta" Dijo Dylan.

Sophia volteó los ojos ¿Que se cree este? Entonces ella puso las cartas sobre la mesa diciendo "Bien, seré sincera, te odio y hace cuatro meses amaba a tu hermano ¿Puedes vivir con eso?" Preguntó saboreando los chuzos.

"¡Benditas manos de Karoll, esto está de rechupete!" Exclamó la mujer y Dylan tenso la mandíbula, todavía no podía con eso.

"¿Por qué dices que Karoll? Pude haber sido yo" Bromeó el hombre para quitar la tensión de su pecho.

"Esas manos suaves y pulcras no son de una amo de casa" Sonrió Sophia, recordando lo bien que se sienten en su piel.

Dylan entrecerro sus ojos por el comentario, pero continuó diciendo "Que me dijeras que Mylan nunca te habia dicho que te amaba me impulsó a proponerle a mi odiosa esposa que duermiera conmigo, tal vez si no te lo Confesó es porque no lo sintió, entonces no eras importante para él"

"¡Auch! Si me hubieses dicho eso cuando nos conocimos, me hubiera lanzado por la ventana" Dijo Sophia.

Dylan sonrio "No quiero que te acuestes sin comer, no está bien, mañana veré a tu hermana a las 9:00 Si gustas le diré a Randy que pase por ti a las 8:30"

"Te acompañaré"

"Me gustaría que siguieras con el trabajo que venías haciendo con Mylan, veo inconsistencias numéricas y Justin me dijo que tu trabajo era impecable, ya no serán prácticas, tu propia empresa te contratará y te pagará lo debido"

"¿Mi propia empresa?" Negó con la cabeza la mujer.

"Eres mi esposa, todo lo mío es tuyo cariño"

"Me conformo con ese sueldo, me ayudará a pagar..."

"Me encargué de tus deudas hace tres meses, tu y tu madre están limpias"

"No tenías que hacerlo..."

"Sí, tenía que hacerlo, no quiero verte nunca más como mesera en un bar para conseguir dinero"

"Me obligarte a eso..."

"Lo sé y me arrepiento, vamos a buscar juntos a los culpables" Dijo Dylan y la rubia asintió mientras comía.

"¿Qué te hizo cambiar de opinión?" Preguntó Sophia, tenía salsa en la comisura de sus labios y el ruso con su pulgar lo limpió y luego saboreó su dedo.

Sophia se puso roja como tómate, entonces el castaño respondió "Las sábanas que escondiste ¿Por qué lo hiciste?"

"Eso era vergonzoso, Karoll es boqui suelta"

"No me ocultes cosas, estaba ebrio y mi poca experiencia me hizo tergiversar lo ocurrido"

"Me gustó mucho ser la primera y que fueras el primero, creo que es un lujo que me di" Soltó una risilla Sophia.

Dylan no sabía si eran sus ideas, pero sentía a Sophia bastante abierta y diciendo cosas sin tapujos, él también quería hablarle de su orgullo por experiencia, pero se contuvo "¿Te burlas?"

"No, pero me gustaría saber ¿Por qué no lo habías hecho antes?"

"Soy de poco hablar, solo tres mujeres aparte de mi madre y hermanas han estado tan cerca de mi círculo íntimo, Dasha, Luna y tú"

"A Dasha la conoces, era compañera de escuela de los mellizos, Alana y Mylan. Dasha visitaba mucho nuestra casa, por cosas que más adelante te diré, luego se marchó, pero al regresar Insistió en estar a mi lado y lo permití. Luna Phriston la conocí cuando tenía 10 años, ella es especial, su madurez me atrajo y también hizo algo importante por mi familia. Ella estaba comprometida para casarse cuando fuera mayor, pero yo me aferré a lo que sentía y cuando se casó sentí que mi inocencia se rompió. No dejé que nadie más entrara a mi círculo y nuestra amistad menguó" Confesó Dylan.

"¿Ella es la famosa pelirroja?" Preguntó Sophia con enojo, esa mujer la ofuscaba.

"Si, te lo digo porque todos hablaran de ella en algún momento o se aparecerá, hace parte de nuestras vidas, es amiga de mis hermanas, mi padre es su padrino y mi madre la adora"

"¿Cómo es posible que una niña de 10 años ya estuviera comprometida para casarse?" Preguntó la mujer.

"Es complicado, algún día podré decirlo, es una tradición de familia. Entonces tener novia o sex* para mi se volvió insignificante"

"Porque lo querías todo con Luna, te obsesionaste con ella" Dijo Sophia mordiendo la yema de sus dedos.

"¿Y tú? ¿Por qué no lo habías hecho antes?" Preguntó el ruso.

"Una vez escuché a mi madre decir a una amiga que mi padre siempre había querido ser el primero en la vida de alguien, por eso se había buscado a otra mujer, creo que la señora Isabella, madre de mi hermana era virgen. Mi madre había perdido su virginidad muy joven. Yo me empeciné en llegar virgen al matrimonio, creyendo que de esa manera un hombre me iba a valorar, más tarde comprendí, que ese estado no le da el valor a una mujer, somos humanos y cometemos errores. A mis 20 años casi pierdo la batalla en una noche copas con mi exnovio, el que me engañó con mi hermana ¿Recuerdas?"

"Tienes un problema serio con las bebidas" Dijo Dylan.

"Algo así, tuve besos pasado de tono y caricias encima de mi ropa, pero al fin y al cabo caricias, si no me hubiese rescatado mi amiga Florencia hubiera perdido"

"¿Florencia?" Preguntó Dylan.

"Es mi mejor y única amiga, está en Italia haciendo una maestría en economía" Dijo Sophia yendo al baño a cepillar sus dientes.

Dylan colocó la bandeja en una mesa y esperó fuera de la puerta del baño, Sophia al salir se topó con el grándote su corazón palpitó con fuerza, entonces ella lo besó, un suave temblor se posicionó en sus piernas al sentir el roce de su esposo, él hombre deslizó su mano por la costura del conjunto de dormir, subiendo por los hombros y deteniéndose en el cuello, acariciando la tira de la blusa "Eres hermosa Sophi"

El guapo ruso continuó jugando con el elástico de la prenda y empezó a bajarla. Mientras profundizaban su tan anhelado beso.

Nadie en sus cabales intentaria siquiera separar a la pareja, ni a rastras podrían alejarlos de su atracción "Estuve a punto de decirle a la señorita Martin que borrara todos los recuerdos con otros hombres, que solo te acuerdes de mí"

Sophia sintio la furia del hombre al sentir el borde afilado de los dientes en sus labios, la mujer soltó una risilla "Eres tan posesivo, entonces sería tu segunda víctima después de Luna"

La forma en la que miró a a la rubia hizo que a Sophia le flaquearan las rodillas. Sophia quitó el cabello de en frente y eso hizo que su piel blanca sobresaliera ante la mirada del ruso.

"Te has quedado muy callado" Dijo Sophia mientras tocaba la costura de sus escote con sus delicado dedos.

La garganta del empresario se movió al tragar, la rubia colocó las manos en el cuello y las deslizó hacía bajo sintiendo al máximo sus músculos que parecían tener fiebre porque quemaban sus manos.

Dylan hundió el rostro en el cuello de la mujer y aspiró su fragancia, cerró los ojos y le dijo "Esto es más fuerte, con ninguna he llegado tan lejos"

Sophia ladeó la cabeza dando más acceso a su garganta para que el ruso la devorará, la mujer deseaba que está vez el hombre atesorara ese encuentro en su corazón para siempre.

La mano del ruso descendió por la cintura, agarró con determinación su tras*ro y mordisqueó y l*mió su cuello, apretando con ambas manos sus nalgas.

Sophia empezó a quitarle la camisa precipitadamente y Dylan no dejaba de besarla, la mujer recorrió con sus manos sus musculos que parecían ladrillos entrelazados, con una voz ronca Dijo "Este cuerpo es magnífico"

Las manos del hombre volvieron a tomar el trasero y sus dedos acariciaron los bordes de las bragas a través de la tela, Sophia atrapó nuevamente los labios del ruso retorciéndose contra él.

"¿Que me has hecho amor?" Dijo Dylan, recobrando su voz, empujando a su esposa delicadamente hacia la cama, rodó algunas almohadas y la tumbo entre las sabanas sin el menor sacrificio.

Sophia suelta una carcajada sobre sus labios "¿Amor?"

Dylan se apoderó de los labios con un beso muy suave que podria arrugar el corazón de cualquier mujer "Amor, te odio tanto" Sonrió.

Sophia golpeó sutilmente su hombro y dijo "¡Oye esa es mi frase!"

Dylan mordió los labios de su chica rebelde y dijo "Ahora sabrás cuanto de odio Sophi"

La rubia tocó su lengua con la de ella con cohibición. Dylan se tumbó sobre el pequeño cuerpo apoyándose en los codos, la

aprisionó entre sus brazos. Sophia estaba a punto de sufrir un colapso por tanta excitación, entonces suspiró, y él grándote aspiró el aire que salió de su boca.

"¿Me aplastarás? ¿Así me demostrarás tu odio?" Preguntó Sophia viendo sus ojos lascivos, la mujer se estiró y se retorcio bajo el peso del grándote.

"Eres enana, me imagino todas las formas en que tendremos que empalmar" Sonrió Dylan.

Sophia sintió una corriente al escuchar esas palabras "Eres enorme y eso que acabas de decir me..."

Dylan empezó a mordisquear suavemente el cuello de Sophia interrumpiendo sus palabras "¿Exc*ta?" Completó.

La pareja en medio de sus deseos incontrolables se preguntaban como habían vuelto a llegar ahí. Ninguno de los dos quería terminar o avanzar, habían decidido sin darse cuenta amarse con dulzura, suavidad y delicadeza, dejando a un lado su supuesto odio, su supuesta furia.

"Si lo hacemos otra vez esta noche, me pertenecerás para siempre" Musitó el hombre.

Continuará...

Hola mis amores, si quieren un capitulo extra el día de hoy, comenten, reaccionen y califiquen mi libro. De esta manera entenderé que les está gustando. Besos💋

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