Una noche para nosotros.

Esta será nuestra primera salida juntos. Las otras ocasiones eran con la familia. Siempre me la he pasado con ellos, y me hacen parte de la misma.

Mi familia está viviendo ahora mismo en Texas y por mi trabajo casi no los veo, y es que también la presión en que quieren que forme una familia.

No sé si aún no era tiempo o muy en el fondo tenía la esperanza de que mi niña me mirara, ha Sido una gran conexión desde siempre,, pero su coqueteo jamás lo vi con morbo solo caía en gracia y que quería bromear.

Ahora sus ojitos solo me miran a mí, y me ama con el alma Y voy a cuidar de ella como el tesoro más valioso.

Me estoy termínando de vestir. Ya estoy ansioso por ver qué nos tiene de bueno está noche.

...Luciana...

Esto al fin está sucediendo. Me siento la chica más afortunada. Tengo al hombre más sexy y guapo de todos. Y sé que las demás mujeres me envidiarán.

Pero ese hombre es solo mío. Ese bomboncito que me ama y me cuida mucho.

Aunque Servando estuvo insistente que saliéramos y le tuve que contar lo que está sucediendo y sé que a él no le puedo mentir y está feliz por mí. Solo algo preocupado por como pueda reaccionar mí padre si se entera. Eso a mí no me quita el ensueño.

Aun y así se opusiera Ya soy mayor de edad y puedo decidir que hacer con mi vida amorosa.

En fin, Ya estoy lista para bajar y encontrarme con mi Adonis.

Bajando las escaleras él está ahí observando cada movimiento que hago, me mira como una presa débil que mi depredador quiere saltarme encima.

Estoy lista, Jose Luis, le hablé fríamente, no quería que las personas de limpieza me vieran comérmelo a besos.

Camine para perderme por el pasillo directo a la salida. Ahí estaba su auto.

Él sale detrás de mi muy serio.

Parece que no quisieras salir José Luis.

Él se limita a abrir la puerta del coche y yo subo. Lo bueno de este coche es que los vidrios eran muy obscuros porque era obvio que lo iba a besar.

_ Se puede saber por qué me hablas tan fríamente. José Luis se escucha muy feo para mí.

_ Sabes que dentro hay personas que nos pueden ver, quería brindarte y besarte mi cielo, pero no se puede,

Pero aquí si se puede ven acá besame.

Casi me subo encima de el, dejando un gran beso. Que lo hizo suspirar.

_ Tienes razón mi niña, pero es que con tan solo verte yo quiero darte amor y que tú me des.

Puse en marcha el auto y la tomé de la mano. Mientras ella jugaba con mis nudillos. Era relajante, su compañía y era todo lo que quería. Tenerla para mí.

...Luciana...

Tenerlo tan cerca, y poderme inundar mis fosas nasales con su fragancia revuelta con tabaco, era exquisito sentirlo tan mío,

Y sé que soy una niña inmadura, pero quiero quererlo bonito, de una manera que antes no se ha visto. Quiero que sea el hombre más feliz de esta bendita tierra y se sienta orgulloso de la mujer que tiene a su lado.

¡- y a dónde me llevas mi cielo.

- te llevaré a cenar a un nuevo restaurante. Cenaremos tu platillo favorito, comida italiana.

Y un buen vino.

_ Que rico. Ya veo que conoces muy bien mis gustos.

- conozco todo de ti mi niña. Sé cuando estás enojada, triste, o feliz. Cada gesto de tu rostro lo tengo en mi memoria.

-wow! Oye, pero recuerda cuando te hice una carta. Y que decía te amo. Ja, ja, ja. Para ese entonces ya tenía ocho años.

_ Desde entonces me amabas. Yo estoy tan acostumbrado a ti que sería difícil vivir Lejos. Yo no puedo estar sin ti. Por lo mismo vivo con ustedes. Si no me he ido es por ti.

- Jamás te vayas, no te quiero lejos. Prométeme.

- Lo prometo mi niña. Y ahora menos me voy.

* dejé un suave beso en su mano.

¡llegamos! Oye es lindo el lugar,- le decía mientras miraba del otro lado del vidrio de la ventana.

Y ahora como actuaremos, puede haber personas que nos conozcan sobre todo a ti, eres muy conocido.

tú eres la hija de mi amigo y no le veo nada de malo que estemos cenando. Solo toma mi brazo y entremos.

...Luciana...

Y tal como lo pensé, aquí hay familias conocidas cenando. Apenas llegamos a nuestra mesa y ya todo mundo se acercaba a saludar. Me sentí muy incómoda.

- Con permiso voy al baño. Me levanté ya que los señores se pusieron a hablar de negocios y yo con tanta hambre. Tengo que acostumbrarme a esto.

Al regresar ya se han ido. Gracias a Dios.

Ya ordenaste José Luis.

- ya mi niña, pero no me digas José LuiSe se escucha muy grotesco.

Perdón por este momento, a veces es inevitable detener los negocios. Ellos siempre te acompañan.

- si ya lo vi. No te preocupes. Todo bien mi cielo. le sonreí.

...Jose Luis...

Cenamos muy rico y empezaríamos por el postre. Pero antes fui al baño. Cuando regresaba unos tipos me hicieron señas para que me acercara.

- Oiga suegro. Le puedo mandar una copa a su hija. Está hermosa la condenada.

- y por qué no se la llevas a tu madre y le dices que es de mi parte. Cabrón.

Me fui a la mesa en dónde estaba mi niña y me sonreía muy tierna.

- ¿todo bien?

- Si mi niña. Pero quiero salir de aquí. Vamos a caminar un poco.

- si por favor, ojalá y nos encontremos con una calle obscura y poder llenarte de besos.

_ me agrada la idea.

Salimos de ese lugar, y subimos al auto para poder estacionarlo en algún lugar y poder caminar un poco.

Encontramos un gran parque lleno de árboles en dónde casi no había gente. Y eso me agrado porque podríamos caminar tomados de la mano.

Y así fue. esta noche es la mejor noche de mi vida. Estar con la mujer que amo y tomarla de la mano y poderla besar. No tiene precio,

Al llegar al punto medio ahí nos detuvimos y ahi la bese y ella correspondió de esa manera tierna que tanto me gusta.

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