Cambio de planes.

Terminado el almuerzo los reclutas vuelven a formarse como Brigitte lo ordenó esta vez priorizando la fuerza de brazos al principio y dejando la velocidad para el final, apenas suena el silbato todos comienzan a correr y esta vez el obstáculo de la cuerda no es tan complicado como al principio, pero al llegar a la plataforma Oliver comienza a sentirse mal nuevamente y sus piernas se tambalean de un lado a otro, Brigitte nota eso por lo cual corre lo más rápido que puede y trepa la cuerda como sí lo hubiera hecho miles de veces, afortunadamente logra sujetar a Oliver evitando que la caída le haga daño, ella le pide a Anton que traiga ayuda ya que esta vez su malestar vino acompañado de espasmos musculares y cuando menos se lo esperaba Anton le responde que en el yermo no habrá nadie que los ayude sí pasa algo así y a pesar de estar nerviosa Brigitte sujeta a Oliver una vez que sus espasmos pasaron y lo ayuda a terminar el circuito, el resultado de esa ronda dio un tiempo mínimamente aceptable por lo que Anton lo toma como valido excepto el tiempo de Oliver ya que él terminó gracias a la ayuda de Brigitte y sí no termina el circuito por su cuenta al final del día será expulsado de la academia, una vez que todos se van Brigitte lleva a Oliver a la enfermería donde puede descansar hasta que su malestar se va y al despertar lo primero que nota es a Brigitte y a Viveka junto a él, no puede evitar sentirse confundido y apenas lo ve despierto Viveka se acerca preocupada.

- ¿Oliver estas bien?

- Por el momento si... ¿Qué haces aquí?

- Cuando iba al dormitorio después del entrenamiento vi a Brigitte intentar cargarte y me preocupé.

- ... Estoy bien ahora necesito hacer algo.

Oliver intenta levantarse de la camilla y a pesar de marearse un poco logra mantenerse de pie y Viveka y Brigitte lo siguen muy de cerca mientras él avanza despacio hacia la puerta, ninguna de las dos está muy segura de que Oliver deba volver a intentar pasar la prueba debido a su estado de salud pero él se ve muy determinado y seguro por lo que no aceptará que lo mantengan encerrado mientras su oportunidad de ser un soldado está en peligro, a pesar de todos sus esfuerzos su debilitado cuerpo no aguanta tantas exigencias y mientras caminaba por el pasillo una de sus piernas cede ante la presión provocando que casi caiga al suelo pero recupera el equilibrio en el último segundo, las dos chicas intentan sujetarlo de los brazos para que no se caiga cosa que toma por sorpresa a Oliver y no está muy contento con dicha acción - Oliver estas muy mal, al menos deja que el doctor venga. - Dice Viveka llena de preocupación, pero el joven chico rubio está muy cerrado en su objetivo e intenta ignorar todas las recomendaciones o eso hacía hasta que se escuchan unos pasos acercándose a los tres dejando ver la silueta de un joven chico albino alto y de figura esbelta, Brigitte y Viveka se pusieron felices al verlo ya que ese chico es uno de los soldados de la brigada de médicos recién egresado de las prácticas y últimamente se había vuelto muy popular principalmente entre las novatas jóvenes, Oliver queda mudo ante la presencia del joven médico frente a él quien también se asombra de ver al chico levantado de su camilla – Vaya vaya, te recuperaste más rápido de lo que esperaba pero no intentes escapar dudo que puedas correr muy lejos, ven. - El nuevo chico sujeta a Oliver por el brazo y lo lleva nuevamente dentro de la habitación pero no deja que las chicas ingresen, el médico hace que Oliver se siente en su camilla para luego comenzar a revisar su condición física sintiendo el latido de su corazón, revisando su capacidad pulmonar entre otras cosas, Oliver no estaba muy preocupado ya que el médico no parecía tener ninguna preocupación lo único que quería era que lo devuelvan a donde estaba para poder terminar su desafío del día, todo parecía ir bien pero lamentablemente para Oliver el joven doctor no tenía muy buenas noticias para él ya que varias personas presenciaron como se desmayó en más de una ocasión - Hola Oliver, me llamo Marat y seré tu médico hoy... ¿Estás seguro de que quieres ser un soldado? - Las palabras del médico no fueron nada nuevo para él, desde el principio escuchó como las personas le advierten de que su cuerpo no fue hecho para ese trabajo y que es mejor renunciar, pero él nunca había logrado nada por su cuenta por lo que decidió dar todo de él mismo para cumplir su objetivo o morir en el intento, ante la inexistente respuesta de Oliver su médico solo suspiró un poco y continuó sonriendo de forma amable como lo hacía antes.

- Escuché que antes de entrar aquí trabajabas en una radio y que a pesar de ser un poquito tímido en persona sabias como comunicarte bien con ella.

- Pero no quiero volver a ese lugar, de verdad quiero ser un soldado.

- ¿Y sí te digo que hay una forma en la que puedas ser soldado y que no tenga tantas exigencias físicas? Ejercicio vas a tener que hacer, pero es menos exigente en esa área.

- ¿De verdad?

- sí, verás, aquí somos todos soldados incluido yo, pero hay distintas especializaciones con entrenamiento diferente para todos, yo soy un soldado médico, pero también hay mecánicos, expertos en armas y explosivos y también está la unidad de comunicaciones, esos soldados se encargan de llevar radios portátiles y equipo que mantiene a las unidades que salen comunicaos con la ciudadela, sin ellos no sabríamos que les pasa a nuestros equipos allí y hay muy poco personal capacitado ¿Qué te parece unirte al equipo de comunicaciones?

Oliver quedó sorprendido ante esas palabras, no sabía que su antiguo trabajo como locutor de radio podría ser útil en el ejercito por lo que tímidamente asintió con la cabeza, ante esa especie de respuesta Marat se pone contento y se aleja caminado hacia la puerta – Le informaré a Herschel sobre tu traslado. - Luego de decir eso Marat se fue y las dos chicas pueden ingresar y apenas entras se abalanzan a la camilla para bombardear a Oliver con sus preguntas - ¿Qué te dijo el doctor? - pregunta Viveka llena de dudas - Me dijo que podía ir al equipo de comunicaciones y creo que será lo mejor. - ambas chicas se voltearon para verse entre ellas y sus rostros se llenaron de tristeza y luego Brigitte vuelve a ver a Oliver para darle una mala noticia – Pero sí te unes al equipo de comunicaciones no volveremos a vernos hasta terminar el entrenamiento. - Oliver se preocupó por eso ya que en todo el lugar ellas fueron las únicas que parecían preocuparse al menos un poco por él y creía no encontrar a nadie igual a ellas en todo el lugar, Viveka notó la expresión en el rostro de Oliver por lo que puso su mano suavemente en el hombro de aquel chico y sonrió de forma amable – No te preocupes Oliver, son un par de semanas solo debemos aguantar el entrenamiento para graduarnos todos y ser un equipo oficial ¿Qué te parece Oli? Ya pasaron unos días cada vez es menos tiempo. - Las palabras de Viveka calmaron un poco al chico pero no podía evitar sentirse un poco triste ya que ella era la primera persona que le ponía un apodo cariñoso como ¨Oli¨ en lugar de alguna clase de insulto, era triste pero sí Oliver quería ser un soldado y principalmente lograr permanecer con vida hasta terminar el entrenamiento debía aceptar el cambio e ir al equipo de comunicaciones.

Pasaron varias horas, Oliver ya estaba en el dormitorio masculino junto al resto de chicos cuando entran por la puerta Anton, Edgar y Elvira, lamentablemente Oliver no pudo despedirse de Viveka y Brigitte pero Varik si se despidió de él dandole un gran golpe en la espalda. los tres profesores se llevan a Oliver y le dan una carta confirmando su traslado a la unidad de comunicaciones e inteligencia por lo que ya era su hora de irse para enfrentar su nuevo desafío y esperar con gran ansiedad la hora de su graduación.

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