Capitulo 11: Los sentimientos egoístas de Rosa.

A los ojos de Rosa los hijos casados, ya no pertenecían a su familia, pues ahora que estaban casados tenían una propia familia... por lo que sentía que ya no tenía que preocuparse por Jade una vez se casara.

En el futuro los Lancaster se ocuparían de Jade, por lo que no necesitaba gastar su dinero... por el contrario, cada vez que veía a la lamentable Janeth, se sentía culpable y sentía la necesidad de darle lo mejor de todo y protegerla de absolutamente todos.

En realidad, Rosa... también tenía motivos ocultos, que eran demasiado egoístas, pues Jade siempre había estado más cerca de Benjamín, y en algún momento sintió que Jade era indiferente a ella. Realmente sintió que nunca pudo llegar a gustarle a su hija menor, ya que su personalidad era demasiado tranquila e indiferente. A diferencia de Janeth que sabía cómo actuar linda y era muy pegajosa, además de que era mucho más apegada a ella.

Cuando Janet regresó a casa Rosa finalmente se sintió importante, su egoísmo era tal que no se dio cuenta del daño que le hacía a su hija menor, pues aunque Jade era muy tranquila callada y reservada, realmente se esforzaba por agradarle, cosa que Rosa nunca notó.

Y muchas veces, incluso llegó a desear... "Si tan solo la secuestrada fuera Jade" inconscientemente le tenía resentimiento a su hija menor, por no ser tan apegada a ella como lo era con Benjamín.

Cuando Benjamín escucho las palabras de Rosa sintió que tenían un poco de sentido, después de todo Jade pronto sería la joven amante de la familia Lancaster, así que Benjamín frunció el ceño muy ligeramente y miró a Jade... para después decir. "Jade, tal vez, deberías...".

"¡Papá!" Jade le interrumpió, sus ojos estaban llorosos... lamentablemente no pudo evitar que las lágrimas cayeran, sentía su corazón roto, no podía creer que incluso su padre se pusiera de lado de Janeth en este momento. "Me voy a casar pronto... ¿aun así me pides entregar el último regalo que me da mi propio padre?"

Al ver llorar a Jade, Benjamín sintió su corazón romperse sabía que había dicho algo malo, sabía que había hecho algo malo... Benjamín solamente pudo suspirar... e inmediatamente volteó a mirar a Rosa enfadado. "Jade no quise decirlo de esa manera, Todo esto es culpa tuya Rosa" hablo Benjamín. "¿Dé qué rayos estás hablando? Cómo puedes decir que nuestra hija menor no puede utilizar mi dinero, aunque Jade se case sigue siendo nuestra hija y se merece todo lo que le damos, ¿Cómo podemos hacer que se sienta agraviada al pedirle que le entregue el dinero que ya le he dado a su hermana mayor?".

Una vez Jade, dijo eso Benjamín sintió que era una persona que no tenía conciencia, Jade su preciosa hija pequeña estaba a punto de casarse con la familia Lancaster y yo le pedía que le diera su último regalo a Janeth, ¿No era eso prácticamente olvidar a su hija menor?, incluso su último regalo se lo estaba quitando Benjamín no pudo soportar ver llorar a su hija, y no pudo evitar castigar a su esposa.

Janeth aún es joven, además ella no está comprometida... aún sigue estudiando, Así que no hay necesidad de que se comprometa. Todo el mundo debería aprender a ser ahorrativo y no a derrochar solo porque quiera, si lo hace la gente podría pensar que solo estamos presumiendo.

Cuando Rosa, oyó esto, frunció el ceño, pero pensó que lo que dijo Benjamín era razonable; sin embargo, tenía la extraña sensación de que las cosas no deberían haber ido de esa forma.

Al principio Janet sonreía triunfante, mientras pensaba que podría conseguir la tarjeta de crédito... sin embargo, hubo un giro repentino y fue algo inesperado pues esto lo enfureció demasiado, asustando el vaso con jugo de manzana que tenía en la mano en la mesa con fuerza, estaba tan enfadada que gritó furiosamente.

"¡No es justo!, papá eres demasiado parcial, ¡lo sabía! ¡Solo te preocupas por Jade!, pasé por mucho, y sufrí demasiado, y ahora que he regresado ni siquiera me amas en absoluto, tienes favoritos ¿entonces cuál es el punto de que yo esté aquí?... ¡Haré las maletas y me iré mañana!", gritó antes de salir corriendo para subir las escaleras a su habitación, Janet estaba acostumbrada a hacer este tipo de berrinches a menudo, ya que sabía que sus padres se sentían culpables por haberla perdido aquel día; sin embargo, esta vez no funcionaría.

Jade sabía que algo así sucedería después de todo esto ya había pasado antes; sin embargo, esta vez reacciono de una manera diferente... sabía que Janeth era fantástica actuando, Y es que era hilarante pues el talento que tenía era suficiente para convertirla en una estrella de actuación, las agencias de entretenimiento se estaban perdiendo talento... pero sí Janeth tenía talento sabes era incluso aún mejor.

Jade dejó el tenedor en la mesa, se limpió la boca delicadamente con la servilleta que tenía a la mano, solo para suspirar y sacar la tarjeta de la bolsa del pantalón, con una mirada agraviada.

Jade miró de reojo a su padre Benjamín, quien parecía culpable, por las palabras que Janneth había dicho antes, En ese momento Jade suspiro impotente y habló. "¿Sabes que padre?... Ya que Janeth ah dicho eso, yo ya no quiero la tarjeta de crédito, Así que, puedes dársela a ella, despues de todo, seguramente la familia Lancaster me darán dinero, cuando vean que no tengo, Después de todo, son una familia con tanto poder que, no creo que me dejen sin un centavo... Al principio, quería quedarme con la tarjeta de crédito... Para comprar algo que ponerme para ir a la familia Lancaster el día de la boda, después de todo, no puedo ir a ellos vistiendo como normalmente lo hago, sin embargo; Nunca quise hacer sentir menos a Janeth, Yo solo quería poner en alto el nombre de la familia Hillary y no avergonzarlos padre, Aún así, puedo utilizar uno de los vestidos que ya tengo, así que puedes darle la tarjeta a Janeth" dijo Jade con tristeza en los ojos.