Indirecta muy directa

ESTA NOVELA TIENE CONTENIDO INAPROPIADO PARA MENORES DE 21 AÑOS

SI SOS ADULTO Y NO TE GUSTAN LAS DESCRIPCIONES DE SEX@ EXPLICIT@ NO LEAS ESTA NOVELA, YA QUE TIENE MUCHO CONTENIDO INAPROPIADO.

Esta novela se hizo pensando en las canciones cantadas por Carín León. ¡LO AMO!

¡Muchas gracias!

Seis meses antes

Yanelis.

 La expectativa de verlo luego de 18 meses me estaba matando, sé que debería ser fuerte, yo termine nuestra relación. Por mi bien. Por mi paz mental. Porque entendí que debía amarme ante todo.

Desearía que no este, pero sé que estará aquí, es el hermano mayor del Miguel, por lo tanto, es el único cuñado de mi mejor amiga. Su amor fue lo único bueno que resultó mi relación con Manuel.

Fumo una última calada de mi cigarrillo sentada en mi auto. Vicio que retome hace exactamente dos minutos luego de 5 años, lo había dejado por él, soy consciente de que no es sano. No es que haya fumado mucho tiempo, era mi salida del estrés que provocaba mi trabajo.

Lo apago. Reviso mi cabello en el espejo, esta vez lo deje libre sin ninguna atadura, los diminutos rulos caen desordenados en forma de cascada hasta mi cintura, llevo un maquillaje ligero con mi color de piel mixto, es lo mejor.

Una afroamericana con piebaldismo ya es llamativa. He tenido infinidad de apodos, dálmata fue el más utilizado, seguido por cruella de vill negra y también oso panda, por la mancha blanca que comienza en mi ojo derecho, donde mis pestañas son albinas, al igual que mis cejas y un tercio de mi cabello. Es una condición que herede de mi madre, ella es castaña, pero mi padre es afroamericano y yo soy la combinación de ambos

Bajo de mi auto. Acomodo mi vestido color salmón, de mangas cortas, que llega hasta mis tobillos, donde llevo unos tacones altos del mismo color y camino hacia el restaurante de Briget, enterrando mis inseguridades. Estaba aquí porque es su cumpleaños, pero además hoy Miguel le pediría matrimonio. Se conocieron gracias a Manuel, mi exnovio y a mí.

Mis pasos parecen firmes, sin embargo, soy una tormenta por dentro. Al abrir la puerta escucho su voz y mi piel se eriza. Sé que está cantando en el escenario sin necesidad de mirarlo, quisiera correr, más cuando una mujer rubia de ojos azules se acerca a mí.

_ Yanelis ¡qué gusto verte! _ exclama con gran emoción fingida la madre de Manuel intentando abrazarme, siempre tan cínica. Doy un paso atrás evitándola

_ hola señora Sofía, ¡no pienso lo mismo!_ le respondo

_ ¿qué ocurre? ¿Acaso olvidaste cuando dormías en mi casa y comías en mi mesa?

_ si lo recuerdo _ dije mirándola con el mismo rencor que antes _ ¡y fue la mayor estupidez de mi vida!

_ Yanelis _ exclama mi exsuegro acercándose, ¡gracias Dios!_ ¡bienvenida!

_ ¡entre clase baja se entienden!_ gruñe bajito la araña ponzoñosa y se va.

_ ¡Hola señor!

_ Pedro. Yanelis dime Pedro. Ven te llevaré junto a Briget _ camina y lo sigo

El hombre es la viva imagen de Manuel, mismos ojos marrones y cabello castaño claro. Incluso tienen la misma altura, pero en su rostro se reflejan la diferencia en sus edades. Aun así, es un hombre apuesto y amable a diferencia de su exesposa

Camino detrás de él, mirando el escenario de manera inconsciente. Quizás yo necesitaba mirarlo, quería verlo. Sus ojos estaban sobre mí, mientras cantaba con su traje tradicional de mariachi, color gris y su guitarra, acompañado de varios hombres más. Sigue tan apuesto como antes, emana romanticismo y masculinidad.

Los recuerdos de él cantándome en cualquier momento del día llegan a mí. La canción termina y Manuel comienza a cantar otra. Notablemente, una indirecta, muy directa para mí, maldita sea su perfecta y sensual voz que llega a mis oídos haciéndome estremecer, ¡maldito infeliz!

🎶 Porque para amarme. Te di mil razones

Voy a darte el doble. Pero pa que me odies. Y con ganas de no haberme conocido.

Voy a ser tu peor castigo. Voy a ser la piedra en tu camino

Te daba mi vida. Y te valió madre

Cuando más te amaba. Te fuiste sin darme explicaciones

Fui el mejor de tus amores. Hoy el peor de tus errores

Me vas a aborrecer porque te juro que voy a aferrarme. Voy a ser tu ex, el tóxico. El innombrable.

Una pesadilla, un dolor de muelas. Que cada que me nombres. Sea pa recordarme a mi mamá y mi abuela 🎶

_ Yanelis _ me llama Pedro y giré a mirarlo _ te dejo a cargo iré a hacer eso _ el hombre me guiño el ojo y se va. Mis ojos se encontraron con esos ojos verdes de la rubia, sentada en una mesa junto a sus padres y a Miguel.

_ ¡Yanelis!_ gritó, levantándose y acomodando su delantal blanco de chef, sobre el vestido negro que lleva debajo, para venir hacia mí

Este lugar es suyo. A pesar de ser su cumpleaños, ama cocinar y seguramente preparo todo por sí misma. Estoy aquí por ella, solo por ella, porque yo soy la distracción

_ ¡sabía que me amabas más que a él!_ murmuró en mi cuello abrazándome y le correspondí

Es pequeña en comparación mía, mide un metro cincuenta y ocho, mientras yo con mi metro setenta y cinco sumados a mis tacones de quince centímetros soy enorme. Otro complejo más que sumar.

_ ¡gracias por venir!_ dijo al mirarme

_ ¡por ti haría cualquier cosa! ¡Felices 30 años!

_shhh eso ¡no era necesario!_ nos reímos _ ven a saludar a mis padres!

_ ¡buenas noches! Marc, Georgia

_ ¡hola Yanelis! ¡Siéntate!_ exclama la mujer con la que crecí, como mi familia

_ gracias por venir _ murmuró Miguel pasando junto a mí, para subir al escenario

Manuel

Seguí cantando, manteniendo bajo control mis sentimientos, mis deseos de correr hacia ella y besarla como antes. Y a la vez de gritarle por haberme hecho sufrir, por hacerme sufrir, ahora obligándome a verla como espectador, sin poder tocarla, besarla. La amaba y la odiaba al mismo tiempo

Estaba hermosa, aún más que antes, es injusto que Dios la haya hecho tan hermosa, me permitiera tenerla para luego quitármela. No, Dios no me la quito, ella me dejó, ella me arrojó a la basura

_ Manuel _ escucho cuando terminamos la última canción y asiento sin dejar de mirarla.

Sé que siente mi mirada, pero me ignora, lo ha hecho desde que nos separamos, ignorarme. Mejor dicho desde que me dejó por alguien, mejor que yo, “con más dinero que un simple mariachi”

_ Manuel _ vuelve a llamar Miguel y lo miro

_ ¿qué quieres cabrón?

_ ¡deja de mirarla y más te vale que no te acerques a ella! ¿Por qué cambiaste de canción?

_ ¡solo se me hizo oportuna para el momento!_ dije con burla

_ ¿Momento? ¡Hoy es un día importante para mí! ¡Te moleré a golpes si lo arruinas! ¡Deja tus momentos para cuando no sea el día que prepare para mi novia cabrón! ¡Hoy es mi momento!

_ ¡no me digas que hacer! ¡Soy tu hermano mayor!

_ pues pareces el menor, ¡con las estupideces que haces! ¡No quiero problemas Manuel!_ asiento y la veo levantarse dándome la vista trasera de su cuerpo. Esas caderas están más grandes, malditos sean los recuerdos de ella y sus caderas entre mis manos y sobre mi..

_ ¡Manuel promételo!_ carraspeo y lo miro

_ ¡Briget ya se fue con ella!

_ ¡Prepárense!_ mira a uno de los meseros _ traigan el cartel

Mi hermano baja con la guitarra del escenario, mientras la banda y yo permanecemos en el mismo lugar. Somos mariachis y solemos cantar los clásicos del género, también regionales mexicanas. ¡Siempre entonamos lo que nos piden, mientras la sepamos a nuestro estilo, por supuesto!

Mi papá guía a los meseros con el cartel que dice “cásate conmigo” frente a nosotros y detrás de mi hermano. Cuando las dos regresan comenzamos a cantar

🎶 Tú me gustas. Para que, en la calle, siempre nos vean de la mano

Para que tú seas quien ponga la música en mi carro. Cualquiera quiere ser tu dueño, yo quiero ser tu esclavo

Tú me gustas. Para no solo en febrero regalarte rosas. Para pasarme la vida besando tu boca

Y sé que aunque estemos viejitos, te seguirás viendo hermosa. Tú me gustas para que el padre me diga. Puede besar a la novia🎶

Acompaño la voz de Miguel sin apartar mis ojos de ella deseando, rogando que me miré. Hasta que lo hace, le sonrió y continuo cantando solo la última estrofa, ya que mi hermano se arrodilló mostrando el anillo.

Todo lo veo de reojo, porque no quiero dejar de observarla. Luego de dieciocho meses no tiene vergüenza y tampoco muestra arrepentimiento por lo que nos hizo. Éramos perfectos uno para el otro y me cambio por dinero, dinero que tiene de sobra.

Me detengo al escuchar los aplausos y cuando mi cuñada abraza a Yanelis, a mí Yanelis. Bajo a felicitarlos y aprovecho para acercarme a ella, pero me esquiva hablando con los padres de mi cuñada.

Luego de cenar, sirven postres y bebidas alcohólicas. Me evito toda la noche, decidí sentarme junto a mis compañeros mariachis.. más bien mis empleados, para intentar calmar mis ansias, quizás alejándome unos metros, podría dejar de mirarla.

Eso empeora mi estado, éramos siete en la misma mesa. Hoy están solo algunos, los otros no vinieron, tres de los que están aquí, son solteros y no saben que Yanelis fue mi novia y escuchar como hablan de ella me saca de quicio.

_ ¡es hermosa!_ dice Lucas

_ ¿quién? _ responde Juan

_ ¿cómo que quién? _ sigue Roberto _ la amiga de la jefecita es un mujerón

_ ¡sí!_ continua el primero _ hermosa cruella de vil _ suelta y se ríen hasta que notan mi mirada

_ ¡Esas nalgotas!_ termina Juan. José, uno de los que está con nosotros desde hace diez años, lo golpea _ ¿qué haces? _ gruñó

_ ¡esa mujer no se mira!_ afirmó _ es y será de Manuel _ finalmente me mira

_ Esto es para los tres, vuelven a hablar sobre ella así y búsquense otro trabajo _ Se escaparon de la mesa en cuanto pudieron. Tomaba el décimo tequila cuando la veo salir al balcón y la sigo. Guiado por el impulso del alcohol o quizás me justifico con él.

La encuentro fumando. Me tomo el tiempo de observarla haciéndole el amor con mis ojos antes de hacer notar mi presencia. Con esos tacones es mucho más alta que yo, pero sin ellos tenemos casi la misma altura. Siempre supe que era mucho para mí. Siempre fue y será la mujer más hermosa para mí, a pesar de todo

_ creí que habías dejado de fumar _ exclamé. Giró a mirarme

_ Hola Manuel _ me saluda por mero respeto. Apaga el cigarrillo, leo sus intenciones de escapar y tomo su brazo

_ ¿por qué huyes de mí?_ le digo mirando hacia arriba _ ¡Si fuiste tú quien me dejo!_ se suelta como si mi tacto le repugnara, lo cual me duele

_ ¡justamente por eso! ¡Te dejé así que conserva tu orgullo e ignórame como yo lo hago!_ me río

_ hace solo un mes me llamaste llorando desde otro número diciendo que me amabas.. Y que me extrañabas _ me acerque y retrocedió

_ ¿¡eso nunca pasó!?

_ ¡si paso y reconocería tu voz aunque estés ronca! ¿Cuánto duraste con él? ¿Un mes? _ intenta irse otra vez, y me coloqué en su camino _ ¿por qué no publicaron su relación en tu perfil? ¿Solo te uso y se fue no es así?

_ ¡Manuel! _ dijo mamá y giré a mirarla era un mal momento _ Yanelis querida, ¿qué hacen juntos? ¡Cuando ya se separaron!

_ mamá por favor déjanos solos _ no me escucho y siguió hablando

_ ¡Deberías tener un poco de amor propio querida! No es bueno que una mujer le ruego un hombre

_ ¡Tiene razón! Iba a amamantarlo! _ por favor ahora no _ Pero para eso está usted, ¿no?_ me miró furiosa antes de irse

_ ¿por qué estabas con ella?! ¿Acaso no aprendiste con lo que te hizo?_ la ignore y entre de nuevo al restaurante.

La busqué y no estaba por ningún lado, me maldije por desperdiciar la oportunidad. ¡También me maldije por desear rogarle a una mujer que me despreció, pero que puedo hacer lo intente! Intente olvidarla y no pude

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