Guiados Por El Cielo

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LA DESOLACION DEL ADIOS.

Necesitaba terminar con todo, el murmullo de la gente, personas que iban y venían, su cabeza a mil revoluciones, y el corazón destrozado, conocidos que se acercaban a alentarla, a darle fuerza, no llegaba a los treinta años y ya era viuda, de un momento para el otro quien fue el amor de su vida ya no estaba.

Que fue lo más doloroso el aviso de su muerte, verlo sin vida, su despedida en el cementerio o tal vez ahora llegaría lo más duro enfrentarse a la cruel realidad de la soledad.

Ella no tenía familia su única familia era su esposo solo le quedaba la familia política, quienes también estaban muy alejados, su cuñado y esposa siempre rivalizaron con su marido.

Su suegra se encontraba muy enferma, ellos fueron quien la cuidaron por un tiempo ahora vivía en un asilo para anciano residencial, su enfermedad metal era muy avanzada, no quería ni pensar como le afectaría la noticia de la muerte de su hijo.

Pero ahora tenía que ser egoísta y pensar en ella, estaba sola , no tuvieron hijos, priorizaron sus carreras, ambos profesionales , eso hizo posponer la llegada de los hijos.

Deseaba que todo termine, no tenía ni idea como afrontaría lo que viene, jamás paso por su cabeza el estar separada de su esposo, se conocieron en la facultad, juntos se graduaron y comenzaron desde jóvenes, ni bien se estabilizaron económicamente, Dante le propuso matrimonio, fueron felices por seis años, tal vez se llevan bien porque se veían poco tenían diferentes horarios, pero siempre buscaban el tiempo para estar juntos aunque este último tiempo Dante estaba más alejado, ella lo relacionaba con su trabajo, él era abogado penalista, mientras su elección fue la medicina, Siempre fue divertido, comprensivo, y cariñoso, pero últimamente era muy distante.

Regresaba casi siempre tarde en la noche, ella ya dormía, y él con cuidado la despertaba con un beso.

- ¿cenaste cariño? Le pregunta media somnolienta.

¡si cariño!! Voy a ducharme, tu vuelve a dormir.

Al día siguiente se despertaba y él ya se había marchado, dejaba su aroma, su perfume en la almohada, miraba la hora, eran las siete de la mañana y él ya no estaba.

Así pasaron varios días ella llegaba y él ya se había ido no compartían más que un café apurado en el desayuno.

Ese día no fue muy distinto a los demás arrancó desde temprano, fue un día de locura, hasta la hora de regreso a casa, lo extrañaba, tal vez un presentimiento.

Una llamada telefónica bastó para paralizar su mundo, tomó la llave del coche y salió hacia el hospital, estaciono como pudo y bajo corriendo a la sala de emergencia, sus dos amigos y compañeros de trabajo estaban sentados consternados ambos se levantaron al verla llegar, él más joven tenía lágrimas en sus ojos y el mayor que era el director de despacho donde trabaja su esposo, la sostiene, no logra entender que le explicaba, todo paso en cámara lenta como una película.

De toda la explicación lo único que entendió que fue un accidente en el coche él y su ayudante fueron embestidos por otro coche, el mayor golpe fue del lado del conductor, trato de maniobrar, pero el coche giro y se volteó.

No lograron estabilizarlo y muere en la sala de urgencias antes que ella llegara.

Una y otra vez regresaba a esa escena,miles de imágenes pasaron en un instante, la vez que lo vio por primera vez, su primer beso, la graduacion de ambos, la declaración de matrimonio, toda su vida paso por sus ojos en tan sólo segundos. Una sensación de opresión en el hombro la saca de ese estado, su cuñado le hablaba, ella se encontraba en trance, hasta que él, la toma con cuidado por el hombro.

- ¿ Te encuentras bien?

- Si, ¿perdón que me decías? responde Muy confundida.

- ¿te acompaño hasta tu casa? El funeral acaba de terminar y me gustaría que me permitiese acompañarte.

- te agradezco, mi amiga me va acompañar esta noche.

La amiga a su lado, que la tomaba de la mano asienta con la cabeza.

- Lamento no haber estado para mi hermano menor y para su familia, se que ahora es tarde pero estoy para lo que necesites.

- Está bien. Si tuvieras que disculparte no sería conmigo. Pero tengo algo que a tu hermano le gustaría que tuvieses, cuando puedas pasar a recogerlo, eso sería suficiente para mí, y lo tomaría como un gran gesto de tu parte hacia tu hermano.

Ya no quería seguir hablando asi que se pone de pie media tambaleante y se retira del funeral, del brazo de su amiga y compañera, desde el accidente no habia descansado y ya no podia seguir en pie, quería verse fuerte frente a su familia política pero no podía,estaba destrozada.

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Comments

Yoleida

Yoleida

seguro le estaba montando cacho a ella

2024-06-01

0

Elizabeth Sánchez Herrera

Elizabeth Sánchez Herrera

más ➕ capítulos

2024-02-01

0

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