Cap. 4 (Pt. II)

Tanya: (Absorta) – ¿Disculpa? – (Avergonzada) – *¿Es...? ¿Es muy evidente? Acaso será porque desde que la vi por primera vez no le he quitado los ojos de encima, ¿tal vez? * – Oye, oye Blake, ¡espera! Si tu pregunta está relacionada al hecho de haberte observado durante las clases, ya me he disculpado contigo, sabes... Yo no... ¡No me malinterpretes! – (Tartajeando) – Los dibujos, son... – (Es interrumpida por Blake)

Blake: (Ríe amistosamente) – Lo siento. Es qué... – *Sí, lo es*. – Es muy evidente. – (La mira fijamente) – Te atraen las mujeres, ¿no es así? – (Sonríe)

Como si de alguna manera Blake supiese lo que la muchacha tenía en mente, ésta pareciese quitarle las palabras de la cabeza, cuan casualidad o mera coincidencia. Lo cierto es que Tanya estaba verdaderamente impresionada, y no sabía que responderle.

Tanya: (Perpleja) – Tiene que ser una broma, ¿verdad? – (Hace una pausa) – Oye, ¿de verdad esperas que responda eso? – (Avergonzada)

Ambas se miraron durante algunos segundos. Tanya se encontraba bastante incómoda, sobre todo porque nada, absolutamente nada le estaba saliendo como lo planeado.

Blake: (Sonríe mientras asiente con su cabeza) – Da. –

Tanya: (Sonrojada) – *Eso me ha tomado por sorpresa. No sé qué decir al respecto... No creo poder mentirle ya que... Es correcto. Ella está en lo cierto. * – (Cruzando sus brazos) – ¿Y eso que tiene que ver con mis dibujos? Sighs, dibujar a una compañera de clases no define tu sexualidad, quiero decir... Estamos en una academia de artes, se supone es normal. Dibujar... Ya sabes... – (Revolea los ojos)

Blake: (Negando con su dedo) – Ntch, ntch, ntch. Net. – (Sonríe) – Eso no responde a mi pregunta. –

...

Tanya: (Sonrojada) – Bueno, tú ganas Blake... – (Suspira) – Okay, erm... Si respondo que sí, ¿responderás también a mis preguntas? – (Avergonzada) – *Carajo, esto no puede estar sucediendo...* – Quiero decir, sí... Me gustas, como amiga, me agradas. – (Acalorada) – Pero... Que una chica me agrade no quiere decir que las demás chicas tengan que agradarme de la misma manera, ¿o sí? Lo que quiero decir es... – (Embrollándose) – ¿Qué te ha hecho pensar eso de mí? –

Ante la convincente pero confusa respuesta de Tanya el ambiente quedó envuelto en un apacible silencio que duró tan solo un par de minutos; solo podía oírse el teclado de Blake al escribir sobre el mismo.

Tanya: (Sorprendida) – Ahem... Realmente no entiendo el contexto de esa pregunta, ¿se puede saber el motivo, Blake? – (Intranquila) – ¿Acaso te doy "ese" tipo de vibes? – (Es interrumpida por Blake)

Blake: (Sonríe tenue) – ¡Khorosho! (¡Bien!) Bien, ¿lo probamos? ¡Ya está! Terminado. – (Mirando a Tanya)

Blake se levantó de su asiento para apagar las luces de la sala y poder probar el proyector. Rápidamente conectó el cable USB a su ordenador y automáticamente el video se proyectó sobre la gran pared blanca. Tanya solo podía mirarla, se la veía muy entusiasmada, como si lo anterior no hubiese tenido importancia. Veía su radiante sonrisa, y como las luces danzaban en su adorable mirada.

Tanya: – Oye, Blake... Ahm... – (Ruido. Sobresalto. Es interrumpida por el fuerte volumen del audiovisual)

Ruido ensordecedor.

Blake: – Oy, izvinite (Oh, lo lamento). El volumen estaba demasiado alto. Mi error. – (Modificando) – Muy bien, con eso debería de estar. Mira... – (Toma asiento junto a Tanya. Presiona enter y el video comienza a reproducirse)

Blake estaba tan cerca de Tanya que, al sentarse junto a ella, pudo sentir el exquisito aroma de su fragancia acariciándola con sutileza. Rápidamente sus mejillas comenzaron a arder, poco a poco comenzó a sonrojarse. Su aroma era demasiado cautivante para huir de él.

Ambas se quedaron en silencio, observando y analizando cómo había quedado el video, y al finalizar éste, Tanya se reincorporó de su silla arrebatada parándose frente a la muchacha. En su mirada se reflejaba la incertidumbre que la joven le dejaba por no responderle absolutamente nada, y producto de su ansiedad, a su paciencia ya no la pudo sostener más. Tanya estaba irritada.

Tanya: – Blake... – (Con total seriedad) – ¿Me dirás la verdad o seguirás evadiendo mis preguntas? – (Se cruza de brazos) – ¡Porque hasta el momento yo no he evadido ninguna de las tuyas! En cambio, tú... Te quedas allí sentada en silencio sin responderme ni una sola. – (Enojada y avergonzada)

Blake: – Okay, Okay. Está bien. Uspokoysya... (Con calma) – (Se reincorpora lentamente) – Te lo diré, porque eres muy divertida y, me caes bien. – (Hace una pausa y la mira) – Vaya temperamento tienes. – (Sonríe)

Blake se dirigió hasta la mesa y poco a poco comenzó a ordenar sus pertenencias. Apagó su ordenador y lo guardó dentro de su cartera.

Blake: (Saca goma de mascar de su bolsillo y se introduce una) – ¿Quieres uno? Quita los nervios. – (Sonríe)

Tanya: – Oh, bien... Gracias. – (Sonrojada) – ¿Entonces? – (Seria)

Blake: (Voltea apoyándose sobre la tabla mientras observa a Tanya) – Sighs... No hay mucha ciencia, verás; ciertamente nuestras miradas se cruzaron en reiteradas oportunidades e intencionalmente decidí mirarte para atraparte observándome. – (Sonríe tenue) – Tú estabas concentrada sobre tu libreta zarandeando tu lápiz de esta manera... – (Gesticula exageradamente dibujar sobre el aire) – Mientras me observabas supuse estabas dibujándome, eso es todo. – (Encogiéndose de hombros)

Silencio. Tanya tragó ferozmente.

Blake: (Risilla) – Cada vez que te veía tú fingías no verme, haciéndote la distraída. Además... – (Sonríe con picardía) – Lo descifré enseguida. Llámale "intuición femenina". – (Le guiña el ojo)

Tanya: (Sonrojada) – ¡Hey, no es divertido! Blake, ¡quita esa expresión de tu rostro, anda! – (Abatida) – Creí que te enfadarías conmigo por dibujarte sin tu consentimiento. – (Suspira) – Estuve muerta del miedo vanamente, no puedo creerlo... –

Blake: (Sorprendida) – ¿Miedo dices? – (Risilla) – Pero... Si tú tenías miedo entonces, ¿qué hay de mí? Tú eras la que me observaba y dibujaba en clases, pequeña acosadora. – (Sonríe amigablemente) – *Molestarla es más divertido de lo que pensé. Me agrada ésta muchacha... Podría divertirme un poco más, tan solo un poco. * –

Tanya: (Sonrojada) – ¿¡Qué!? No, no, no, no, ¡espera! – (Nerviosa, negando con sus manos) – ¡Te he dicho que no me malinterpretaras! ¡Te lo explicaré! Solo espera. – (Abrazando su libreta)

Tanya tomó asiento nuevamente y colocó sus pertenencias sobre la mesa, deslizándola con su mano hacia donde Blake se hallaba sentada. Aún sonrojada por la situación, se introdujo a su boca la goma de mascar de menta que la joven le había entregado a ésta minutos previos, y guardó el envoltorio en su bolsillo, a modo de atesorado recuerdo. Del interior de su bolsa sacó también su aerosol, para tenerlo consigo por si acaso, debido a que se notaba algo agitada producto de su nerviosismo.

Ambas se miran en silencio.

Tanya: – Adelante, puedes ver. Tienes mi permiso. –

Blake abrió la libreta y mientras miraba con detenimiento el primer dibujo de la muchacha, ésta le explicaba el motivo de su audacia de dibujarla a sus espaldas.

Tanya: (Seria) – No sé cómo explicarlo sin que suene un poco extraño, pero... – (Hace una pausa) – Ehr... A veces percibo cosas que otros no pueden ver. – (Coloca su mentón sobre su mano apoyándose en ella, mientras mira a Blake)

Blake se detuvo rápidamente para poner atención a sus palabras. Parecía estar interesada hacia donde apuntaba la temática de la plática.

Tanya: – En teoría, ilustro lo que me atrae a la vista... Por ejemplo, el verte aquél día en el hall, de pie y erguida con cierta aura a tu alrededor, emanando una especie de misticismo que me envolvió y terminó por acaparar completamente mi atención... – (Hace una pausa) – En ese momento supe que tenía que dibujarte así... – (Sin titubear, señalando uno de los dibujos en particular) – Puedes verlo aquí. Ese fondo difuminado negro; lo enigmático fluyendo entre tus dedos. –

Blake continuaba mirando las ilustraciones con el mismo detenimiento con el que la oía expresarse.

Tanya: (Suspira) – Siento el atrevimiento, Blake. – (Avergonzada)

Silencio.

Blake: (Sorprendida) – ¡Oy! (¡Vaya!), Ukh ty (Wow)... – (Hace una pausa) – Realmente estoy muy impresionada... – (La mira y sonríe) – ¡Mira lo bien que dibujas! – (Risilla) – Me alegra haberte servido de inspiración al menos. – *Fascinante... Ésta joven es... Verdaderamente interesante. * – (Mirando encantada las ilustraciones) – Tus dibujos son muy interesantes... Excelentes. – (Vuelve a mirar a la muchacha) – Tanya, de verdad tienes talento. –

Agradecida, Tanya le sonríe y prosigue.

Tanya: (Señalando uno de los dibujos que Blake tenía entre sus manos) – Ese de allí, ¿lo ves? Te he dibujado de esta manera porque, bueno... Trasmites ese céfiro aire cautivante y misterioso que te va llevando poco a poco hasta cubrirte y sumergirte, metafóricamente, en lo más recóndito. Y, una vez comenzado el dibujo, ya no puedo detenerme. Simplemente dejo que la pluma y la imaginación vuelen. – (Hace una breve pausa) – En éste emplee una técnica de claroscuro para hacer contraste con tu pálida piel. –

Tanya al fin se hallaba a gusto y relajada, explicándole a Blake parte del proceso de sus obras.

Blake: (Sorprendida) – Vaya... Luzco un poco sombría en ese de ahí. – (Preocupada) – ¿Mi aura es así de sombría para ti? – (Vuelve a mirar el dibujo, luego de unos segundos lentamente levanta su vista para mirarle con atención) – ¿Me veo así de tenebrosa? Luzco como en las tinieblas aquí, y en ese de allí también. – (Señalando los dibujos)

Tanya: (Ríe) – ¡Oh! ¡No, no! ¡Cielos! No, Blake... Solo es un poco de surrealismo, tranquila. – (Hace una breve pausa mientras observa junto a Blake sus creaciones) – Tu aura realmente es... Mística. – (Sonrojada la mira) – Para mí esa es tú esencia, lo que conlleva a que seas aún más llamativa ante la mirada de quien te observa, ¿me explico? De hecho, tú ehr... Tu apariencia en general, pues... Eres etérea. – (Avergonzada)

Blake: (Sonríe amistosamente) – Oh... Kak ty prekrasna! Bol'shoye spasibo! (¡Qué adorable eres! ¡Muchas gracias!) Muchas gracias, de verdad... Eres muy linda. –

Tanya: – Mhm... De todas maneras, lamento si te he retratado un tanto Gloomy, juro que no era esa mi intención. –

Blake: (Risilla) – Descuida. Respecto a eso, no te disculpes... A decir verdad, fuera de la academia acostumbro vestir prendas oscuras; podría decirse que el negro realmente es mi color favorito, da... Así es, combina con todo lo que sea que lleves puesto... – (Se reincorpora) – Oy, verdaderamente he quedado encantada con el primero de los 3 retratos que has hecho de mí, éste de aquí. – (Pensativa, lo coge con ambas manos y lo mira) – En serio, me agrada como has dibujado mi mirada en él, quiero decir, puedo verme reflejada allí... – (Mirándolo atentamente)

Tanya suspira aliviada mientras sonrojada le sonríe a la muchacha.

Blake: – De hecho... – (Hace una breve pausa) – Me agrada aún más saber cómo percibes la esencia de los demás, Tanya. Es muy interesante. – (Pensativa) – *¿Será alguna especie de innata habilidad? * – (Guarda los dibujos dentro de la libreta y se la entrega de vuelta)

Tanya: – ¿No te pareció algo anormal? – (Traga nerviosamente) – No quisiera que pensaras que soy extraña por percibir cosas y, ehr... Dibujarlas. –

Blake: (Sonríe) – Net. Para nada extraña, más bien todo lo contrario. Eres interesante. – *¡Lo sabía! Mis sentidos nunca fallan... Presentía algo inusual proveniente de esta muchacha desde que la vi dibujándome aquella tarde y... ¡Vaya! * – (Actuando encantadoramente) – ¿Sabes? Creo que somos iguales tu y yo. – (Hace una breve pausa) – Verás, a menudo suelo sentir el estado anímico de las personas que me rodean y otras, simplemente deducir por lo que están atravesando o lo que albergan en sus mentes. – (La mira) – Aunque a veces puedo equivocarme, claramente. – (Risilla) – *Tengo que acercarme a ella y conocerla aún más... Podría serme de gran utilidad. * –

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