Capítulo 8

Contenido sexual explícito para mayores de 18

Mantengo mi postura detrás de la puerta con una amplia sonrisa. Sostengo la daga en mi mano esperando que el pequeño cervatillo abra la puerta.

Los minutos me parecen segundos ante la espera. La emoción de por fin deshacerme de la idiota protagonista hace que mi ritmo cardíaco aumente. Aún más cuando la puerta se desliza suavemente dejándome saber que ella llega a por su dosis de trauma. ¿No querías escapar de tu matrimonio a costa de mi vida? Bueno, si mueres debo decirte que no te podrás casar.

¡Es que es el plan perfecto!

Los ojos verdes de Vicaria se posan en mí al ser lo primero delante de su mirada. Se lleva las manos a la boca impresionada por la escena. Se percata del cuchillo en mi poder para intentar gritar y huir. La tomo por el cabello para arrastrarla dentro de la habitación mientras cubro su boca con la ropa interior del rey.

La debilidad en mi cuerpo aumenta y el calor sube de golpe. No puedo creer que haya vuelto esa mierda. Ando en mis días parece, quizás debí tratar de robar alguna de las pastillas que me dio Ahderon la otra noche.

Aguanto los suspiros para sentarme sobre Vicaria, coloco la daga en su cuello intentando no tambalear.

—Desprecias demasiado a mi amado, una lástima, pero estaré más seguro una vez que mueras. Si ya no existes solo me podrá querer a mí —digo entrecortado por mi estado.

Ella trata de hablar y salen ruidos ahogados por la tela, parece que le falta el aire por ello. Maldita, que divertido es verte en este estado, tanto que te odiaba.

—Sabes, quería matarte y ahora se me hace divertido tenerte como mi juguete. No, no estoy loco, ustedes me llevaron a este punto, Vicaria —susurro bajando la cabeza hasta su oído—: si te haces pis encima no te mataré.

Ella cierra los ojos intentando escapar de la realidad, algo que me molesta y directamente hago un corte suave en su cuello viendo la sangre brotar con suavidad por la ligereza de la herida. Justo por eso, ella decide aceptar mi pedido y comienza a orinarse, quizás no debía ni pedirlo.

Bueno, no tengo por qué extender más esto. Clavo la daga en el abdomen de Vicaria dejando el arma ahí y levantándome como puedo para salir de aquí. La excitación por el celo aumenta cada vez más y se me hace difícil mantener mis piernas firmes. Ella trata de seguirme hasta que cae al suelo por la pérdida de sangre al deslizarse el objeto fuera de su herida.

—No le hagas nada a Ahderon... Por favor —dice estirando su mano hacia mí antes de caer desmayada.

No le haría nada malo a él... Si todo esto lo he hecho justamente para él, para que se aleje de todo lo que le hace daño... Es mío.

Avanzo como puedo maldiciendo el estado de mi cuerpo. Limpio con mis manos las manchas de rojo que hay en mi desnudo cuerpo, principalmente las de mi mejilla en la cara. Tengo que verlo, a él, necesito verlo antes de que me juzguen por todo lo que acabo de hacer.

Sigo su olor, uno que logro percibir aún más en este estado. Quiero llegar hasta él, necesito su tacto, todo...

Me sostengo de las paredes para avanzar hasta su despacho, donde siento su presencia y al abrir la puerta me lo encuentro trabajando a estas horas de la noche. Claro, ¿cómo ibas a dormir habiéndome dejado en aquel estado?

—¿Qué haces aquí? —dice Ahderon levantándose de su asiento.

—Ya no se casarán... Posiblemente, me mate luego el rey ante esto... Logré huir cuando empezó a atacarme... ¿Puedes cumplir mi último deseo, Ahd? —susurro conteniendo la respiración, no puedo evitar caer al suelo.

Él avanza hacia mí, se quita su abrigo y lo coloca sobre mis hombros. Revisa mi cuerpo encontrando las marcas de los chupones en el cuello que me dio ese hombre.

—No me penetró, solo te quiero a ti, únicamente a ti, mi Ahderon —digo rodeando su nuca con mis manos y empezando un beso posesivo, uno bastante húmedo y que solo provoca que aumente en mí el deseo de tenerlo.

No he tomado las pastillas, no esperabas encontrarme aquí, así que supongo que no te pudiste preparar para resistirme... ¿Verdad? Porque para mí el mínimo tacto es como corriente pasando por mi espalda.

Me levanta del suelo cargándome por los mulos y acorralándome entre la puerta y su propio cuerpo. Quito su camisa dejando al descubierto su cuerpo lleno de cicatrices ya curadas. Su boca muerde mis hombros y cuello saboreando todo lo que puede el área. Recupero su rostro para poder continuar con los besos mordiendo su labio inferior.

—Por favor, entra en mí, te necesito —digo entre jadeos.

Sin bajarme de su agarre él tira al suelo todo lo que hay sobre la mesa para acostarme en esta. Ni siquiera busca prepararme, aunque tampoco es que lo necesite. Baja sus pantalones colocando su miembro en mi entrada y con un jalón de mis mulos entra de forma brusca.

—Ya... Puedo... Morir en... Paz —digo arqueando mi espalda.

A penas comienzan las embestidas sufro el primer orgasmo, no iba a tardar, quería esto hace mucho tiempo y estoy cumpliendo un sueño. Él ni siquiera para, continua a pesar de que no consigo mantener la cordura y prefiero que siga así.

Me da la vuelta dejándome apoyar los pies en el suelo, sin embargo, no logro sostenerme bien por el temblor en las piernas. Mis sentidos siguen de vacaciones mientras sus manos agrandes agarradas a mi cadera mueven mi cuerpo para él seguir su juego.

Pego la frente a la mesa tratando de contener mi respiración, mordiendo mis labios para contener los gemidos que cada vez suben más el volumen. Posiblemente, todos los que pasen cerca lo escuchen y sepan del segundo orgasmo.

—Maldito Omega... —susurra Ahderon terminando por correrse dentro de mí.

—Quiero más... —comento antes de que continúe nuestro pequeño apareamiento. Quiero disfrutar antes de que se entere del caos que he hecho...

Debo aprovechar ahora que estamos drogados por mi condición al punto de que no fue capaz de preguntar la razón del porqué hay sangre en mi cuerpo ni preocuparse lo suficiente cuando me anuda en lo que queda de la noche.

***Este trabajo esta bajo contratado con NovelToon y la piratería, como la reimpresión sin permiso, están estrictamente prohibidas.***

***¡Descarga NovelToon para disfrutar de una mejor experiencia de lectura!***