13- Mi esposa

Un silencio invade la sala, la sirvienta no sabe que hacer.

-Mi señor la señora...

-Marquesa o Joven marquesa ese es su título y tu señorita Clara no eres nadie para disponer del personal, si mi nuera no está, la que da las órdenes es mi nieta, Luisa es la esposa de Javier, no te tomes atribuciones que no te pertenecen.

La joven Clara jamás imaginó que esto pasara, tenía la cabeza agachada como la sirvienta que no dejaba de temblar y la veía, intentando que la defienda.

Javier también no entendía la situación, su abuelo Adrián estaba ahí regañando a Clara y la jefa de doncellas, a Luisa con la mano roja, que corrió para verla.

-Pero qué te paso?

-Nada, al parecer alguien no puede controlar su lengua.

-Javier, ve con tu esposa a la mansión, te veo en un rato.

Le decía su abuelo, ambos salieron y fueron con sus hijos, Javier con su magia pasaba mana a su mano.

-Se nota que le diste fuerte, que paso?

-Me grito que no era nadie, que nos vamos a divorciar y para colmo que la tal Clara sería mejor que yo.

-Clara?, despediré a esa sirvienta.

-Gracias.

-Tú eres la señora de esta casa, hablaré con él personal.

Los dos llegan dónde están sus hijos, Javier solo espera que su abuelo lo llame, el se quedó en el despacho y su mirada da miedo, ahí la sirvienta lloraba y Clara seguía con la cabeza agachada.

-Tú ve por tus cosas y te vas a ir de aquí, después de insultar a mi nieta no pensarás en que te quedarás, ella no se va a divorciar de su esposo, quien te dijo eso?

-No por favor...

La doncella solo veía a Clara, se arrodilla para pedir perdón, el marqués Adrián solo pide que la saquen de ahi.

-Clara... Vamos adentro.

Clara lo sigue en silencio

-Gran marqués es un error...

-Cállate, yo mejor que nadie sabe de los sentimientos que tienes hacia Javier, no debí dejarte aquí, pero es algo que se puede remediar, te vas a ir a la capital, sé que estás sola, aun así no te quedarás, esto es algo que no voy a tolerar, Luisa es mi nieta por ser esposa de Javier.

-Mi señor, ella lo engaña, aun así dejará que se quede.

-Ella es inocente, nadie tiene derecho a difamarla, o a ti te consta el engaño, lo viste tu misma?

-No, pero ella...

-Si no ves con tus ojos y escuchas con tus oídos es un vil chisme, Javier quiere a su esposa, no dejar que nada le pase, así que prepara tus cosas y te mandaré a la capital, le daré instrucciones a mi nuera.

-Señor por favor.

Clara súplica, pero sabe que el Gran Márquez no es alguien a quien pueda manipular, desde hace años quedó huérfana de todos sus hermanos es la más joven, solo es más grande que Javier por dos años, ella creció en el Marquesado, el día de la boda de Javier ella lloraba y el gran Márquez la vio, al preguntar ella le dijo sobre sus sentimientos, le aseguro que los guardaría y jamás iba a causar problemas, algo que no cumplió, el marqués se dio cuenta de sus intenciones antes de viajar, solo jamás se imaginaba que ella sería la culpable de los rumores dentro de la mansión.

Ella se ha concentrado en realizar el trabajo de la casa desde que Luisa y Javier se separaron, ella pensó que ambos se iban a divorciar, pero Luisa regreso con él, ella estaba enojada, por eso puso a la doncella de Luisa a realizar actividades que no debe hacer.

En el despacho Javier llega con su abuelo.

-Abuelo cómo estás, que paso?

-Hola, fue un largo viaje, ya estoy viejo.

-No digas eso, te ves muy joven.

-Jaja si claro, como están los bebés

-Son hermosos.

-Que bueno, sé lo que sucedió tu madre me puso al tanto, Clara será enviada a la capital, la sirvienta dice que ella le dijo que ustedes se van a divorciar, también le insinuó que ella sería una candidata a ser tu esposa si eso pasa.

-Abuelo jamás la he visto o le he insinuado algo, como es que ella pensó eso.

-Ella está enamorada de ti, a mí me lo dijo, en ese instante debí sacarla de aquí, Javier no debe estar aquí, no solo por qué es soltera, no me gusto nada lo que dio a entender, al menos no estuviste aquí en este tiempo.

-Gracias, jamás fue mi intención que ella sintiera eso, pero vamos a la sala, te llevaré a los niños.

-Claro veré a mis lindos bisnietos, cada día estoy más viejo.

Ambos ríen, para el marqués conocer a esos dos niños es una gran felicidad.

-Pero que bonitos están su cabello rojo es hermoso, siento envidia yo no tengo así el cabello, afortunadamente en esta generación se está nivelando la magia.

-De que habla gran marqués

-Oh Lucia dime abuelo, mi madre era prima del papá de Amelia Michelob, hasta ella toda la descendencia de los Michelob nacían con cabello rojo, mi madre no era de mucha magia, mi padre no tenía magia, cuando me case mi esposa tampoco tenía magia, eso hizo que la magia de lo Michelob perdiera estabilidad, cuando mis hijos nacieron solo la más chica nació con cabello rojo, ella es la Emperatriz de Greco, mis otros dos hijos despertaron su magia hasta los 17 años, ese día mi esposa casi se muere.

-Fue muy difícil?

-Si, vinieron magos de Lyra, la magia se había descontrolado, para estabilizarla mis hijos debían tener una pareja con magia, la madre de Javier es como tu, un mago de agua y hielo, no es casualidad que tú seas su esposa.

- El pudo haberse casado con cualquier otra mujer que tuviera magia como la mía?

-Si, pero tambien debía ser poderosa, eres fuerte y aun así casi te mueres al tenerlos, tus hijos tienen un maná como el de mi prima, sus parejas deben ser con magia mínima de agua.

-Pero no quiero que mis hijos tengan matrimonios arreglados.

-Mi niña, hay muchos magos como tú, no es necesario un compromiso arreglado, lo importante es ser sincero siempre.

-Si, lo siento por haber callado se armó todo esto.

-No te culpes, mira él carga al niño con amor, pocos hacen eso, hay hombres que nunca cargan a sus hijos, él te ama, tú puedes llegar a amarlo también, solo debes abrir tu corazón.

-Yo, no sé... Si puedo llegar a amarlo...

-No pienses en amarlo, solo deja que el tiempo pase, ambos tienen un largo camino, sabes que los niños te necesitan, tal vez querías irte, pero les quitarías a tus hijos su derecho a estar aquí, tampoco puedes dejarlos, sin ti ellos serían vulnerables.

-Noooo jamás los dejaría, nadie los amara como su madre.

-Así es, una madre es irremplazable, ahora solo debes iniciar de nuevo, no pienses en el pasado, todo eso quedó atrás, jamás dejes que nadie te humille, eres la marquesa Michelob madre de los hijos del Marqués, ahora debes tomar tu lugar como señora de esta casa, la joven Clara se va a ir.

-Ella se va a ir? Por qué?

-Javier te explicará, ahora vamos, creo que ya está lo que pedi

Luisa no entendía, pero en el salón de la casa todos los empleados estaban reunidos, Javier estaba ahí incluso ella no noto cuando salió

-Los hice venir a todos para volver a decirles que Luisa Michelob es mi esposa, madre de mis hijos y Marquesa de estas tierras, nadie tiene el derecho de suponer cosas sobre ella, no voy a tolerar ningún insulto, el que no quiera obedecer puede renunciar.

Luisa pasaba al frente, y agradece a Javier por sus palabras.

todos agachan la cabeza y hacen una reverencia hacia ella, ahora aunque no quiera deberá hacer sus deberes, Javier la ha respaldado, incluso en gran marqués está ahí, todos ahora recibirán órdenes de ella.

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