De una forma diferente.

Era lunes nuevamente y Laura tenía permitido ausentarse las dos primeras horas de clases, puesto que cuando participaba de algún campeonato se le permitía faltar las dos primeras horas, se despertó mucho más tranquila en cuanto hacía sus sentimientos hacia Juan, pero había decidido aún no decirle lo que sentía, ella quería en un lugar bonito y especial lo que si quería era seguir compartiendo momentos como los que había tenía días anteriores con Juan.

Laura se alistó con calma, disfruto su desayuno que le había preparado su nana Nicolasa, aunque ya era grande para tener una nana se trataba de alguien especial, Nicolasa había visto a los tres pequeños desde Leandro, luego Luis y por último a Laura y es por eso que aún permanecía en casa de los señores. Se encontraba alistando su mochila con sus cuadernos y como ya había pasado la hora de entrada su movilidad particular no iría por ella, así que tenía que agarrar un vehículo que la llevara hasta su colegio. Cuando estaba por agarrar el auto que la llevaría, la detuvo Juan.

 - Juan: Qué haces?

- Laura: Buenos agarrando un auto para ir al colegio, hoy entro tarde así que quede sin movilidad.

- Juan: Y por qué no me avisaste para llevarte?

- Laura: Como crees? Debes tener clases en la universidad y no voy a estar molestándote por cosas tan pequeñas.

- Juan: Todo lo que esté relacionado contigo no son cosas pequeñas, son prioridad para mí además hoy tengo clases en la tarde así que señorita permita que la lleve hasta su colegio.

Juan estaba decidido a ser un caballero con ella, no la obligaría a sentir cosas por él, pero quería tratarla como la princesa que para él era. Laura aprovechó para tratar de conocer mejor a Juan, ya que en cuanto a su vida amorosa no le había conocido enamorada alguna, pero era consciente que un santo no era.

Ya en el auto Laura puso en marcha su plan para saber más sobre la vida amorosa de Juan.

- Laura: Estás seguro que tu enamorada Lourdes no se molestara?

Juan sonrío al oír eso porque recordó las palabras de Patricia y Gloria

《 Flashback. 》

- Patricia: Juan, ya nos hemos dado cuenta de que miras a Laura de una forma diferente a como nos ves a nosotras.

- Gloria: Si es cierto, te gusta y lo podemos notar.

- Juan: Me gusta y es por eso mismo que no quiero arruinar todo, que pasaría si no le gusto?

- Patricia: Jajajaj por favor! es imposible que no te hayas dado cuenta como se pone colorada cuando te ve o cuando estás cerca a ella, le gustas, no es una niña, pero aún no sabe como expresar sus sentimientos.

- Gloria: Nos contó que hablara con su mamá sobre sus sentimientos, seguro y te mencione porque ya sabes que Laura y la señora Soledad son muy unidas.

  《 Fin del Flashback. 》

- Juan: Enamorada? no es mi enamorada y tampoco tengo una, además si tuviera alguna enamorada no permitiría que me prohíba cosas mucho menos de estar con personas que son importantes para mi.

Juan no quería darle celos solo quería contestar sus dudas y darle seguridad.

- Laura: Uhm pero ella me miraba feo, no le gusta que este tanto tiempo conmigo.

- Juan: Bueno ya hablé con ella y desde el inconveniente en el parque de diversiones trato de no tener tanto contacto con ella, no permitirá que mis amigos hablen mal de ti ni de las chicas.

Laura miro hacia un costado y sonrió porque le quedó claro que Juan no tenía enamorada y eso la hacía muy feliz.

- Laura: Y como va la universidad? es muy cansado?

- Juan: Va bien, los primeros ciclos no es tan cansado, mientras vas avanzando ves mucho más sobre tu carrera y los trabajos aumentan, pero ambos sabemos que te irá bien, tienes catorce y ya vas en tercer año de secundaria, normalmente los jóvenes acabamos a los 17 el cole tú terminaras a los 16 porque adelantaste un año, no solo eres excelente para los deportes sino también para los estudios. Lo único malo es que cuando esté en mi último año, tú serás una cachimba, por cierto qué estudiarás?

- Laura: Sabías que tenía la opción de acabar el cole a los 15 años? Rechace esa opción porque no quería saltarme tantos años. Estudiaré veterinaria.

Laura era una amante de los animales, había rescatado y rehabilitado a casi 20 perritos y gatitos, a todos pudo conseguirles adoptantes, y así fue pasando el tiempo hasta que llegaron al colegio de Laura y ella antes de bajar se atrevió a despedirse con un beso en la mejilla de Juan, él se quedó sorprendido porque Laura casi nunca se atrevía a darle un beso en su mejilla, no dijo nada sobre el beso en su mejilla para no avergonzarla.

Ambos siguieron sus caminos con una sonrisa en sus labios.

- Juan: Cuídate! y por favor si necesitas ayuda o transporte avísame!

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