Capitulo 20: Entre celos y confesiones.

Decidida a explorar este nuevo territorio emocional, Bethany dejo que una risita juguetona escapara de sus labios.

-¿Sabes, Michael? Ángelo y yo hemos estado hablando mucho últimamente. Es tan divertido y encantador. ¿No crees?

-Es solo una charla Bethany -Dijo con una mirada indiferente.

-Pero, ¿qué pasa si no es solo una charla? Quizás Ángelo y yo compartimos algo más que palabras.

Michael, ante la posibilidad de que Ángelo y Bethany compartieran más que una amistad superficial, frunció el ceño ligeramente, y sus ojos buscaron los de ella en busca de alguna pista.

Bethany, sintiéndose un poco traviesa, decidió llevar las cosas un paso más allá.

-¿Te gustaría pasar más tiempo conmigo, Michael? Quiero decir, no quiero monopolizar tu tiempo si tienes cosas más importantes que hacer.

-No hay problema Bethany. Puedo quedarme un rato más -Dijo desafiante.

La pequeña victoria de Bethany la llevo a actuar con aún más confianza. En un instante, en medio de risas compartidas, de repente Bethany, con una sonrisa traviesa, tiro de su brazo y lo acostó suavemente en el césped.

-¡UPS! ¿Cómo llegamos aquí? Deberías tener más cuidado, Michael -riendo.

-Esta bien Bethany. Supongamos que necesitaba un descanso -Sonrie.

Bethany, con el sol pintando de tonos cálidos el cielo, lo miro directamente a los ojos.

-¿Sabes Michael? A veces, las cosas que queremos decir están justo enfrente de nosotros, pero tememos admitirlas. ¿Tú que piensas?

-¿A qué te refieres Bethany? -dijo con una mirada intensa.

La risa de Bethany se desvaneció, dejando lugar a la sinceridad.

-Me refiero a que, quizás, las palabras que nunca decimos son las más importantes. Y, en mi caso, creo que hay algo que necesitas saber...

Bethany, con el corazón latiendo fuerte, decidió revelar sus sentimientos, despojándose de las capas de dudas y secretos.

-Michael, no solo Anhelo me hace sentir especial. Tú también lo haces. Me gusta pasar tiempo contigo, y creo que... creo que estoy enamorada de ti.

Michael, sorprendido por la confesión inesperada, se quedó en silencio por un momento. Sin embargo, sus ojos revelaron una verdad más profunda, una emoción compartida que iba más allá de las palabras.

-Dime ¿Tú también me amas?

Las palabras de confesión aún flotaban en el aire cuando, sorprendentemente, Michael nego la realidad de esos sentimientos.

-... Creo que estás confundida, no puedes sentir eso por mí. No digas estupideces.

-No digo estupideces, es la verdad. Tengo muchas razones por la cual me enamore de ti.

-Bethany, no puedes decirlo en serio. No siento lo mismo, deberías dejarlo -Dijo con una risa nerviosa.

Bethany, sin dejarse llevar por la negatividad de Michael, decidió enfrentar la resistencia con determinación. Michael a punto de levantarse, Bethany bloqueo su intento de levantarse.

-No tan rápido Michaél, No te dejare ir hasta que habldejaréonestamente.

-Bethany esto no es necesario. Deberíamos dejarlo aquí -frunció el ceño.

Bethany con la firmeza de quién ha decidido no ceder ante la resistencia, decidió tomar medidas drásticas. Se sentó en el regazo de Michael, impidiendo cualquier intento de escape.

-No me iré hasta que aceptes tus verdaderos sentimientos Michael. Y los míos.

Michael sintiéndose atrapado y visiblemente sonrojado, intento persuadirla.

-Bethany, esto es... No deberías...

Antes de que pudiera terminar su frase, Bethany, decidida a romper las barreras, lo interrumpe con un susurro directo.

-Michael no bajaré hasta que admitas que también sientas algo Michael.

La servidumbre, que observaba discretamente desde la ventana, quedó boquiabierta al presenciar está escena intensa y apasionada que se desarrollaba en el patio.

-... Está bien Bethany. Quizás... quizás también siento algo.

Bethany triunfante y con una sonrisa juguetona, decidió sellar este momento con una acción audaz. Inclinándose hacia el, poso sus labios sobre los de Michael en un beso lleno de emociones contenidas.

La servidumbre, testigo involuntario de este gesto atrevido, dejo escapar susurros y murmullos de sorpresa ante la relevación de esta conexión apasionada.

-Esto llegó muy rápido, yo quería más drama -agrego una sirvienta.

El beso, un punto culminante entre la resistencia y aceptación, marco el inicio de un nuevo capítulo en la historia de Bethany y Michael. La confesión de sentimientos, hecha en el lenguaje silencioso de los labios que se encuentran, prometía explorar un territorio desconocido lleno de emociones intensas y revelaciones apasionadas.

Bethany se separa del beso y mira sonriente a Michael quien tenía su rostro rojo como un tomate. No se esperaba que Bethany hiciera eso, lo tomo por sorpresa.

-¿En serio me amas? -Bethany asiente- me amas para cumplir tu sueño.

-No, claro que no. Es lo que yo siento en verdad. Mi sueño estará completo si tú estás conmigo.

-Espero que digas la verdad, por qué a partir de ahora no te dejaré ir, ni con ese estúpido de Ángelo.

-Ja, ja, ja eso quiero que haga, yo tampoco dejaré que ninguna chica se acerque a ti.

-Eso me gustaría, pero piénsalo bien, no tomes está decisión tan rápido.

-Dije que si quiero estar contigo ¿Por qué dudas tanto? -Dijo molesta.

-No estoy dudando, solo estoy diciendo que lo pienses bien, por qué después de esto estarás atada a mí hasta que muera.

-Pues bien, que así sea. Pero, en cambio, si yo muero no podrás enamorarte de otras mujeres, solo puedes amarme a mi o te perturbare por las noches hasta matarte y que seas solo mío hasta en la muerte.

Michael sonrió y juntó sus labios con los de Bethany dándole un tierno y apasionado beso.

Esto era un gran logro para Michael, en serio la ama mucho y no dejará que nadie más la aparte de su lado. Este problema se había resuelto, ahora faltaba resolver otro problema para que Bethany pueda vivir tranquila y cómodamente.

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