Capitulo 10: Una disculpa sincera.

Bethany despertó muy temprano por las constantes llamadas que las molestaban desde la madrugada. Estaba segura de que esas llamadas eran de su hermana pidiéndole que recapacite de lo que estaba haciendo. Bethany ya estaba barata del mismo discurso y decidió contestar y decirle que no hará eso.

-Por favor Casandra, ya te dije que no, deja de fastidiarme, déjame ser feliz por una vez en mi vida -Dijo Bethany molesta.

-Hola, tu eres Bethany ¿Verdad? -Hablo un chico sorprendiendo a Bethany.

-¿Quién eres tú? ¿Por qué tienes el teléfono de mi hermana?

-lo lamento, no te entiendo -Dijo el chico con algo de torpeza.

-¿Cómo que no me entiendes?

En eso escucha la voz de su hermana regañando al chico que le había contestado.

-Hola Bethany, por fin contestas, me da mucho gusto.

-¿Quién es el chico que me contestó?

-Oh él, no es nadie importante. Cambiando de tema ¿Puedo hablar contigo?

-No, ya te dije que no cambiaré de opinión, déjame en paz.

-No, no, no es eso, solo quiero conversar contigo, tengamos una charla entre hermanas, por favor.

-... No creo que podamos hablar después de lo que pasó.

-Bethany por favor, solo Quiero disculparme contigo.

-¿Crees que soy estúpida? Por primera vez en mi vida puede ser completamente feliz y cumplir mis sueños.

-Y eso está bien, no me pondré en tu camino, solo Quiero hablar contigo ¿Si? Por favor.

-... Está bien, hablaremos en la cafetería en la que siempre vamos.

-si, te espero ahí, gracias Bethany -cuelga la llamada.

Bethany suspira y se acuesta de nuevo, pensando si lo que va a hacer está bien. Si quieres perdonar a su hermana, pero espera que Casandra de una disculpa sincera.

Después de un rato, se levantó y se vistió para ir a ver a su hermana.

-¿Va a salir? ¿A dónde va? -Dijo la sirvienta.

-Iré a hablar con mi hermana, supuestamente quiere disculparse conmigo, pero ya veremos si es verdad.

-¿Ya le dijo a Michael?

-No, él debe estar ocupado y además no tengo por qué decirle.

-Bueno, él le dijo que si se iba tenía que avisarle.

-Pero no me voy a tardar, mi chófer estará conmigo todo el tiempo, así que no te preocupes -Tomo su bolso y salió de la habitación.

-Permítame ir con usted por favor, no puedo dejarla sola.

-Gracias, pero sé cuidarme, además no me va a pasar nada ¿Está bien?

-... No puedo dejarla sola señorita.

-Tranquila ¿Si? Estaré aquí en media hora. No llegaré tarde.

-... Está bien, pero tome en cuenta esto, si a usted le pasa algo a mí me matan.

-Eso... está bien llegaré lo más pronto posible ¿Está bien? La llamaré cuando esté en camino.

-Esperaré su llamada, por favor vuelva pronto.

Bethany sonríe y se va. Cuando llegó al lugar acordado vio a su hermana con un chico a su lado, parecía que está discutiendo, bueno solo ella, el otro estaba callado.

-Hola Casandra -interrumpe la conversación de su hermana con aquel chico.

-Si viniste -Dijo contenta Casandra abrazándola- gracias por venir, odio estar peleada contigo.

-Yo también, pero espero que me des una disculpa sincera -Se separa del abrazo.

-Si claro. Hermana lo siento mucho, debo de admitir que lo que hiciste me dejó boca abierta y algo decepcionada.

-Lo sé.

-Pero también me alegra que hayas decidido alejarte de esta familia, aunque eso no me gusta para nada, pero es tu vida.

-Gracias por entender.

-Si, me costó mucho, pero si quiero que tengas una vida feliz.

-Gracias, me da gusto que me digas eso -Sonríe y luego mira al chico- ¿y quién es él?

-Oh él, bueno...

-Soy Ángelo Rossi -estrechó su mano- novio de Casandra.

Casandra suspira frustrada mientras que Bethany sorprendida estrecha su mano con aquel chico.

-¿En serio? Mi hermana no me dijo nada.

-Bethany, no le creas ya le dije un millón de veces que no soy su novia -Dijo mirando enojada a Ángelo.

-Pero si nos acostamos muchas veces, incluso tuvimos varias citas que lo demuestran.

-Oh por dios -Dijo aún más sorprendida- ¿Que hiciste en Italia?

-Ángelo entiéndelo solo fueron negocios.

-¿Es un negocio acostarte con los italianos? -dijo Bethany con un tono burlón y se calla cuando Casandra la mira.

-Pero ya no estamos en Italia, lo de nosotros ya no es solo un negocio.

-Ángelo querido, hablaremos de esto después ¿Si?. Ahora estoy conversando con mi hermano, estamos arreglando las cosas.

-prima mi prestavi attenzione, ma ora che siamo qui mi ignori. -Dijo molesto cruzándose de brazos.

-Ho detto che ne avremmo parlato più tardi -contesto Casandra aún más molesta.

-¿Qué? -Dijo confundida Bethany, no había entendido ni una sola palabra de lo que dijeron.

-Oh no te preocupes, no es importante. Ahora solo hablemos de nosotras ¿Qué vas a hacer ahora que eres libre?

-Oh bueno, no lo sé, tengo la mente en blanco, por ahora estoy ayudando a Michael con la empresa.

-Ya veo, ¿Y qué paso con tu escritura?

-Oh eso, bueno, no creo que me sea de buena ayuda la verdad.

-Pero no decías que...

-Sí, sé lo que dije, pero al leer mi diario de nuevo, me di cuenta de que solo lo hice porque quería escapar de mi horrible vida.

-¿Eh?

-Escribía cualquier cosa para que me sacara de la triste realidad, escribí un montón de cosas que me creí que podría ser una gran escritora, pero al final no fue así.

-¿Estás segura? -Toma su mano- he leído algunas de tus historias y son increíbles. Deberías de seguir Haciéndolo.

-No, solo era una fantasía que quería que se hiciera realidad, pero ahora que he salido de ahí, mi mente ha estado tranquilo sin necesidad de escribir otra cosa porque ya lo tengo.

-No me había dado cuenta de eso, pero me alegra que ahora estés bien.

-Casandra no me dijo que escribías, eso es genial -hablo Ángelo antes de que Bethany pudiera responder.

-Oh lo hacía antes, pero no sé si vaya a hacerlo otra vez.

-Me gustaría leer una de tus historias.

-¿En serio? Tengo algunas en la casa, tal vez la próxima vez que nos veamos te los daré.

— Excelente, podemos vernos este sábado para que veas mis pinturas.

-¿Tú haces eso? -Ángelo asiente- me encantaría verlas, ¿A qué hora, cuando y dónde nos podemos reunir para ver tus pinturas?

-A esta hora, pasado mañana y en mi casa, ahí tengo todas las pinturas que quieras ver.

Bethany y Ángelo siguieron conversando sobre las pinturas, ignorando completamente a Casandra que los miraba un poco molesta y algo aburrida. Pero aun así se contentó al ver a su hermana otra vez alegre.

Y por Cierto se quedó sumergida en la conversación que se olvidó totalmente de la hora acordada en que iba a llegar a la casa. Cuando llegó vio a la sirvienta blanca como la nieve, parecía que había entrado en pánico y al parecer lloró también.

-Perdón, se me había olvidado la hora -Dijo Bethany- no lo volveré a hacer.

-¿Cómo pudiste haberlo olvidado? Casi se me sale el corazón de la boca, ¿Sabes que hora es? -regaño la sirvienta.

-¿Las 6 de la tarde?

-Son las 9 de la noche Bethany, el señor Michael la llamaba a cada rato, tuve que inventar una excusa para que no la regañaran.

-... Lo siento, no lo volveré a hacer.

-Entonces, no saldrá de nuevo ¿O si?

-... Saldré con mi hermana este viernes y llegaré tarde, pero tranquila yo le diré a Michael así ya no te podrás preocupar tanto por mí.

-...

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